Engañosas llamadas telefónicas confundieron a los votantes

Engañosas llamadas telefónicas confundieron a los votantes

Elecciones Canadá investiga llamadas realizadas por robots en las que se dirigía a los ciudadanos a falsos o inexistentes lugares de votación, y que fueron realizadas por una empresa relacionada con el Partido Conservador. Los conservadores aseguran que no están detrás del fraude y han iniciado también una investigación interna. El NDP habla de “crimen contra la democracia”.

Un letrero con instrucciones para votar, en un colegio electoral, durante las pasadas elecciones federales

El Popular. Toronto.- Elecciones Canadá (la junta electoral central) está investigando una serie de llamadas telefónicas fraudulentas realizadas por robots durante la pasada campaña para las elecciones federales, en las que se dirigía a los votantes a lugares de votación erróneos o inexistentes. Las llamadas habrían sido realizadas por una empresa relacionada con el Partido Conservador.

A la investigación que, en colaboración con la Policía Montada, está llevando a cabo Elecciones Canadá, se ha sumado una investigación interna del propio Partido Conservador, según señalaron fuentes de esta formación política, que añadieron que abogados del partido se estarían entrevistando con personas que trabajaron en la campaña para tratar de averiguar quién está detrás de las llamadas ilegales.

La investigación se puso en marcha después de que, en el día de las elecciones, celebradas el 2 de mayo de 2011, la junta electoral central se inundara de quejas de votantes de Guelph, en Ontario, una de las 18 circunscripciones en las que se registraron este tipo de llamadas. El objetivo de los mensajes engañosos era, aparentemente, desanimar a potenciales votantes liberales o del NDP, evitando así que ejerciesen su derecho en las urnas.

En las llamadas recibidas en Guelph, una circunscripción que los conservadores esperaban poder arrebatar a los liberales, una voz femenina que aseguraba pertenecer a Elecciones Canadá informaba, en inglés y en francés, de que el lugar de votación había cambiado de sitio. Ello dio lugar a escenas caóticas en los colegios electorales, y probablemente hizo que algunos votantes acabasen renunciando a votar.

Según informaron el diario Ottawa Citizen y la agencia Postmedia News, la investigación de la junta electoral condujo hasta una empresa denominada Rackine Inc., un pequeño centro de llamadas automáticas de Edmonton que trabajó para la campaña nacional del Partido Conservador y para al menos nueve candidatos conservadores, incluyendo la campaña del primer ministro, Stephen Harper, realizada en Calgary Southwest.

De momento, no obstante, no existen evidencias de que los equipos de campaña de Harper o de los otros candidatos estén involucrados en estas llamadas.

“Nuestra campaña fue limpia y ética”

En un comunicado público emitido este jueves, el Partido Conservador negó que esté detrás de estas llamadas. “El Partido Conservador de Canadá realizó una campaña limpia y ética, y nunca toleraría este tipo de actividades”, señaló la formación política. “El partido no está involucrado en estas llamadas, y si alguien de alguna campaña local lo está, no participará en futuras campañas”, añadió.

El comunicado, atribuido a la jefa de la campaña nacional conservadora durante las pasadas elecciones federales, Jenni Byrne, continúa diciendo que “si algo inapropiado ocurrió, los responsables deben ser procesados y sobre ellos debe caer todo el peso de la ley”. “Durante toda la campaña trabajamos mucho para identificar a nuestros simpatizantes y para animarles a votar. Nuestro trabajo es hacer que la gente vote, no lo contrario”, agregó.

Las llamadas fraudulentas no se realizaron solo en Guelph. Elecciones Canadá registró también quejas de votantes procedentes de Ontario, Manitoba y la Columbia Británica, así como de las circunscripciones de Ottawa y Winnipeg-South Centre; la cadena pública CBC informó en su día de que también se habían recibido llamadas ilegales en la circunscripción de Kitchener-Waterloo (Ontario); los liberales añadieron a la lista Etobicoke Centre y, según el NDP, también se vieron afectadas las circunscripciones de Parkdale-High Park (Toronto), Ottawa Centre. Windsor-Tecumseh (Ontario), Sudbury (Ontario), Edmonton East, Davenport (Toronto) y South Shore-St. Margaret’s (Nueva Escocia).

El diputado del NDP (principal partido de la oposición) Pat Martin comparó este martes las llamadas fraudulentas con “matones con palos que impiden ir a la gente a votar”. “Es parecido a lo que hemos visto en algunos países del Tercer Mundo o en lugares del sur profundo de los Estados Unidos. El resultado al final es el mismo. Es un crimen contra la democracia”, dijo.