Un hombre sentenciado a 30 días de cárcel tras un accidente donde murió su esposa

Un hombre sentenciado a 30 días de cárcel tras un accidente donde murió su esposa

Daniel Lowery fue sentenciado a 30 días de cárcel tras el accidente donde murió su esposa Marsha Lowery. (Foto cortesía Toronto Star)

MISSISSAUGA.- Daniel y Marsha Lowery eran novios desde la escuela. Llevaban más de treinta años casados y eran orgullosos padres de dos hijas gemelas.

De acuerdo con la versión del diario Toronto Star, la pareja había sido inseparable hasta que sus vidas fueron destrozadas por una fatal mezcla de alcohol y conducción. El pasado jueves por la mañana, Daniel Lowery, visiblemente roto y deprimido, se puso delante de un juez de Brampton para ser sentenciado por el accidente relacionado con alcohol que él mismo causó.

“Es poco probable que alguna vez la vida sea siquiera un bocado de cómo era antes”, dijo la juez Katherine McLeod a Daniel Lowery durante la sentencia.

Lowery, de cincuenta y seis años de edad, quien tiene que hacer uso de un bastón para caminar y se encuentra mucho más delgado que hace unos años, se declaró culpable de exceso de alcohol en la sangre que causó la muerte y el daño corporal a principios de este año.

El juez lo condenó a treinta días de cárcel y le prohibió conducir durante los próximos siete años.

Además de las lesiones físicas del accidente, Lowery sufrió lesiones cerebrales que le han afectado psicológicamente, tal y como se escuchó en la corte. “Él perdió a su esposa, su novia de la escuela secundaria y su voluntad de vivir”, dijo Tania Lowery de su padre. “Llora todos los días y se pregunta por qué no está con mi madre”.

McLeod dijo que los informes psicológicos demuestran que Daniel Lowery se siente culpable, sufre de un trastorno depresivo mayor y se auto-odia,  “lo cual no es sorprendente, dado su papel en el accidente.”

Lowery también está en fase de pruebas del cáncer, se escuchó en la corte según publica Toronto Star.

Lowery estaba detrás del volante de un Ford Taurus, cuando perdió el control y fue golpeado por otro vehículo, el 6 de diciembre del año 2010. Marsha Lowery, de cincuenta y tres años, pasajera en el Taurus, falleció por causa del impacto.

Naomi Lowery, otra hija de la pareja, dijo que la pérdida de su madre la ha dejado con “miedo a enfrentarse a la vida.” Tania dijo que todavía lucha con tendencias suicidas y se encuentra a menudo deprimida y enojada con lo que pasó.

La corte escuchó que el Taurus se desplazaba hacia el este en Argentia Rd., al norte de Derry Rd.,  alrededor de las 3:20 pm cuando se salió de control en una curva. El coche empezó a dar vueltas y cruzó el carril contrario, donde impactó con otro vehículo que viajaba en dirección oeste conducido por Isabel Wood.

Wood, de setenta y dos años en el momento del accidente, pasó diez días en el Hospital de Sunnybrook y tuvo 10 costillas rotas, un hueso del pecho roto y otras lesiones. “Ella ha perdido gran parte de su propia independencia”, dijo el juez.

A medida que el Taurus se dirigía directamente hacia el coche ese día fatídico, Wood recordó “que rogaba  a Dios que no la dejara morir”, dijo el juez.

Daniel Lowery se disculpó en la corte con Wood y su familia. La corte escuchó que los Lowery iban a visitar al padre de Marsha, quien se encontraba en un asilo, cuando se produjo la colisión.

Lowery había estado bebiendo mucho cuando su mujer le preguntó si podía llevarla a ver a su padre.”Era un marido obediente y lo hice”, dijo McLeod.

El fiscal Sean Doyle pidió al juez una sentencia de cárcel de hasta un año por el consumo de alcohol y la prohibición de conducir de por vida. El abogado del hombre, Randy Norris, pidió al juez una sentencia de cárcel de 30 días y se opuso a la prohibición de conducir toda la vida. El juez aceptó que la cárcel era necesaria y decidió que Lowery se pudiese volver a poner al volante de un coche a pesar de beber en exceso. También señaló que Lowery tiene antecedentes de beber y conducir en el año 1984. Sin embargo, agregó que Lowery experimentará sufrimiento permanente, tanto física como emocionalmente. “Mr. Lowery está cumpliendo una sentencia de por vida en su propia mente y cuerpo “, dijo.