México: Subalimentados, seis de cada 10 hogares

México: Subalimentados, seis de cada 10 hogares

Un niño mexicano en medio de la extrema pobreza (foto: Gentileza ONG Sopitas)

– Encuesta pone en evidencia carencias para la mayoría de familias

CIUDAD DE MEXICO, 05 AGO – Al menos seis de cada 10 hogares mexicanos sufren de alimentos suficientes, por lo que al menos uno de los integrantes de la familia suele omitir al menos una comida al día o hasta tres por falta de recursos suficientes para adquirir víveres.
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2021 (Ensanut), publicada esta semana, traza en pinceladas dramáticas la desafiante realidad que viven cada día los millones de mexicanos, sobre todo que pertenecen a la parte más pobre de la sociedad, ante sus dificultades para conseguir lo necesario para alimentarse.
El sondeo, elaborado por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), un organismo gubernamental y cuyos resultados fueron dados a conocer esta semana, muestra que casi 61% de los hogares sufre de inseguridad alimentaria en cualquiera de sus categorías, sea leve, moderada y severa.
En el caso de la leve, afecta a 34,9% de los hogares, la moderada a 15,8% y la severa a 10,1%, según los resultados del estudio, realizado a nivel nacional.
Sólo 39% de los hogares mexicanos se ubica en la privilegiada categoría de seguridad alimentaria, en la cual ninguno de sus integrantes tuvo que sacrificar “la calidad o cantidad de los alimentos que acostumbraba consumir”.
Lo más llamativo es que entre 2020 y 2021 aumentó 3 puntos porcentuales la cifra de hogares en zonas rurales en condición de inseguridad alimentaria severa.
Los autores del informe definen la inseguridad alimentaria leve como aquella en la que “se sacrifica la calidad de la dieta”, la moderada como aquella que supone “restricciones en la cantidad de los alimentos consumidos” y la severa en la cual los integrantes “omiten tiempos de comida o dejan de comer en todo un día debido a la falta de dinero”.
Estas prácticas ocurren sobre todo en adultos, pero también en niños, lo que afecta su desarrollo, advierten los expertos.
La Ensanut 2021 reveló que la inseguridad alimentaria golpea más a los hogares de zonas rurales, con 71%, mientras que a los urbanos les afecta en 66,4% y a los de zonas cercanas a las ciudades en 53,5%.
La mayor proporción de familias en condición de inseguridad alimentaria se ubican en las regiones centro (72,4%) y Pacífico Sur (70,5%).
El relevamiento indicó que 68,4% reportó un aumento en sus gastos generales y 72% un incremento en el desembolso en alimentos durante 2020 y 2021.
Por un posible impacto de la pandemia de Covid-19, en 27,1% de los casos reportó que al menos uno de sus miembros dejó de percibir ingresos, mientras que 38,8% afirmó que al menos uno de sus integrantes sufrió una reducción de su sueldo y 24,8% indicó que al menos un integrante de la familia perdió su empleo.
El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), un organismo consultivo del ministerio del Bienestar, reportó que de 2018 a 2020, las personas en situación de pobreza pasaron de 41.9% a 43.9%, es decir de 51,9 a 55,7 millones de personas, de un total de 126 millones de habitantes.
La cifra de personas en pobreza en México en el 2020 equivalía al total de la población de al menos tres países de América del Sur: Argentina, Paraguay y Uruguay, hacen notar los entendidos.
La situación de los pobres parece agudizarse con la actual inflación en ascenso que sufre el país y que en la primera mitad de julio pasado se ubicó en 8,1%, la cifra más alta en los últimos 21 años, pero el costo de los alimentos aumentó al doble, es decir, 16%, según cifras oficiales.
México fue uno de los pocos países en el mundo que no otorgó recursos fiscales a las familias más pobres y a los pequeños negocios para paliar la situación generada por la pandemia de Covid-19.
“Una política fiscal contra-cíclica hubiera ayudado a que estas cifras de pobreza fueran menores”, afirmó Valeria Moy, directora del Instituto Mexicano para la Competitividad.
“Hubiera ayudado a millones de mexicanos a sortear mejor, en términos económicos por lo menos, una de las mayores crisis de la historia reciente. ‘Primero los pobres’ quedó solo en palabras. Un eslogan de campaña. Uno más”, afirmó en referencia a uno de los mantras del presidente Andrés Manuel López Obrador.