Lo que hay que saber sobre los propietarios que no aceptan mascotas
Lo que hay que saber sobre los propietarios que no aceptan mascotas
- ¿Los propietarios pueden negarse a tener mascotas? Alquilar en Ontario puede ser un desafío, pero cuando los propietarios incluyen reglas de “no se admiten mascotas” en sus contratos de alquiler, se convierte en una batalla constante
Sin embargo, muchos inquilinos no se dan cuenta de que estas cláusulas son en su mayoría inaplicables.
La Ley de Arrendamientos Residenciales (RTA) de Ontario ofrece protección a los inquilinos con mascotas, lo que garantiza que la mayoría de las veces, su propietario no pueda impedirle tener un amigo peludo en su unidad de alquiler.
Pero este es el problema: demasiadas personas desconocen estas leyes. Esta falta de conocimiento puede dar lugar a situaciones desgarradoras en las que los inquilinos sienten que tienen que renunciar a sus mascotas solo para conseguir un lugar donde vivir.
De hecho, en todo Canadá, miles de mascotas son entregadas a refugios cada año porque sus dueños se mudan o no pueden encontrar una vivienda que admita mascotas. Es una situación difícil que a menudo podría evitarse si más personas conocieran sus derechos.
Las reglas reales para mascotas en Ontario que los inquilinos deben conocer
Aclaremos la confusión. La RTA es bastante clara al respecto: cualquier cláusula en un contrato de alquiler que prohíba directamente las mascotas por lo general no es válida. Si ha firmado un contrato de alquiler con una cláusula de “no mascotas”, aún puede traer una mascota a su hogar, ya sea que haya adquirido esa mascota antes o después de firmar.
Rees Nam, Director de Comunicaciones de la Federación de Asociaciones de Inquilinos de Metro (FMTA), lo explica de manera sencilla.
“En el caso de los alquileres estándar, los inquilinos no tienen absolutamente ninguna obligación de revelar que tienen una mascota. Una vez que se firma el contrato de alquiler, depende de ellos si quieren informar a su propietario sobre la mascota”.
Dicho esto, existen algunas excepciones a esta regla. Los propietarios pueden hacer cumplir una cláusula de “no mascotas” si su mascota está causando problemas a otros residentes.
Esto puede incluir situaciones en las que su mascota es excesivamente ruidosa o agresiva o si otro inquilino tiene alergias graves que se ven afectadas por su mascota. Estos problemas son más comunes en viviendas compartidas, donde se alquila una habitación y se comparten espacios comunes con otras personas.
Depósitos por mascotas y otras tarifas
Otra área en la que los inquilinos a menudo necesitan aclaraciones es la cuestión de los depósitos por mascotas o las tarifas adicionales. En Ontario, este tipo de depósitos son totalmente ilegales.
Nam señala: “Los depósitos por mascotas, en realidad cualquier depósito, no están permitidos en Ontario. Los únicos depósitos que puedes hacer son el pago del primer y último mes de alquiler y tal vez un depósito por las llaves”.
Por lo tanto, si un propietario te pide un depósito por mascota o intenta cobrar un alquiler adicional por tu mascota, está incumpliendo la ley.
Nam explica que los inquilinos pueden optar por pagar el depósito para asegurar el alquiler, pero tienen derecho a que les devuelvan ese dinero inmediatamente después de mudarse, ya sea a través de un acuerdo o recurriendo a la Junta de Propietarios e Inquilinos (LTB) para recuperar los cargos del propietario.
Pero, ¿qué pasa si tu propietario descubre que tienes una mascota y comienza a acosarte por ello? Según Nam, “si un propietario acosa a un inquilino por tener una mascota, el inquilino puede ignorarlo o presentar una queja ante la LTB, que investigará”.
Este es un buen recordatorio de que los inquilinos tienen recursos, como la FMTA, disponibles si sienten que se están violando sus derechos.
Las reglas para mascotas en condominios son diferentes
Vale la pena señalar que los inquilinos con unidades en condominios pueden tener una experiencia un poco diferente a la de los alquileres estándar. Si alquila un condominio, su contrato de alquiler está sujeto tanto a la RTA como a las reglas del condominio.
Esto significa que, si bien un propietario en una unidad de alquiler típica podría no ser capaz de hacer cumplir una política de no mascotas, una corporación de condominios podría tener su propio conjunto de reglas que deberá seguir, lo que podría significar no tener mascotas en absoluto o una prohibición de ciertos tipos de mascotas.
¿Pueden desalojarlo por tener una mascota?
Una pregunta que surge a menudo es si un inquilino puede ser desalojado por tener una mascota. La respuesta es generalmente no, y no sin una buena razón. “Un propietario no puede desalojar a un inquilino por una mascota que aparece de la nada”, dice Nam.
“El asunto se resolvería en la LTB, y allí se tomaría una decisión”. Los desalojos relacionados con mascotas normalmente solo ocurren si la mascota está causando problemas importantes, como dañar la propiedad más allá de reparaciones menores o representar una amenaza para otros inquilinos o vecinos.
Por lo tanto, si bien los propietarios en Ontario pueden intentar hacer cumplir las cláusulas de “no se permiten mascotas”, la ley suele estar del lado del inquilino. Comprender sus derechos puede ahorrarle mucho estrés y proteger a su querida mascota de ser realojada injustamente.
Si enfrenta problemas con un propietario por una mascota, no dude en comunicarse con la Junta de Propietarios e Inquilinos o una organización de derechos de los inquilinos como FMTA para obtener orientación.
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