El plan de recortes cobra sus primeras víctimas
El plan de recortes cobra sus primeras víctimas

Un grupo de soldados en una base militar del Québec, la provincia más afectada por los recortes en Defensa.
OTTAWA.- Los empleados públicos de los diferentes departamentos federales conocerán en los próximos días cuál es su futuro laboral tras el plan de Ottawa de recortar 19.200 empleos públicos en los próximos años.
Los líderes sindicales han difundido ya algunos detalles, aunque mantienen su promesa de no divulgar toda la información hasta que el personal afectado haya sido notificado directamente.
John Gordon, presidente del Public Service Alliance de Canadá, ha dado su visto bueno para que los departamentos federales anuncien sus decisiones al personal.
Gordon no aclaró “cuándo y cómo” van a recibir estos avisos los funcionarios públicos, si bien muchos se dieron a conocer a lo largo de la jornada de ayer.
El Sindicato de Empleados de la Defensa Nacional, que representa a los trabajadores civiles del Ministerio de Defensa canadiense, detalló ayer que 1.119 trabajadores perderán su empleo como resultado del nuevo presupuesto federal.
El sindicato aseguró que los ceses se extenderán por todo el país, afectando desde la investigación y el desarrollo hasta los servicios de alimentos.
La administración Harper ordenó al Ministerio de Defensa recortar más de $1.100 millones en gasto público durante los próximos tres años, todo ello manteniendo intactas las fuerzas de combate regulares y de reserva.
Pese a ello, las bases situadas en el Quebec y Notario serán las más afectadas por las reducciones en Defensa.
En cuanto a profesiones, las más castigadas serán el personal de seguridad radiológica, el servicio de cocina, los técnicos de armas y municiones, los maestros de inglés, los mecánicos de camiones pesados, los asistentes de laboratorio, los controladores y los higienistas dentales.
La mitad de los recortes conciernen a los civiles que trabajan para el ejército canadiense, con 585 puestos de trabajo eliminados. Otras reducciones significativas se están haciendo en investigación y desarrollo.
Es el caso de Defence Research and Establishment Canada, la rama del ejército que investiga en una nueva tecnología para proteger a las tropas de campo.
El sector de la comunicación también se ha visto afectado por el recorte federal. La cadena pública CBC/Radio-Canada prevé una supresión de 650 puestos de trabajo en tres años, empezando por 475 en este año fiscal.
Esta medida responde a la decisión gubernamental de retirar la ayuda de $115 millones de financiación que recibirá el ente público en los próximos tres años. El presidente y consejero delegado de la CBC, Hubert T. Lacroix, dijo que la empresa se enfrenta a las presiones financieras de $200 millones.
“Esperamos ser capaces de compensar eso con $50 millones en nuevos ingresos, lo que nos deja con 150 millones de dólares que tendremos que solventar a través de reducciones y mejoras operativas”, dijo Lacroix en un comunicado.
Entre las mejoras, se esperan mayores ingresos digitales y el aumento de espacio publicitario y de patrocinadores.
El presupuesto federal anunciado la semana pasada incluye un plan general para ahorrar al estado $5.2 billones al año.
Este ahorro se financiará a través de la reducción del número de trabajadores públicos y la eliminación de algunos programas promovidos por el gobierno.
El presupuesto acarreará la pérdida de 19.200 puestos de trabajo, pero se espera que 7.200 de esos empleos se arreglen mediante recolocaciones y jubilaciones. Según las normas vigentes acerca de los despidos en el sector público, podrían ser más de 19.200 las personas que reciban avisos de despido.
El plan de Workforce Adjustment, que gestiona este proceso de reducción de empleo, prevé varias opciones para minimizar el impacto entre los funcionarios. Es el caso de la jubilación anticipada o el trueque, que permite el intercambio entre el empleado afectado y un trabajador no afectado que haya expresado su deseo de retirarse.
Estas reglas incitan a la jubilación de los trabajadores mayores, eliminando las penalizaciones por jubilación anticipada. Cuando estas opciones se hayan agotado, los puestos restantes se dividirán en función de mérito y no de antigüedad.
Aquellos que finalmente se queden sin trabajo tendrán prioridad a la hora de aceptar un nuevo empleo, incluyendo la garantía de una “oferta de trabajo razonable”.
La alternativa sería un período de 12 meses remunerados mientras se aclara su futuro laboral.
Comments (0)