Policía, consumidores y empresarios son clave para reducir los delitos en el comercio minorista

Policía, consumidores y empresarios son clave para reducir los delitos en el comercio minorista

Los consumidores y los empresarios son necesarios para frenar el creciente problema del robo en el comercio minorista.

Ese fue un mensaje clave de la Guía de seguridad y protección en el comercio minorista de Ontario, presentada el lunes por el Servicio de Policía de Toronto junto con representantes de la Asociación de Jefes de Policía de Ontario, el Consejo de Comercio Minorista de Canadá y Seguridad y Servicios en el Trabajo.

Los delitos en el comercio minorista, incluidos el fraude, el robo y el vandalismo dirigidos a las empresas, están aumentando, dijo Paul Pedersen, director ejecutivo de la Asociación de Jefes de Policía de Ontario.

“A medida que esta tendencia continúa, se hace evidente que la policía no puede hacerlo todo por sí sola”, agregó. “La colaboración entre las fuerzas del orden y las empresas y los consumidores es el objetivo para hacer que nuestras comunidades sean más seguras y prósperas”.

Pedersen afirma que los delitos en el comercio minorista tienen costos significativos que afectan los precios, la seguridad de los empleados y la economía local. “Al mismo tiempo, los consumidores desempeñan un papel igualmente importante, ya que los compradores son los ojos y los oídos en el terreno que informan sobre actividades sospechosas, difunden la conciencia y fomentan un enfoque impulsado por la comunidad, que puede ser de gran ayuda para disuadir la actividad delictiva”, dijo Pedersen.

Las empresas deben trabajar de la mano con las fuerzas del orden compartiendo información, informando de los incidentes con prontitud y adoptando medidas de prevención del delito, como protocolos de vigilancia y seguridad, dijo Pedersen.

“Cuando los ciudadanos y las empresas apoyan los esfuerzos de la policía, esto ayuda a los agentes a concentrar sus recursos de manera eficaz, lo que permite tiempos de respuesta más rápidos y una mejor protección general. Nuestro mensaje es claro: la policía, las empresas y los consumidores deben colaborar y, al hacerlo, pueden reducir el delito”.