El programa para retirar coches viejos no cumplió sus objetivos iniciales
El programa para retirar coches viejos no cumplió sus objetivos iniciales
Ontario fue la provincia que más participación registró en el programa Retire your Ride. Se reciclaron más de 20.000 vehículos
El Popular. Toronto.- El programa federal llamado Retire your Ride, finalizado en marzo y que ofrecía incentivos a los canadienses para que cambiaran su vehículo viejo no consiguió cumplir con el plan marcado en su inicio, según concluyó una evaluación realizada en febrero por la consultora Ottawa Goss Gilroy.
Los conservadores anunciaron el programa en 2008 y se ofrecían incentivos como pases de transporte público y pequeñas cantidades de dinero en efectivo para aquellos que se animaran a cambiar su vehículo viejo, el cual sería reciclado y pasaría a convertirse en chatarra.
Medio Ambiente de Canadá contrató a la firma de consultoría Ottawa Goss Gilroy para evaluar el programa poco antes de que terminara y según reveló The Canadian Press, que obtuvo acceso al informe de conformidad con la Ley de Acceso a la Información, el objetivo del Gobierno de conseguir 200.000 coches viejos y camiones era “demasiado ambicioso”.
Este error de previsión se debe en parte a que tomó más tiempo de lo esperado poder poner el programa en marcha, el cual no empezó a funcionar hasta enero de 2009 porque “no se tuvieron en cuenta los 18 meses de tiempo de preparación para implementar el programa”, señala el informe en el que se incluyen afirmaciones como la de que los “objetivos poco realistas fueron reconocidos por adelantado.”
La organización sin fines de lucro Summerhill Impacto, anteriormente conocida como el Mecanismo de la Fundación Aérea, fue la encargada de manejar la gestión nacional del programa. Asimismo, se asociaron organizaciones regionales no gubernamentales de todo el país para llevar el programa en diferentes ciudades y pueblos del país. Según el informe de la consultoría, este enfoque en la gestión del programa fue problemática ya que representó un “desafío” para Summerhill Impacto en la aceleración y en el desarrollo de una red regional de ONGs. “Las ONG y Summerhill Impacto carecían de capacidad para una gestión financiera de esta magnitud”, señala el informe que también critica cierta confusión sobre quién informaba a quién.
“Los roles y responsabilidades eran poco claras en las áreas de comunicación y presentación de informes. La línea de las autoridades no era clara desde la perspectiva de las organizaciones no gubernamentales regionales”, dice el informe que continua con afirmaciones como la de que existió una “comprensión poco clara de los objetivos del programa entre las organizaciones no gubernamentales regionales.”
El documento hace notar que la mayoría de estos problemas se resolvieron después del primer año. Sin embargo, la evaluación considera que Summerhill Impacto y los grupos locales no acababan de darse cuenta de la cantidad de trabajo que tenían asignado.
