Una legisladora electa en las listas de Milei tuvo que renunciar tras ser denunciada por vínculos con el narcotráfico
Una legisladora electa en las listas de Milei tuvo que renunciar tras ser denunciada por vínculos con el narcotráfico

Con antecedentes de narcotráfico y cárcel en Estados Unidos, Lorena Villaverde está sentada en el Congreso de la Nación, Buenos Aires, este 12 de noviembre. @VillaverdeLorena
- Impugnada por los bloques opositores, Lorena Villaverde declina asumir en la Cámara de Senadores
Los presuntos vínculos de dirigentes libertarios con el narcotráfico son otro dolor de cabeza para Javier Milei. Ya frustraron la postulación de su principal candidato a legislador en Buenos Aires, hace apenas dos meses, y ahora derivaron en la renuncia de una senadora recién electa por la provincia patagónica de Río Negro.
José Luis Espert fue el candidato a diputado que no pudo ser y Lorena Villaverde, la senadora que no será. Villaverde (51 años, Río Negro) permanecía en una suerte de limbo: era la única de los 24 senadores electos que no había jurado el cargo y esperaba para saber si el Gobierno la sostendría ante las impugnaciones de la oposición a su pliego. Finalmente, este miércoles renunció a su banca. No se quedará en la calle. Antes de que se conocieran las denuncias en su contra, había sido electa diputada nacional con mandato hasta 2027 y, por el momento, seguirá en la Cámara baja.
Villaverde fue votada en los comicios de octubre y tendría que haber formalizado su ingreso en el Senado el viernes pasado. Sin embargo, un acuerdo de todos los bloques dispuso que su asunción fuera postergada sin fecha. ¿Por qué? La Comisión de Asuntos Constitucionales de la cámara aprobó un dictamen rechazando su designación. La propuesta fue impulsada por legisladores kirchneristas y consiguió el aval de otros peronistas, de miembros de la centrista Unión Cívica Radical y del conservador PRO. Como La Libertad Avanza —el partido de Milei— temía no conseguir apoyos para respaldar a Villaverde, prefirió entonces dejar su diploma en suspenso.
“Estados Unidos la detuvo [a Villaverde], la expulsó y le prohibió la entrada para siempre a ese país por trabajar en la venta de estupefacientes”, apuntó José Mayans, presidente de la bancada peronista en la Cámara de Senadores, durante la reunión de comisión que obturó la asunción de la legisladora. “No podemos permitir que una persona que tiene relación directa con el narcotráfico esté sentada acá en el Senado con fueros parlamentarios”, destacó.
Los antecedentes de Villaverde, que se hicieron públicos en los últimos meses, indican que estuvo detenida en 2002 en Florida, Estados Unidos, por tráfico de drogas. Según documentó el periódico La Nación, fue enviada a una prisión federal, fue juzgada y condenada. Luego, mediante su virtual colaboración con la justicia, su defensa logró que se anulara la condena y se ordenara realizar un nuevo juicio. Tras conseguir la excarcelación, Villaverde regresó a Argentina y el segundo juicio nunca se concretó. En 2017, el expediente se terminó cerrando por la parálisis procesal.
Otro blanco de los cuestionamientos a Villaverde es su estrecho vínculo personal y comercial con el empresario Claudio Ciccarelli. Se trata de un primo y supuesto testaferro de Federico Fred Machado, recientemente extraditado desde Río Negro a Estados Unidos, donde será juzgado por narcotráfico, lavado de dinero y otros delitos.
Fueron, justamente, los vínculos con Machado los que derivaron en el fracaso de la candidatura de otro libertario, José Luis Espert. El profe, como llamaba Milei a Espert, quedó envuelto en un escándalo cuando se conocieron pagos y dádivas que recibió de Machado durante la campaña electoral de 2021. A pocos días de las últimas elecciones, terminó renunciando a postularse. Era nada menos que quien encabezaba la lista de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires, el principal distrito electoral del país.
Hasta las últimas horas, Villaverde negó las acusaciones en su contra y señaló que se trata de “causas armadas”. “No soy narcotraficante, no soy estafadora”, dijo este miércoles a Radio Rivadavia. “No tengo ningún vínculo con Federico Fred Machado. Tampoco es un delito tener un amigo cuyo primo es investigado”, alegó. El desenlace comenzó a hacerse previsible el martes, cuando retiró la renuncia que había presentado a su cargo como diputada para poder mudarse al Senado. Y avanzada la tarde del miércoles, difundió una carta a Milei declinando ocupar su banca como senadora.
“Fui víctima de operaciones mediáticas obscenas, maliciosas y profundas, diseñadas para destruir, desgastar y humillar”, señaló en la nota publicada en redes sociales, ignorando su pasado delictivo en Estados Unidos. Al ofrecerle su dimisión al presidente, argumentó que lo hacía por razones políticas: “Sectores del viejo régimen han intentado convertir mi situación personal en una herramienta para frenar las reformas, obstaculizar la conformación del bloque oficialista en el Senado y desgastar al proyecto de cambio. No voy a ser parte de esa maniobra”.
La Casa Rosada pasó, en pocos días, de respaldar a Villaverde a “sugerirle” que diera un paso al costado. En su lugar, en el Senado, asumirá quien ocupaba el segundo puesto en la lista libertaria, Enzo Fullone, un empresario de 37 años. Por ahora, Villaverde continuará en la Cámara de Diputados, aunque varios legisladores opositores adelantaron que pedirán su remoción.
Desde el 10 de diciembre, cuando se renovará la conformación parlamentaria, La Libertad Avanza pasará a ser la primera minoría en diputados. El Gobierno deberá resolver si está dispuesto a dar la batalla pública por sostener a Villaverde, mientras intenta impulsar diversas reformas para desregular la economía y desarticular al Estado. Este miércoles se celebró una sesión especial en la Cámara de Diputados y juraron sus cargos los 127 legisladores electos en octubre: entre gritos y acusaciones de opositores y oficialistas, quedó claro que los debates en el Congreso argentino difícilmente serán un idílico y sosegado intercambio de ideas.

Comments (0)