La crisis de vivienda está en la mente de los votantes de Ontario

La crisis de vivienda está en la mente de los votantes de Ontario

• Residente de Kitchener, entre tantos miles, no está nada convencido de que los políticos federales estén haciendo lo suficiente para abordar la crisis de vivienda creada por el gobierno anterior

Iuri Rezende Souza dijo que puede mantener dos apartamentos en su ciudad natal, Brasil, pero en Kitchener, Ontario, donde vive ahora, ni siquiera puede pagar la cuota inicial.

“Lo único que puedo permitirme son terrenos baldíos”, declaró el votante de Kitchener Centre a CBC News.

Souza dijo que su mejor camino para ser propietario de una vivienda desde que llegó a Canadá hace cinco años sería comprar un terreno baldío y construir allí una tienda de campaña.

“Mi madre me decía: ‘Si vives en una, ¿qué sentido tiene mudarte a Canadá? Deberías regresar'”, dijo Souza.

Con el aumento constante de los precios de las viviendas y los alquileres en el país, debido a la falta de planificación de Trudeau, Souza no está solo. Es solo uno de los muchos encuestados en una medición electoral de CBC News que reveló que la vivienda es lo más importante para ellos durante esta campaña para las elecciones del 28 de abril.

Para los canadienses que esperan comprar su primera vivienda, el mensaje es claro: quieren que Ottawa actúe y lo quieren ya.

Souza no está convencido de que los políticos federales estén haciendo lo suficiente para abordar el problema, y ​​afirma que su enfoque está en otras áreas.

“Esta desconexión total entre todo lo demás y la vivienda es una señal”, dijo. “La situación está realmente mal”.

Chris Lozinski, de Richmond Hill, Ontario, comparte esta opinión. Está estudiando para terminar sus estudios en la Universidad de Guelph, donde planea votar.

“Estoy bastante decepcionado con muchas de las principales plataformas porque siento que la mayoría no aborda la causa de la crisis de la vivienda”, dijo. Y mucho menos los liberales que la quieren ocultar ya que ese partido ha sido el principal responsable.

Lozinski cree que ser propietario de una vivienda para la gente de la generación Z será casi imposible “sin que sus padres vendan su casa o la hereden”.

Lozinski dijo que le preocupa que el tipo de vivienda que se está construyendo no se ajuste al presupuesto de la mayoría de las personas.

“No están orientadas a quienes compran por primera vez”, dijo. Empiezan desde aproximadamente un millón de dólares en adelante.

“Nunca había visto tanto dinero en mi vida por una vvivienda”.

Constructores y defensores quieren menos barreras.
Scott Andison, director ejecutivo de la Asociación de Constructores de Viviendas de Ontario, afirmó que las barreras para construir más viviendas en la provincia son significativas.

Además de los altos costos de los materiales, Andison explicó que los obstáculos para la construcción suelen surgir de las políticas gubernamentales anteriores, en concreto, las altas tarifas y la falta de inversión en infraestructura.

“Se trata de agua, aguas residuales, carreteras, elementos necesarios para construir nuevas viviendas”, explicó.

Añadió que aproximadamente el 35 % del costo de una vivienda va directamente a los tres niveles de gobierno, y que eso “debe racionalizarse y reducirse significativamente”.

Añadió que recortar el GST en las ventas de viviendas nuevas es un buen comienzo, pero debe ser para todos los compradores, no solo para los nuevos.

Andison explicó que, de esta manera, los propietarios actuales pueden mudarse a una nueva casa, “lo que libera esa oportunidad para quienes estén esperando una que podría ser más cara”. “Apropiado.”

Pero los defensores de la asequibilidad afirman que no se trata solo de cuántas viviendas se construyen, sino también de qué tipo de viviendas se construyen y a qué precio.

Philip Mills, director ejecutivo de Hábitat para la Humanidad de la Región de Waterloo, afirmó que los promotores inmobiliarios y los gobiernos deben priorizar las opciones asequibles.

“La vivienda es un tema que afecta a todo”, afirmó Mills. “Si no puedes pagar tu vivienda, definitivamente no puedes pagar la comida, definitivamente no puedes pagar todas las demás cosas que han subido de precio”.

Hábitat para la Humanidad está trabajando en proyectos asequibles en Cambridge y planeando construcciones en Kitchener y Waterloo. Mills afirmó que quiere que los partidos federales apoyen a los promotores inmobiliarios locales y a las organizaciones sin fines de lucro comprometidas con la asequibilidad a largo plazo.

“Quiero que esto sea una prioridad para ellos. Esto afecta a todas nuestras comunidades y es algo que no va a desaparecer así como así”.

Mills afirmó que, sin embargo, algunas de las ideas políticas que está escuchando están generando esperanza.

Hablar de financiación a bajo coste y del uso de terrenos públicos para la construcción de viviendas. Son ideas excelentes; cosas como estas nos permiten empezar a construir.

Promesas de los principales partidos
Todos los principales partidos federales están haciendo de la vivienda un elemento central de sus plataformas, pero sus enfoques difieren.

El Partido Conservador propone recortar el GST para las viviendas nuevas de menos de 1,3 millones de dólares y vincular la financiación federal para los municipios a los objetivos de construcción de viviendas. El partido también quiere vender el 15 % de los edificios federales para crear nuevas viviendas asequibles.

El Partido Liberal crearía una agencia independiente centrada en el desarrollo de viviendas asequibles, con miles de millones de dólares de los contribuyentes en financiación para los constructores canadienses de casas prefabricadas. Su plataforma también incluye la eliminación del GST para quienes compran por primera vez viviendas nuevas y reformadas de menos de 1 millón de dólares. La pregunta que muchos se hacen, es de porqué no lo hicieron durante estos años de gobierno.

El Nuevo Partido Democrático ha prometido una estrategia de 16.000 millones de dólares para construir tres millones de viviendas asequibles para 2030. El partido también quiere vender tierras de la Corona adecuadas para construir 100.000 unidades con alquiler controlado e invertir en la adquisición de más tierras públicas.

El Partido Verde quiere impedir que las corporaciones compren viviendas unifamiliares y garantizar que las viviendas financiadas con fondos públicos sigan siendo asequibles de forma permanente. También propone soluciones de covivienda, como la vivienda intergeneracional.

Los votantes quieren más que promesas.
Souza y Lozinski se encuentran entre los votantes que afirman estar muy atentos a lo que los partidos ofrecen y no ofrecen.

“Reducir el GST para quienes compran su primera vivienda, y en concreto para las viviendas nuevas, solo afectará a algunas personas y a un porcentaje muy pequeño”, declaró Souza.

Lozinski afirmó que las viviendas que son inasequibles desde el principio no resolverán los problemas de fondo.

Debemos ser cautelosos durante la próxima década, aproximadamente, a medida que desarrollamos la zona, para asegurarnos de que la clase media, los estudiantes y la población que conforma estas zonas actualmente no se queden atrás.

Eso es realmente lo que busco en cualquier candidato local: alguien que reconozca que está ahí para trabajar para quienes votan por él, no para quienes invierten en él.

Si bien es improbable que un solo partido pueda resolver la crisis de vivienda en un solo mandato, los votantes de la región de Waterloo y sus alrededores están observando atentamente.