Canadiense a punto de ser ejecutado en Irán

Canadiense a punto de ser ejecutado en Irán

Acusado de espionaje por un correo electrónico que le envió a su hermano, este canadiense de origen iraní enfrenta la pena de muerte en Irán, mientras su familia busca apoyo en Canadá para liberarlo.

TORONTO.- En Irán las penas de muerte se cumplen y más cuando se tratan de presos políticos, este es el miedo de los familiares de Hamid Ghassemi, un canadiense que se encuentra en el corredor de la muerte, condena impuesta por supuestos cargos de espionaje realizados en el 2009.

Aunque para sus abogados no hay “ninguna razón para llevar a cabo la sentencia, la esposa del condenado a muerte, Antonella Mega, dijo que recibió la noticia de Irán de que la suspensión de su muerte fue revocada, y él era elegible para la ejecución en la horca en cualquier momento. “Fue como una bofetada en la cara”, dijo Mega, porque un juez que había examinado el caso de Hamid y dijo que creía que era inocente.

“Hemos estado viviendo con este miedo durante tanto tiempo, no sé cómo podemos seguir adelante”, dijo Mega.

Ghassemi,  de 43 años, emigró de Irán a Canadá después de la revolución islámica de 1979. Era un ciudadano canadiense que había hecho viajes anteriores a visitar a su familia sin ningún incidente. Sin embargo, en una visita fue capturado y detenido, y posteriormente fue acusado de espionaje. Él fue puesto en confinamiento solitario en una celda de Teherán y en 2009 condenado a muerte tras un juicio en el que no pudo defenderse.

Los cargos se derivaron de la detención de su hermano Alborz Ghassemi, un antiguo oficial naval, quien fue acusado anteriormente por los mismos cargos y murió después de los interrogatorios y la tortura de la que fue víctima.  Hamid, quien no había participado en actividades políticas, fue acusado de escribir un correo electrónico a su hermano que lo implicaba en el espionaje.

Las autoridades canadienses, así como Amnistía Internacional, han protestado por su condena y pidió su liberación. “Esta es una noticia preocupante”, dijo el senador Linda Frum en un correo electrónico. “El régimen iraní debe detener la matanza de su crueldad grotesca contra su pueblo y su uso de un asesinato judicial. La persecución de Hamid Ghassemi es una farsa. ”

Irán se enfrenta actualmente con Occidente por sus ambiciones nucleares, e Israel ha hablado abiertamente de la posibilidad de lanzar un ataque contra sus instalaciones nucleares. La economía de Irán está muy afectada por las sanciones.

Como una ola de protestas políticas se inició con la elección presidencial de 2009, las ejecuciones se han acelerado. La pena de muerte, en general, y las ejecuciones públicas, en particular, son el instrumento más importante del régimen iraní para crear miedo en la sociedad dicen los defensores de derechos humanos.

En su informe anual sobre la pena de muerte en Irán se dice que al menos 676 personas fueron ejecutadas el año pasado, ante lo cual se cree que el canadiense está en peligro de ser ejecutado