Nuestra comida en supermercados es controlada por unos pocos

Nuestra comida en supermercados es controlada por unos pocos

• El negocio de comestibles de Canadá está controlado por grandes jugadores y se necesita la asistencia del gobierno para alentar a nuevos participantes para bajar los precios, dice un informe de la Oficina de Competencia de Canadá.

OTTAWA.- El informe, publicado este martes, es el resultado de una investigación que el principal organismo de control de la competencia de Canadá lanzó el año pasado, cuando la preocupación por los precios de los alimentos alcanzó un punto álgido y las grandes cadenas de tiendas se llenaban los bolsillos exprimiendo cada vez más al consumidor.

La oficina pasó meses examinando muchos aspectos del negocio de comestibles de Canadá, que está dominado por tres gigantes nacionales —Loblaws, Metro y el propietario de Sobey, Empire— junto con otros extranjeros como son Walmart y Costco.

En el informe, la oficina encontró que la industria no es tan competitiva como podría ser, y los consumidores están pagando el precio por ello.

“Canadá necesita soluciones para ayudar a controlar los precios de los comestibles”, dijo la oficina. “Más competencia es una parte clave de la respuesta”.

Con ese fin, la oficina recomendó cuatro políticas generales destinadas a estimular la competencia en el sector.

Ellas son:

Establecer una Estrategia de Innovación en Supermercados dirigida a apoyar la creación de nuevos tipos de negocios de alimentación, específicamente aquellos que solo venden en línea.
Políticas de todos los niveles de gobierno para alentar a nuevos negocios independientes e internacionales a establecerse en Canadá.
Introducir legislación para exigir requisitos de precios unitarios armonizados, lo que facilitará a los consumidores comparar ofertas.
Limitar los controles de propiedad, que actualmente restringen la forma en que los tenderos competidores pueden usar los bienes inmuebles, lo que dificulta, o incluso imposibilita, la apertura de nuevas tiendas.
“El cambio llevará tiempo”, dijo la oficina. “Estas soluciones no reducirán inmediatamente las facturas de comestibles de los consumidores; pero si actúan ahora, los gobiernos de todos los niveles pueden tomar medidas para crear una industria de comestibles más competitiva en Canadá”.