Enlazar a material difamatorio no es difamación
Enlazar a material difamatorio no es difamación
El Popular. Toronto. Si una persona crea un enlace a una página web con material difamatorio, esta acción no constituye en sí misma un delito de publicación de material difamatorio, según dictaminó por unanimidad el Tribunal Supremo de Justicia este miércoles.
El tribunal falló en contra de Wayne Crookes, un exgerente de campaña del Partido Verde, que argumentó que los enlaces a las páginas web con declaraciones difamatorias eran lo mismo que si la persona publicaba material difamatorio.
En su fallo, la Corte Suprema dijo que hay una diferencia entre hacer un simple enlace a un sitio web y alentar activamente a una persona para que siga ese link hacia una página web con contenido difamatorio.
“Haciendo referencia a la existencia y/o localización de contenidos a través de hipervínculos o de otra manera, sin más, no es la publicación de ese contenido”, escribió el tribunal haciendo referencia a su decisión.
“Solo cuando la persona presenta el contenido del material enlazado de tal manera que en realidad repite el contenido difamatorio se debe considerar como ‘publicado’ por la persona que lo enlazó”, continua el texto, el cual subraya que este enfoque “promueve la expresión y respeto hacia las realidades de Internet, creando al mismo tiempo las limitaciones de poca o ninguna capacidad del demandante para reivindicar su reputación”.
El juez Stephen Kelleher, de la Corte Suprema de Columbia Británica, desestimó el caso de Crookes, alegando que los vínculos fueron como una nota o una referencia web en un boletín. El demandante había puesto en marcha varias acciones por difamación contra los miembros del Partido Verde de Canadá, Google, Wikipedia y Myspace.com.
“El fallo es una gran victoria para Internet”, opinó Michael Geist, profesor de Derecho de la Universidad de Ottawa que ocupa una cátedra de investigación en Canadá sobre Internet y la ley de comercio electrónico.
“La Corte Suprema de Canadá entiende claramente la tecnología, creo que ellos entienden que Internet es lo más importante en este caso, comprender la relación directa, y sin juegos de palabras, entre los hipervínculos en Internet y la libertad de expresión y la capacidad de difundir la información”, declaró Geist.
El caso fue llevado ante los tribunales más importantes del país por el residente de la Columbia Británica Wayne Crookes, un exgerente de campaña del Partido Verde, y su compañía, West Coast Title Search Ltd.
Crookes demandó a Jon Newton, encargado de la web p2pnet.net, por daños y perjuicios por los enlaces que contenía un artículo de Newton publicado en su página web en 2006. Según el demandante, el artículo vinculado a otro sitio web contenía artículos sobre él que eran difamatorios. Tras pedir a Newton que lo retirara y este se negara, Crookes decidió emprender una acción legal.
El abogado de Crookes, Donald Jordan, sostuvo que mediante la creación de los enlaces, el mismo Newton era un editor del material presuntamente difamatorio y que los hipervínculos son parte del contenido del artículo principal. Al vincular una página web, se hace una invitación y facilita al lector ir hacia ella, argumentó el abogado.