Colombia: Protestas ganan pulseada a Duque
Colombia: Protestas ganan pulseada a Duque
Mandatario insiste en obtener recursos debido a crisis por Covid
BOGOTA 3 MAY – La calle le ganó el pulso al gobierno de Iván Duque, que después de cuatro días de protestas anunció hoy el retiro de la reforma tributaria que presentó al Congreso, aunque insistió en la necesidad de una iniciativa legislativa para obtener recursos ante la crisis económica desatada por la pandemia.
“Le solicito al Congreso de la República el retiro del proyecto radicado por el Ministerio de Hacienda y tramitar, de manera urgente, un nuevo proyecto, fruto de los consensos, y así evitar incertidumbre financiera”, precisó Duque en una alocución.
El presidente recalcó que la reforma no era un “capricho” sino una “necesidad” y aseguró que el retiro o no de la iniciativa del Legislativo, donde no tenía apoyo político, “no era la discusión”, pues la urgencia del proyecto era darle continuidad a varios programas sociales.
Sin embargo, el mandatario no mencionó otra de las razones que durante la semana esbozó como argumento para no ceder al retiro de la reforma y era el mensaje que se le enviaría a las calificadoras de riesgos internacionales. Sobre ese asunto no se refirió.
El pasado miércoles las centrales obreras, los campesinos, profesores, indígenas y jubilados, entre otros, se lanzaron de manera masiva a las calles de las principales ciudades y poblaciones del país para exigir el retiro de la reforma tributaria, que no contaba con el respaldo de la mayoría de partidos políticos y era cuestionada por sectores sociales, económicos, industriales e intelectuales.
La huelga nacional se extendió hasta el sábado, con masivas asistencias calificadas por autoridades civiles y hasta por la ONU como pacíficas, aunque se presentaron desmanes en ciudades como Bogotá, Cali, Medellín, Pasto, Barranquilla y Villavicencio, entre otras.
Al menos seis personas murieron durante los cuatro días de manifestaciones: cuatro en Cali, un joven en Ibagué y un policía en Soacha, municipio contiguo a Bogotá.
Buen parte de la prensa local privilegió informar sobre los desmanes en desmedro de la creatividad y lo masivas que fueron las protestas, en sintonía con la óptica del gobierno que enfatizó en ese asunto y que se mantenía incólume ante el reclamo hecho desde las calles.
La noche del sábado, Duque anunció el envío de las tropas a las calles para contener los actos vandálicos, apegado a la figura legal de la “asistencia militar”, un recurso jurídico al que se acude en caso de alteración de la seguridad y la convivencia ciudadana, y la cual aplicaría en coordinación con los mandatarios locales.
Sin embargo, los alcaldes de las tres ciudades con mayor presencia de manifestantes en las calles y donde se dieron algunos disturbios avisaron de inmediato que no veían la necesidad de militarizar las protestas.
“La movilización pacífica fue mayoritaria y vibrante en Bogotá. Algunos actos vandálicos aislados obligaron la intervención policial. Pese a las dificultades del día, nuestra @policiabogota tiene la situación bajo control. No se requiere, ni he solicitado, ninguna militarización”, escribió en Twitter Claudia López, alcaldesa de la capital.
“Medellín no solicitará asistencia militar adicional en el marco de las movilizaciones actuales. Agradecemos al Ejército seguir acompañando las tareas de protección de infraestructura crítica en la periferia y zonas rurales de la ciudad”, respondió Daniel Quintero, mandatario de Medellín, en esa misma red social.
Mientras que el alcalde de Cali, Jorge Iván Opina, dijo en la mañana de este domingo que más que “militarizar la sociedad” lo que se necesitaba era “retirar la reforma tributaría” y “abrir un gran diálogo nacional con todos los sectores que permita un gran acuerdo sobre la pandemia del Covid y sus consecuencias socioeconómicas”.
En tanto que el gobernador de Magdalena (norte), Carlos Caicedo, dijo que responder “con militarización de ciudades a la legítima petición popular de retirar la reforma tributaria” era “perder la condición democrática” y le sugería a Duque retirar la reforma.
El Presidente avisó que una nueva propuesta de reforma tributaria debe sustentarse en la idea de que “los de mayor ingreso contribuyen solidariamente con los más vulnerables”.
En ese orden anunció que las líneas de la nueva reforma incluiría una sobre tasa de renta temporal a las empresas y las personas de mayores ingresos, mantener de manera transitoria el impuesto al patrimonio, aumentar por un tiempo el impuesto a los dividendos y austeridad en el Estado.
El senador izquierdista, Iván Cepeda, aseguró en Twitter que fueron los “jóvenes”, las “organizaciones sociales” y “la ciudadanía movilizada” los que “pusieron los muertos y derrotaron al gobierno”, al que le pidió no presentar una “reforma maquillada”, puesto que la “ciudadanía no aceptará engaños”.
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