Recordando a los caídos del ‘HMCS Kootenay’
Recordando a los caídos del ‘HMCS Kootenay’
El Popular. Toronto.- Hugh MacPhee es uno de los supervivientes que, junto con una docena de excompañeros del de HMCS Kootenay, acudió este domingo al Canadian Peacetime Sailors Memorial de Halifax para recordar a los compañeros que fallecieron en el peor desastre de la Armada Canadiense en tiempos de paz.
El 23 de octubre de 1969 el HMCS Kootenay sufrió una explosión y un incendio acabó con la vida de nueve personas y dejó heridas a otras 55. El destructor estaba haciendo pruebas de potencia en el Canal de la Mancha cuando la caja de cambios de estribor explotó, enviando una bola de fuego a través de la sala de máquinas y a la largo del pasillo principal.
McPhee fue uno de los casi 100 miembros de la tripulación original que se reunieron este domingo en un parque junto al mar para depositar coronas y recordar a sus amigos caídos. “El lema de nuestro barco fue ‘Estamos en acción’, y todavía puedo reunir algo de fuerza de eso”, dijo en declaraciones a la agencia The canadian Press. “Hablamos de ellos, nos ayudamos mutuamente, porque muchos de los chicos sufrieron estrés post-traumático después del accidente”, añadió.
McPhee explicó que esa mañana estaba en la cafetería por encima de la sala de máquinas y que sintió cómo le sacudía la presión de una explosión. El superviviente recordó que fue un caos y vio cómo los miembros de la tripulación escaparon del humo y fueron a ayudar a sus amigos y a tratar de apagar el fuego.
Joe Homer, ahora un médico de familia en Hamilton, Ontario, fue el primer oficial médico que bajó a la cubierta del Kootenay y fue lanzado de lado a lado, a toda velocidad y sin ningún tipo de control, ya que nadie estaba al mando del timón.
“Estaba a unos siete kilómetros de distancia, en el Saguenay [otro de los barcos que participaban en las maniobras], y allí había un helicóptero que aterrizó y empezó a buscar personas heridas o muertas”, recordó Homer, quien en esa época era un cirujano-teniente. “El barco fue engullido totalmente en el humo y el fuego y no pudimos llegar a ninguna de las instalaciones médicas a bordo, así que nos tuvimos que quedar en la cubierta superior porque no podíamos ir a ningún otro sitio”, dijo a The Canadian Press.
Después de la explosión en el Kootenay, el sistema de las Fuerzas Canadienses de honrar a la valentía y al coraje se vio revisado y seis miembros de la tripulación fueron los primeros en recibir la Medalla al Valor y la estrella del Valor.