La furia del huracán ‘Irene’ podría tocar Canadá
La furia del huracán ‘Irene’ podría tocar Canadá

Imagen suministrada por el satélite GOES de la Adminstración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA), este jueves 25 de agosto de 2011, donde se observa la situación del peligroso huracán "Irene", que continuaba desplazándose sobre el noroeste de Bahamas
Redacción, Efe. Toronto / Miami / Washington.- El cada vez más fuerte huracán “Irene” se dirigía este jueves desde el Caribe hacia la costa este de Estados Unidos, y no se descartaba que afectase también a la parte atlántica de Canadá. “Irene” podría llegar a la costa de Carolina del Norte, EE UU, este fin de semana como un gran huracán, con vientos de más de 177 kilómetros por hora.
La tormenta podría compararse al huracán “Floyd”, un devastador fenómeno que en 1999 golpeó Carolina del Norte, causando daños por valor de miles de millones de dólares, tanto en Estados Unidos como en Canadá.
El huracán “Irene” apunta su furia hacia Estados Unidos, donde miles de personas han sido evacuadas, tras golpear fuertemente al archipiélago de Bahamas con vientos máximos sostenidos de 185 kilómetros por hora.
“Irene”, que ha dejado al menos seis muertos a su paso por el Caribe, podría desembarcar el sábado en Carolina del Norte, según informó este jueves el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos en su boletín de las 03.00 GMT.
De momento se mantenía como un huracán categoría 3 en la escala de intensidad Saffir-Simpson, de un máximo de cinco y el CNH vaticinaba un fortalecimiento, con posibilidad de que se transforme en un ciclón de categoría 4.
Para que sea elevado a esa categoría sus vientos máximos sostenidos deben alcanzar los 210 kilómetros por hora.
Este jueves por la noche, “Irene” se encontraba a 785 kilómetros al sur-suroeste de cabo Hatteras, en Carolina del Norte.
El CNH alertó que “Irene” es un “gran ciclón” cuyos vientos con fuerza de huracán se extienden 130 kilómetros desde su centro y los de fuerza con tormenta tropical a 465 kilómetros.
“Irene”, el primer huracán de la temporada de ciclones del Atlántico, azotó Puerto Rico, República Dominicana, Haití y Turcos y Caicos.
En el sureste de Bahamas arrasó con el 90 por ciento de las casas en varios asentamientos, cortó el suministro del servicio de energía eléctrica y ocasionó inundaciones.
Por otra parte, el CNH también indicó que la décima depresión tropical, que se formó este jueves al este del Atlántico, estaba localizada a las 03.00 GMT a 940 kilómetros al oeste del archipiélago africano de Cabo Verde. El sistema tropical tiene vientos máximos sostenidos de 55 kilómetros por hora y puede transformarse en la tormenta “José”. “Se pronostica un fortalecimiento durante las próximas 48 horas y la depresión tropical se convertiría en tormenta el viernes”, vaticinó el CNH.
La gobernadora de Carolina del Norte, Bev Perdue, declaró este jueves el estado de emergencia en el este de su territorio, puesto que “Irene” representa “una amenaza significativa” y ordenó la evacuación obligatoria de la zona de los Outer Banks.
“Irene es una amenaza muy peligrosa para nuestro estado y debemos tomar las medidas de precaución para garantizar la seguridad de residentes y visitantes además de la infraestructura y propiedades de nuestra costa”, afirmó Perdue en un comunicado.
En este estado, la Patrulla de Caminos calcula que más de 300.000 personas abandonarán los condados más afectados y se dirigirán a la capital del estado, Raleigh, o el sur de Virginia.
Se han habilitado ya refugios en las zonas del interior para los evacuados de los condados en peligro, como Dare.
Asimismo, los estados de Virginia, Maryland, Nueva York y Nueva Jersey decretaron el estado de emergencia para comenzar a hacer frente a los posibles daños que el ciclón pudiera causar.
“Esperamos lo mejor pero nos preparamos para lo peor”, afirmó en una rueda de prensa el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, quien anunció los planes de la ciudad ante la llegada inminente del huracán, que en estos momentos se encuentra en Bahamas.
Bloomberg, quien recordó que esta misma semana los neoyorquinos ya comprobaron “el poder de la Madre Naturaleza” tras el terremoto de 5,8 grados de magnitud que se sintió el martes en la ciudad, dijo hoy que si llegara a empeorar la situación estaría facultado para ordenar una evacuación obligatoria que afectaría a 270.000 vecinos.
A su vez, las líneas aéreas han comenzado ya a cancelar vuelos en las zonas afectadas y ofrecen a quienes lo deseen cambiar sin recargo la fecha de viaje para esos destinos.
American Airlines y su filial American Eagle han cancelado 126 vuelos este jueves, la mayor parte en la zona del sur de Florida y las Bahamas.
Tanto esta compañía como el resto de las líneas aéreas calculan que a lo largo de los próximos días se cancelarán más vuelos, dependiendo del camino exacto que tome el huracán.
Las predicciones advierten de la posibilidad de una crecida del mar de decenas de centímetros debido a las lluvias y los vientos.
Mientras, la Marina estadounidense también comenzó a trasladar sus buques de guerra del sureste del estado de Virginia a zonas alejadas de la posible trayectoria del huracán, para protegerlos de las fuertes lluvias, vientos y oleajes asociados a este.
“Toda la costa este está en alerta por fuertes vientos, tormentas e inundaciones”, reiteró el director del CNH, Bill Raid, en una conferencia telefónica, quien remarcó, además, que el comportamiento del ciclón es “muy imprevisible”.
La Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) colabora en las evacuaciones, según explicó su director, Craig Fugate, quien volvió a pedir a la población que se informe permanentemente de la evolución de “Irene”.
Fugate indicó también que el presidente de EE UU, Barack Obama, de vacaciones en la isla de Martha’s Vineyard (Massachusetts) hasta el próximo sábado, fue informado de nuevo este jueves sobre el huracán y las medidas que se están adoptando para afrontarlo.
“Irene”, el primer huracán de la temporada de ciclones del Atlántico, ya ha dejado a su paso por el Caribe dos muertos en Haití, tres en República Dominicana y otro en Puerto Rico.
La peor tragedia reciente causada por un huracán en el país se remonta a agosto de 2005, cuando el huracán “Katrina” anegó Nueva Orleans.
En ese desastre murieron unas 1.800 personas, 180.000 casas y edificios quedaron destruidos, y se registraron daños valorados en más de 75.000 millones de dólares.
