El Gobierno federal no tiene idea de la cantidad de delincuentes con antecedentes que reciben la ciudadanía canadiense

El Gobierno federal no tiene idea de la cantidad de delincuentes con antecedentes que reciben la ciudadanía canadiense

• El gobierno federal está fallando en una de sus principales responsabilidades en materia de inmigración: garantizar la seguridad de los canadienses.

Este es un claro ejemplo de por qué muchos canadienses desconfían de la capacidad del gobierno federal para protegerlos.

Todo comenzó con una pregunta parlamentaria de la crítica de inmigración del Partido Conservador, Michelle Rempel Garner.

En septiembre, preguntó al gobierno liberal del primer ministro Mark Carney con qué frecuencia se concede o se deniega la ciudadanía canadiense a personas con antecedentes penales.

La respuesta fue que el gobierno no tenía ni idea, en una explicación que fue una ensalada de palabras sin información clara

En concreto:

“Debido a limitaciones de datos, el departamento no puede informar sobre el número de solicitudes de personas con antecedentes penales que fueron recibidas, aprobadas, denegadas o que aún están pendientes de decisión. Tampoco puede proporcionar un desglose por tipo de delito que el departamento consideró lo suficientemente grave como para denegar la ciudadanía, ni cuál no”.

Esa fue la absurda respuesta de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía de Canadá, presentada en la Cámara de los Comunes la semana pasada.

La cifra parece ascender a miles de delincuentes, dado que entre enero de 2019 y agosto pasado se rechazaron 2.530 solicitudes en virtud del artículo 22 de la Ley de Ciudadanía.

Este artículo faculta al IRCC para rechazar las solicitudes de quienes buscan la ciudadanía canadiense por motivos penales, pero también por ocultar documentos, mentir a las autoridades o estar siendo investigados o acusados ​​de crímenes de guerra en virtud de la Ley de Crímenes de Lesa Humanidad y Crímenes de Guerra.

«Me resulta inconcebible que el gobierno no pueda decirnos a cuántos delincuentes les ha concedido la ciudadanía», declaró Rempel Garner a Bryan Passifiume de Postmedia.

En respuesta a una pregunta parlamentaria del diputado conservador Blaine Calkins, los datos mostraron que, si bien el número de sujetos detenidos en penitenciarías federales está disminuyendo, el número de extranjeros ha aumentado un 30 %, pasando de 655 hace una década a 857 en 2024/25.

El año pasado, una respuesta del gobierno a una pregunta parlamentaria de la diputada conservadora Laila Goodridge reveló que la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá había perdido el rastro de casi 30.000 personas buscadas por las autoridades de inmigración tras no presentarse a los procedimientos de deportación, incluidas aquellas con órdenes de arresto migratorio en su contra.

Todo esto sugiere que el gobierno federal está fallando en una de sus principales responsabilidades en materia de inmigración: garantizar la seguridad de los canadienses.