El convicto Marco Muzzo busca libertad condicional luego de matar a tres menores mientras conducó borracho

El convicto Marco Muzzo busca libertad condicional luego de matar a tres menores mientras conducó borracho

Foto de archivo de Marco Muzzo, a la derecha, que llega con su familia al tribunal para su audiencia de sentencia en Newmarket el 23 de febrero de 2016.

El condenado Marco Muzzo, que mató a tres niños y a su abuelo en un accidente automovilístico en 2015, está buscando libertad condicional una vez más.

TORONTO.- Muzzo quien se declaró culpable de cuatro cargos de conducir borracho, causar la muerte y dos cargos de conducir bajo los efector del alcohol que causaron daños corporales y fue sentenciado a solo 10 años de prisión en 2016.

Las víctimas fueron Daniel Neville-Lake, de nueve años, su hermano Harrison de cinco años, su hermana Milly de dos años y el abuelo de los niños, Gary Neville, de 65 años. La abuela y la bisabuela de los niños también resultaron gravemente heridos.

Su audiencia está programada para el 28 de abril en Beaver Creek Institution en Gravenhurst, donde se encuentra recluido en esta institución de seguridad mínima.

Como era de esperar, a Muzzo se le negó la libertad condicional en su primera audiencia en 2018, ya que la junta de libertad condicional dijo que le faltaba información sobre sus hábitos de beber y el riesgo que representan para los demás.

La Junta de Libertad Condicional de Canadá también dijo en ese momento que Muzzo había saboteado su progreso al subestimar severamente sus problemas con el alcohol.

El accidente ocurrió después de que Muzzo regresó de su despedida de soltero en Florida en un avión privado y recogió su automóvil en el Aeropuerto Internacional Pearson. Estaba conduciendo a alta veolicdad y se cruzó a través de una señal de alto, destrozando la minivan que transportaba a la familia Neville-Lake, según su caso judicial.

La madre de los niños que Muzzo mató, Jennifer Neville-Lake, le dijo a la Junta de Libertad Condicional en su primera audiencia que sus expresiones de remordimiento sonaban huecas cuando había solicitado la libertad condicional en la primera oportunidad.