Un cambio de líder es siempre bueno y sano

Un cambio de líder es siempre bueno y sano

Siempre es bueno que el líder de una manada sea relevado cada cierto tiempo

Siempre es bueno y sano que el líder de la manada sea relevado, los animales saben que la savia nueva incorporará otro vigor y dará la fuerza necesaria a la especie ayudándola en su conservación, además de mantenerla mejor en cuanto a los cuidados que ellos como grupo necesitan.

Es por ello que cada cierto tiempo estos cambios de liderazgo se suceden en la gran mayoría de las especies animales acostumbradas a vivir dentro de una comunidad social. Si en nuestra casa tenemos más de un animalito de compañía comprobaremos que esto es así, el joven esperara el momento oportuno para disputarle al más viejo su posición jerárquica en la manada, ese desafío constante lo realiza el jovenzuelo desde muy temprana edad , siempre probando si el líder está plenamente en condiciones para poder dirigir la manada y nosotros como amos y miembros de ese mismo grupo no estamos ajenos a este constante desafío, es por ello que no debemos jamás dejar de demostrar nuestro liderazgo o permitir que nuestro amigo realice algunas cosas que antes le estaban prohibidas por pereza o simplemente por no considerar importante dichos desafíos hacia nuestra autoridad.

Con el correr del tiempo muchas veces nos despreocupamos y permitimos que nuestro amigo eluda ciertas obligaciones que antes cuando cachorros y en la etapa de crecimiento y enseñanza nunca le aceptamos, tal es el caso que al salir a pasear ya nuestros amigos no caminan tan junto a nosotros como cuando más jóvenes o bien al salir por la puerta les permitimos que ellos lo hagan primero o simplemente no nos importa que no se sienten cuando nosotros nos detenemos en la calle, esas conductas por nosotros aceptadas sin reprimirlas en ese momento significan para ellos que ya nuestra capacidad de liderar esta cuesta abajo y que ellos pueden asumir dicha responsabilidad aunque en el fondo no les agrade.

Es así como muchos amos a diario me consultan respecto a cambios notables respecto del comportamiento de sus amigos, actitudes que hoy tienen y que nunca antes habían presentado, tirar de la correa, orinarse dentro de casa ya siendo adultos, ladrar en demasía etc., y es fundamentalmente porque nosotros como amos dejamos ya de preocuparnos tanto por la conducta de nuestros amigos y hacemos vista gorda a esas pequeñas desobediencias en su actuar diario.

Llevo muchos años trabajando con animales y siempre en casa ha vivido más de alguno conmigo, no obstante por muy bien entrenado que este y aunque sean ya viejos, en cada paseo diario vuelvo a ejercitar las ordenes básicas con ellos, el andar junto a mí, acudir a mi llamado, sentarse cuando yo me detengo, que se eche si se lo ordeno etc., comandos que se los enseñe hace bastantes años cuando eran cachorros pero que se que con el tiempo si no se los recalco lo pasaran por alto sin que signifique que lo hayan olvidado sino que más bien es como una manera de probarnos si aun estamos vigentes y podemos seguir guiando la manada.

Si bien entre ellos como antes les comentaba es necesario este recambio, pues excepto en muy pocas especies animales como es el caso de las manadas hembras de elefantes donde siempre la más vieja es quien dirige la manada y ella decide cuando retirarse y dejarle el mando a la que en edad le antecede, el resto requiere de esta alternancia en el poder, pues el nuevo líder siempre aportará ideas nuevas , estará más atento para proteger a su manada, guiarla y defenderla, además que su descendencia producto de su juventud genéticamente hablando estará mejor dotada.

Los viejos líderes en cualquier manada con el pasar de los años se desgastan, sus cuerpos sienten el rigor natural del constante desafío que se les exige, cuidar criar y proteger, encontrar el sustento, emigrar de acuerdo a como se presenten las diversas estaciones, invierno y verano, no perder el rumbo guiando a la manada hacia zonas más fértiles y provistas de la alimentación necesaria es para ellos una constante preocupación que tarde o temprano les pasa la factura.

Lo mismo les sucede a nuestros amigos en casa, si bien no se enfrentan a los mismos desafíos para ellos también el mantener el escalafón dentro de la jerarquía de la manada les significa un estrés constante, por ello tarde o temprano dejaran que el joven sea quien ocupe su lugar, eso si durante esa transición no estarán exentas ciertas discusiones y desafíos más o menos violentos según sea la resistencia que interponga el que ocupe un puesto superior en la manada.

Los primeros intentos de desafío de los cachorros son rápidamente frenados con un gruñido o ladrido del más viejo, mas tarde a veces requieren de un pequeño mordisco sin dañarlos pero para frenar esos ímpetus rebeldes, hasta que el viejo se da cuenta que el único camino que le queda es esconder su cola y dejar que sea otro quien en definitiva asuma ese papel.

Pero por ello no debemos de preocuparnos, pues a diferencia de lo que pudiésemos pensar o creer en el sentido de que el más viejo pueda sufrir con dicha situación, para él en definitiva es realmente una liberación total de la responsabilidad y ellos saben que el nuevo rumbo que seguirá su vida será mucho más placentero tranquilo y realmente empezaran a disfrutar de su vida durante su retiro.

Esta debería ser también para nosotros los humanos una bonita experiencia, el retiro, ya que si te preparas psicológicamente para ello, resulta ser una época del reencuentro contigo mismo, disfrutar de esa libertad que durante muchos años anhelamos y que ya llego, hacer lo que siempre quisimos, leer, pasear , ver una buena película en la tv o en el cine, asistir a algún espectáculo, viajar, en definitiva tener tiempo para disfrutar de la familia sin la obligación constante de proveerles de lo necesario para su subsistencia y educación, pues ya los criamos y le dimos todo cuanto pudimos , siendo además un lindo momento para encender aun mas esa llama del amor con tu compañera fiel que dedico junto a ti gran parte de su vida a criar y proteger a los tuyos, reírte con tus nietos, a veces permitiéndoles más libertades que las que les disteis a tus hijos, pues tu papel cambió y los abuelos somos y seremos siempre unos viejos que tendremos mucho más tiempo y paciencia para disfrutar con ellos.

Los animales con su inmensa sabiduría siempre serán los que sin hablar nos enseñaran el camino de la vida, la simpleza de sus actos y el amor con el que envuelven toda su existencia debería ser siempre nuestra mejor guía para enfrentar de la mejor manera nuestros desafíos sabiendo que ellos siempre fieles nos acompañaran.

Aprovecho esta publicación para hacerles llegar a todos un fuerte y cariñoso abrazo con los mejores deseos para esta navidad y los mayores éxitos en el nuevo año que comienza y para mis queridos amigos del reino animal, lengüetazos, ronroneos y muchas caricias.

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