El desplome del mercado inmobiliario continúa y los mercados acaban de alcanzar un mínimo histórico impactante

El desplome del mercado inmobiliario continúa y los mercados acaban de alcanzar un mínimo histórico impactante

• Si aún no está harto de los titulares sobre lo desesperado que está el mercado inmobiliario de Toronto, aquí tiene uno más: las estadísticas de ventas de viviendas nuevas acaban de alcanzar un mínimo histórico. Y sí, es realmente bajo

La Asociación de la Industria de la Construcción y el Desarrollo de la Tierra (BILD), que representa a las partes interesadas en el sector de viviendas nuevas del GTA, ha publicado una vez más algunas cifras de mercado bastante terribles que pintan un retrato cada vez peor de la actividad menguante en lo que solía ser un mercado perennemente lucrativo, especialmente para los inversores.

Con un asombroso 80 por ciento de los inversores-propietarios de la región que ahora pierden dinero en nuevas unidades, no es de extrañar que el número de condominios de nueva construcción vendidos el mes pasado fuera un 61 por ciento menor que en agosto de 2023, y un 81 por ciento aún más espantoso por debajo del promedio de ventas de 10 años.

Si añadimos las viviendas unifamiliares a la ecuación, estas caídas no mejoraron mucho: un 46% interanual y un 81% respecto del promedio de 10 años, frente a una caída del 70% respecto del promedio de 10 años en julio.

También es un momento de niveles máximos de inventario, lo que ha dado a los compradores más opciones y poder de negociación, es decir, si los vendedores pueden encontrar una selección de compradores interesados, algo que muchos tienen dificultades para hacer a menos que estén dispuestos a absorber una pérdida significativa.

BILD dice que el número de listados activos fue ligeramente inferior en agosto en comparación con julio, pero aún así se mantuvo en la friolera de 21.296 viviendas, el 80% de ellas condominios.

Para los desarrolladores que se llevan el golpe, existen los problemas adicionales de las tasas de desarrollo municipales exorbitantes (y en aumento), los costos inflados de materiales y mano de obra, y más, además de las ventas que comenzaron a caer en picado hace algunos meses.

Esto está llevando a muchos a pausar nuevos proyectos, aunque afortunadamente eso no parece haber hecho mella en los niveles récord de oferta.

Como escribe BILD en su actualización de esta semana, “los meses de inventario se mantienen altos no porque el número de nuevas unidades que llegan al mercado esté aumentando drásticamente, sino porque las ventas están disminuyendo continuamente. Esta es una situación poco saludable, porque a medida que las tasas de interés disminuyen, las ventas volverán, pero la construcción nueva tardará más en recuperarse, lo que creará un desequilibrio futuro entre la oferta y la demanda”.

“Los datos de ventas de viviendas nuevas de agosto pintan un panorama sombrío de un mercado inmobiliario que lucha con profundos problemas estructurales que han hecho que el costo de construcción sea demasiado alto”, agrega, y dice que “la crisis es real y se reflejará en los próximos años en menos empleos, menos viviendas nuevas y desafíos de asequibilidad agravados”.

Los promotores y constructores ya han pedido al gobierno que reduzca las elevadas tasas sobre las nuevas construcciones, que han aumentado un 1.200 por ciento en 15 años en algunas partes de Ontario. Ahora existe una Coalición Contra los Impuestos a las Viviendas Nuevas (CANT), que sostiene que los recortes son necesarios para ayudar a reducir los precios de las viviendas para el consumidor.

Sin embargo, a muchos ciudadanos les resulta difícil simpatizar con las empresas que han sacado un buen provecho del mercado de la región, que lleva mucho tiempo sobrevalorado, y que han contribuido a que así sea en primer lugar.