Escuelas católicas serían obligadas a aceptar homosexualidad dentro de sus aulas

Escuelas católicas serían obligadas a aceptar homosexualidad dentro de sus aulas

Las escuelas de carácter religioso deberán aceptar las manifestaciones homosexuales dentro de los recintos escolares y las agrupaciones que se creen entre estudiantes con la palabra gay.

TORONTO.- Una gran polémica ha surgido entre los católicos de Ontario, luego que un nuevo proyecto de ley provincial que busca obligar a todas las escuelas de carácter religioso a que acepten todo lo relacionado con la comunidad homosexual en sus aulas de clase, incluida las relaciones, los grupos y hasta matrimonios del mismo género.

Mientras los representante de la Iglesia Católica Romana en la provincia, especialmente los que dirigen las escuelas y colegios se oponen al proyecto, argumentando que sería apoyar un estilo de vida gay como enseñanza, la Asociación de Ontario Docentes Católicos que representa a 44.000 profesores de Ontario dijo que no se debe tener miedo porque esos sería ignorancia.

“Los obispos católicos necesita reflexionar sobre una alianza con la comunidad  gay”, dijo Kevin Dwyer, presidente de la Asociación de Maestros de Ontario católica.

El proyecto de Ley busca que todos los consejos escolares deben poner en práctica políticas para luchar contra la discriminación contra los homosexuales, que deben aceptar que se creen organizaciones de esta parte de la sociedad dentro de sus institutos y que se debe atacar cualquier tipo de acoso escolar contra los estudiantes que creen o desarrollen clubes o eventos de carácter homosexual en donde además se podrá incluir la palabra Gay. El fundamento es la lucha contra el racismo, el género, la discapacidad y la homosexualidad.

Para la Asociación Católica de Directivos Escolares de Ontario y los grupos evangélicos el proyecto está equivocado porque va a crear el aislamiento de grupos, va a crear guetos en las escuelas y ellos son los que tendrán que lidiar con el acoso.

Para uno de los grupos evangélicos de aprobarse la Ley, la provincia se enfrenta a años de litigios en las  escuelas religiosas y con los padres de los estudiantes en las escuelas públicas.

“Francamente, creo que es contraproducente para el gobierno de Ontario intimidar a las escuelas religiosas a adoptar las medidas que sean contrarias a sus creencias”, dijo Faye Sonier, consejero legal para el grupo evangélico y el autor del informe.

Para algunos la ley es un ataque a la libertad religiosa y va a ser perjudicial para las personas a las que pretende ayudar.

Según los críticos de la nueva norma, la Ley en lugar de permitir que los estudiantes aprendan acerca de sus diferencias, el proyecto va a aislar a los estudiantes en grupos sobre temas específicos.

Pero Helen Kennedy, directora ejecutiva de EGALE Canadá, el mayor grupo de defensa de homosexuales en el país, dijo que los grupos religiosos se utilizan el concepto de la libertad religiosa como una cortina de humo para ocultar su verdadera preocupación, porque no aceptan ni siquiera la palabra gay entre sus estudiantes y mucho menos que anden abrazados.

Para las organizaciones en pro de la comunidad gay, los homosexuales en las escuelas se sienten solos, señalados y con mucho miedo, por lo que no puede prosperar académicamente.

Cabe recordar que el problema sobre el manejo de los niños homosexuales en las escuelas se agudizó el otoño pasado después de que un joven de 15 años de edad, Jamie Hubley, hijo de un concejal de la ciudad de Ottawa, se suicidó debido al acoso que recibió de sus compañeros.

Proyecto de Ley 13, que es probable que pase, porque ya que cuenta con el apoyo de los liberales y los demócratas, tiene su fuerte oponente entre los obispos católicos y líderes de la educación, que están tratando encontrar apoyo para tumbarlo.

Según Teresa Pierre, directora de un grupo de padres dijo que  los obispos católicos están manteniendo todo con un bajo perfil, ya que pueden tener miedo de ser etiquetados homofóbico. Ella dijo que la Iglesia debe dejar claro al público que sus enseñanzas no se basan en el fanatismo.

Las estadísticas sobre homofobia no son fáciles de conseguir sin embargo en 2006 el Toronto District School Board llevó a cabo un estudio para determinar las causas de la intimidación dentro de las escuelas y encontró que la razón más citada fue “la imagen del cuerpo, el uso del idioma o los acentos, el sexo y la religión.

Según las escuelas católicas ellos enseñan que los homosexuales «deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Todo signo de discriminación injusta en su relación debe ser evitado, por lo que creen no es necesaria la ley.