El mono de Ikea no regresará con su dueña hasta que se celebre el próximo juicio en primavera
El mono de Ikea no regresará con su dueña hasta que se celebre el próximo juicio en primavera
TORONTO.- Darwin el “mono Ikea” se quedará donde está hasta la próxima primavera, cuando se celebrará el próximo juicio sobre su causa para decidir quién es el dueño legítimo, según ha dictaminado el juez del Tribunal Superior de Oshawa.
Darwin, un mono macaco japonés, ha estado viviendo en un refugio para animales al noreste de Toronto desde principios de diciembre, cuando fue encontrado suelto en un estacionamiento de Ikea vestido sólo con un pañal y un abrigo de piel de oveja.
Su antigua dueña, Yasmin Nakhuda, quien se refiere a sí misma como la joven “mamá mono” fue multada ya que está prohibido tener un mono macaco como mascota en Toronto.
Nakhuda quería que el animal volviese a su familia hasta que el juez decida el destino final. Nakhuda argumentó que si ella fuera a tener la custodia tras el juicio, la separación larga dañaría su vínculo con el pequeño primate.
El juez Michael Brown dijo en su fallo que, a su juicio, Nakhuda tiene pocas posibilidades de recuperar al primate
“No estoy convencido de que el demandante haya demostrado de forma fehaciente que es la dueña real del macaco”, dijo Brown. “Eso no quiere decir de ninguna manera que no tenga ni una posibilidad de ganar el juicio”.
El juez hizo hincapié en la falta de credibilidad de algunas de las pruebas y argumentos que dio la supuesta dueña.
El abogado de Nakhuda, Ted Charney, insiste para que el Servicios de Animales de Toronto se comprometa a firman con su cliente el formulario de entrega del animal.
Sin embargo, el refugio en el que ahora vive el mono, “Story Book Farm Primate Sanctuary”, ha acusado a Nakhuda de maltratar al primate mientras éste se encontraba bajo su cuidad, aunque estas alegaciones no han sido probadas en los tribunales.
El abogado del santuario también sostuvo que un animal salvaje no puede ser propiedad de un ser humano si se escapa y vuelve a su hábitat natural. Eso es lo que Darwin estaba tratando de hacer cuando se escapó del coche de Nakhuda en el Ikea, argumentó el abogado.
Todo comenzó el pasado 9 de diciembre cuando los clientes del Ikea de Toronto, en Canadá, no salían de su asombro al descubrir un simpático mono deambulando por el establecimiento, mientras sus dueños estaban tranquilamente comprando.
Se trataba de Darwin, que iba muy bien vestido, con su abrigo de “borreguito” color crema. Rápidamente, las fotos del primate se publicaron por Twitter y en Facebook se creó el perfil ‘Ikea Monkey’, que contó con miles de seguidores en apenas unos minutos.
Según los clientes que lo vieron deambulando por el parking, el mono estaba algo nervioso, «como llorando».
Nadie sabe si estaba tratando de escapar o buscando a sus dueños, que se encontraban dentro comprando y lo dejaron en el coche, pero el animal logró salir de alguna forma que no se ha averiguado aún.
Durante varios minutos, “Darwin” caminó desorientado por el estacionamiento hasta que se refugió en la entrada de la tienda, rodeado de decenas de curiosos.
Finalmente, el Departamento de Servicios Animales de Toronto se hizo cargo del animal.
Al día siguiente, las autoridades de Toronto enviaron a un refugio de animales al mono que ya se había convertido en todo un fenómeno viral después de que decenas de clientes de la tienda sueca comenzasen a colgar fotos del animal en Twitter hasta convertirle en la historia más comentada en esa red social en Canadá.
Los funcionarios municipales dijeron que “Darwin” ha sido enviado a su nuevo hogar, un santuario para primates al norte de Toronto.
Ese mismo día, la dueña del mono que además es abogada, fue multada con 240 dólares y perdió la custodia del primate.
Entre tanto, Nakhuda impugnó sus derechos sobre el animal y pidió a la corte que le devolviese su amada mascota. Sin embargo, la mujer anunció que está dispuesta a renunciar a los derechos sobre Darwin si el refugio de animales ofrece al mono la mejor atención.
En el caso de que logre que le devuelvan a su animal, la abogada planea mudarse a una ciudad vecina donde no hay leyes tan severas que regulen la tenencia de primates como mascotas.
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