La TTC readmite, horas después de despedirlo

La TTC readmite, horas después de despedirlo

El conductor, Dino Oroc, de 43 años.

TORONTO.- Un operador del tranvía que fue suspendido por dejar su vehículo para perseguir a un hombre que presuntamente había asaltado a una pasajera ha sido reintegrado.

Dino Oroc, de 43 años, pronto reanudará su trabajo sin pérdida de salario, dijo Bob Kinnear, director del Amalgamated Transit Union Local 113, que representa a la mayoría de los trabajadores de la TTC.

Oroc fue relevado de su cargo después del incidente que tuvo lugar el miércoles alrededor de las 1:15 pm, en el tranvía 501 de Queen St., cerca de John street.

Oroc, que comenzó a trabajar para la TTC en 1999, abandonó el tranvía para dar caza al hombre, lo cual es una violación de las normas que los operadores de tranvías de la TTC tienen para garantizar la seguridad de los pasajeros y el personal.

“No me arrepiento de nada”, dijo Oroc, recordando el incidente durante la conferencia de prensa que dio junto a Kinnear el viernes por la tarde.

Todo comenzó cuando uno de los usuarios del vehículo alertó al conductor del asalto que se estaba llevando a cabo. Entonces Oroc detuvo el tranvía, pero antes de que llegase la policía el sospechoso huyó del tranvía y se alejó por la calle Queen mientras la mujer agredida salía detrás de él.

El conductor salió tras ellos, dejando el tranvía lleno de gente y parado en medio de la calle.

Oroc dijo que tomó la decisión de perseguir al presunto agresor “porque la seguridad de la mujer corría peligro. Entonces pensé: ‘OK’ conozco las normas, pero la mujer necesita ayuda, ya me encargaré de los pasajeros después”.

“En ese momento sentí que alguien necesitaba ayuda y actué. Eso es todo”.

Kinnear dijo que había hablado con Andy Byford, director de la TTC, para asegurar “que esto nunca volverá a ocurrir con ninguno de los trabajadores de la empresa porque puede poner en peligro la seguridad de los usuarios”.

“Obviamente, reconocemos que hay reglas y políticas que deben ser atendidas, pero también es importante que en un caso como este prevalezca discreción y el sentido común”, dijo Kinnear.

Kinnear dijo que Byford ha asumido el compromiso de mantener un diálogo para asegurar que la administración de la TTC mantendrá la descricción en el futuro.

La revelación de que Oroc ha sido reintegrado en su cargo se produce después de que Byford defendiese el mismo viernes por la mañana la decisión de suspenderlo.

“Estoy seguro de que él tenía buenas intenciones, y obviamente estaba actuando en caliente por la

tensión del momento. Actuó cegado por la furia por lo que estaba ocurriendo en su tranvía”, dijo el viernes a primera hora. “Nadie niega que su decisión de parar el tranvía para separar al acosador de la víctima fuese mala idea. El problema fue que el chófer salió tras el violador y su víctima dejando abandonado el vehículo en medio de una de las vías más transitadas de Toronto, a una hora en la que había mucho tráfico, y con todos los pasajeros dentro”, puntualizó.

En este sentido, el director de la TTC afirma que el deber del chófer era esperar a que llegase la policía para hacerse cargo del asunto.

Sin embargo, Byford es consciente de que el operario, en ese momento, no podía pensar, y simplemente salió disparado tras el acosador. Pero añade que por ayudar a una sola persona (la víctima) dejó abandonados a todos sus pasajeros, algo que, según el director de la TTC, nunca puede hacer un conductor de tranvía.

Después de que la CBC informase sobre esta historia, Carola Pérez, que viajaba en el tranvía y que fue testigo del incidente, llamó a la CBC para decir que las acciones del conductor fueron “admirables” y que no puso en peligro a los pasajeros en ningún momento.

“Creo que el gesto del conductor fue muy admirable, y no creo que supusiese ningún problema para el resto de viajeros. Es ridículo que pueda perder su trabajo por eso”

Se creyó inicialmente que el supuesto asalto fue un asalto sexual. Pero la policía de Toronto confirmó a CBC News el viernes por la tarde que después de investigar el incidente se concluyó que un caso de robo.

La víctima ha aceptado esta caracterización de los acontecimientos en el tranvía, dijo el comisario  Tony Vella.

Vella también confirmó que el conductor pensó en ese momento que estaba persiguiendo a un hombre que había cometido un asalto sexual.

Debió el conductor haber actuado como un buen samaritano, o simplemente ignorar el episodio y dejar que la mujer fuera ultrajada?