Los vecinos de Scarborough, claves para encontrar a los culpables del tiroteo

Los vecinos de Scarborough, claves para encontrar a los culpables del tiroteo

Uno de los dos cadáveres que se cobró el tiroteo

Toronto.- Pese a que fue una barbacoa multitudinaria, a la que asistieron más de 100 personas, y de la que todo el barrio estaba enterado, va a ser difícil encontrar testigos que ayuden a esclarecer quién estuvo detrás del tiroteo que la pasada madrugada del lunes al martes sacudió la ciudad, al menos durante los primeros días. La razón: el miedo a las posibles represalias.

La policía y el gobierno, preocupados por la inaudita ola de violencia que sacude Toronto de unos meses a esta parte, han puesto todas las facilidades para conseguir testimonios por parte de los vecinos, desde una página web especial en la que subir fotos, vídeos o cualquier otro tipo de prueba, así como un número de teléfono directo, el 416-808-7405. Pero en zonas como esta, la calle Danzig, cerca de la intersección de Morningside Avenue y Lawrence Avenue East, las cosas funcionan de otra manera, tienen otros ritmos. Muchos barrios de Scarborough, una de las zonas más deprimidas de la ciudad, estás organizados por clanes o pandillas y son ellos los que dictan las normas. La zona se divide en bloques, compuestos, en su mayoría, por viviendas de protección oficial. Cada bloque tiene su pandilla. Por eso entre los vecinos impera la ley del silencio, porque temen que haya repuesta tras los asesinatos.
Hace una década, esta zona de la ciudad quedó atrapada en una sangrienta guerra entre clanes que luchaban por hacerse con el control.
Todo apunta, según la versión oficial de la policía, a que el tiroteo de Scarborough, uno de los más cruentos en la historia de Toronto, fue causado por dos bandas enfrentadas. De momento, lo único seguro es que, como mínimo, estuvo protagonizado por dos  individuos que se estaban disparando el uno al otro.
A la espera de que la versión de los testigos aflore, el abuelo de una de las víctimas, la adolescente de 14 años, Charles Shyanne, suplica que cualquier persona que tenga información se ponga en contacto con la policía para que la investigación pueda continuar. “Que nadie se oculte. Que no haya secretos. Lo que sepan, cuéntenlo para que el asesinato de mi hija no haya sido en vano”, pidió Tyrone Charles visiblemente afectado, “y así estarán a salvo los otros niños del barrio”.
En este sentido, y pese al estricto código de valores que impera en la zona, la policía informa de que, de forma anónima, algunos testigos ya se han puesto en contacto con ellos. Aunque la mayoría de personas aún no se atreve a hablar ni con los agentes ni con los medios de comunicación. “He visto lo que pasó en mi antiguo barrio,” dijo un hombre. “Las personas fueron asesinadas por eso, para hablar con los reporteros y la policía y cosas por el estilo.”
De momento, la policía tiene bajo custodia a una persona que podría resultar clave para esclarecer algunos de los hechos. Su identidad, sin embargo, no ha trascendido.
Muchos residentes de la zona reconocen que hablar en estas circunstancias es difícil y que habría que salir del barrio para hacerlo.
Por su parte, el jefe de policía, Bill Blair, mantiene que lo único que le preocupa ahora mismo es recabar el máximo de información posible y que no es tiempo de hacer balance sobre el repunte de violencia que vive la ciudad.
Pese a los acontecimiento ocurridoss, el alcalde Rob Ford ha asegurado que “Toronto es una de las ciudades más seguras del mundo”. “Toronto es un gran lugar para vivir y criar una familia. Es un gran lugar para invertir y crear puestos de trabajo. Sin embargo, no podemos ser complacientes. No podemos esperar y ver a los delincuentes llevar la violencia a nuestras calles y patios. Es hora de que todos nosotros trabajemos juntos para mantener nuestra ciudad segura”, ha explicado. Y ha terminado con un llamado ha todos los testigos que estuvieron en la fiesta: “Vamos a necesitar su ayuda. Usted puede comenzar a ayudar en estos momentos. Cientos de personas estaban en la noche de fiesta el lunes. Decenas de personas vieron lo que pasó. Mucha gente sabe qué pandilleros son. Contamos con el servicio de policía más grande del mundo, pero necesitamos su ayuda.”