CRONICAS. La Marca Sí Importa

CRONICAS. La Marca Sí Importa

Por: Lucía P. de García

Toronto.- Preocupación sintió el mundo cuando en diciembre 2019 se dieron a conocer los primeros casos de una rara enfermedad surgida en Wuhan, China. Cuando los noticieros difundieron escenas donde los enfermos morían en las calles y el cuadro se replicaba en los continentes, hubo pánico. En enero 2020, la OMS declaró la llegada del COVID-19.  

Los científicos ya esperaban una nueva pandemia y en los laboratorios internacionales se estaba trabajando para obtener vacunas contra ébola, sida, coronavirus, entre otras. Pero el COVID-19 se presentó de repente y se extendió veloz, obligando a acelerar el proceso hasta encontrar en tiempo récord una vacuna. Rusia lo logró primero, la Sputnik, en agosto 2020.  

Todas las vacunas contra el CORONAVIRUS han demostrado ser efectivas, evitan la muerte, protegen de un posible contagio y, si se diera, atenúan los estragos. Sobre los nombres, la mayoría obedecen al laboratorio que las desarrolló. Las marcas más conocidas son: Sinovac, Sinopharm, CanSino, originadas en China. Pfizer, Moderna, Johnson & Johnson, en Estados Unidos. BioNTech, en Alemania. Covaxin, en India. Oxford/AstraZéneca en Reino Unido. Abdala y Soberana, en Cuba. Sería provechoso que los estudios incluyeran las zonas de los pueblos originarios. En Ecuador por ejemplo, hubo contagios y fallecimientos entre los habitantes de la Amazonía, no obstante, la mayoría se curó con medicina ancestral.  

Es innegable que la humanidad está siendo objeto de un experimento que deja lecciones a medida que el virus cambia y la ciencia lo combate. Conscientes de esto, los investigadores  están compartiendo lo que van descubriendo. La semana anterior en Estados Unidos se confirmó que Johnson & Johnson produce coágulos de importancia. En el Hospital Monte Sinaí de Toronto se indicó que Sinovac genera menos niveles de anticuerpos que otras vacunas y que amerita refuerzos. Pese a que Pfizer y BioNTech se consideran las más apropiadas para aplicar a menores entre 5 y 18 años, se advierte que su eficacia varía dependiendo de la edad y del tiempo aplicado entre dosis. Estos y otros detalles confirman que en referencia a las vacunas, la marca sí importa.  

Igual influyen aspectos ideológicos; intereses económicos; acaparamiento, desperdicio o desabastecimiento; distribución deficiente y más. Con el fin de contrarrestar estos males, el 3 de marzo 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Banco de Patentes de Medicamentos (MPP) anunciaron que los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos compartirán voluntariamente sus tecnologías mediante acuerdos no exclusivos con países de menos recursos, con la finalidad de que elaboren sus propios productos médicos y los distribuyan en forma equitativa. Se considera que solo así, unidos todos en un solo y poderoso frente, se podrá enfrentar y derrotar a la pandemia.