La ONU sigue sin una postura común sobre Siria
La ONU sigue sin una postura común sobre Siria

Imagen tomada del canal de televisión Al Arabiya este martes, en la que aparecen varios manifestantes evacuando a un hombre herido tras los ataques del ejército en Hama (Siria). Al menos 24 personas han muerto en las últimas 24 horas en la ofensiva del Ejército sirio contra los manifestantes en distintos puntos del país, según informó el presidente del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abdul Rahman. Imagen: Al Arabiya / Efe
Efe. Naciones Unidas / El Cairo.- El Consejo de Seguridad de la ONU fue de nuevo este martes incapaz de alcanzar una posición común sobre la situación en Siria y tras una jornada de intensas negociaciones decidió reunirse el miércoles de cara a aprobar un texto de condena.
Tras debatir durante horas el contenido de una eventual condena a la represión del régimen del presidente de Siria, Bachar al Assad, los quince miembros del Consejo interrumpieron sus consultas y decidieron enviar a sus Gobiernos el texto que ahora hay sobre la mesa, con distintas variaciones, para recibir indicaciones.
“Desafortunadamente no hemos alcanzado un acuerdo. Hablaremos con nuestras capitales para ver si mañana es posible alcanzar una posición común”, señaló a la salida de las reuniones el embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, uno de los que más oposición ha mostrado a que el Consejo adopte una resolución de condena a Siria.
Churkin señaló que su delegación, “apoyada por otras”, considera que “en las negociaciones actuales no se ha alcanzado el equilibrio deseado”, por lo que el texto de condena con el que se trabaja “podría no desempeñar un papel constructivo a la hora de evitar un mayor agravamiento de la crisis enSiria”.
“Hay aspectos ideológicos que han apartado la atención del mensaje adecuado que debe enviar el Consejo de Seguridad”, explicó el embajador ruso, que acusó a algunos miembros del Consejo de presentar “posiciones demasiado extremas al apoyar demasiado a una parte”.
“Esa situación va en detrimento de un escenario objetivo, en el que se debe tratar de evitar una guerra civil en Siria, que es desgraciadamente hacia donde se dirige”, añadió Churkin, que reconoció que parte de la falta de acuerdo se basa en si el texto debe condenar también la violencia ejercida contra las fuerzas de seguridad sirias por parte de los manifestantes.
Más allá de esa referencia a las bajas de las fuerzas gubernamentales, ninguna delegación quiso detallar el contenido exacto de un texto en el que hoy trabajaron Reino Unido y Brasil, y que debe recoger las ideas del proyecto de resolución presentado hace dos meses por los países de la Unión Europea (UE) que se sientan en el Consejo y también “nuevas ideas” brasileñas.
“Hay algunas diferencias fundamentales de opiniones entre algunos miembros y por ello vamos a tratar el asunto con nuestros distintos Gobiernos”, reconocieron a la salida fuentes diplomáticas occidentales, quienes sin embargo mostraron su optimismo ante “ciertas coincidencias de opinión en algunos temas”.
Otras fuentes occidentales también se mostraron satisfechas con “los avances” logrados en las consultas de este martes, sobre todo porque “todos los miembros estamos de acuerdo en que debe haber una reacción del Consejo de Seguridad ante la situación en Siria”.
Además de seguir tratando el contenido del texto, los quince también esperan ponerse de acuerdo el miércoles sobre el formato que esa condena deberá tener, ya que hay divergencias sobre si debería ser una resolución, como quieren los europeos y EE.UU., o una declaración presidencial, como apuestan principalmente Rusia y China.
La ofensiva del Ejército sirio causa cinco muertos más en Hama
Mientras, la ciudad de Hama volvió a ser este martes el objetivo principal de los bombardeos del Ejército sirio, que causaron al menos cinco víctimas, en la tercera jornada de violenta ofensiva militar tras el inicio del mes sagrado de ramadán.
Las tropas y los miembros de las fuerzas de seguridad continuaron hoy sus operaciones en Hama y otras zonas del país con el fin de acallar las voces que piden la caída del régimen del presidente sirio Bachar al Assad, que, por su parte, acusó a “grupos armados” de atacar a policías con armas de fuego y cócteles molotov.
En Hama, donde la represión ha causado en los últimos días decenas de víctimas, el grupo opositor Comités Locales de Coordinación informó de que cinco personas, dos de ellas hermanos, murieron por los obuses de los tanques del Ejército.
Según los Comités, los sucesos se produjeron durante el bombardeo de los barrios de Janub Malab y Qusur, mientras que la red Revolución Nawruz enSiria señaló que dos personas murieron en el puente de Al Mazareb y otras dos en la mezquita del Sheij Bachar.
Los grupos opositores señalaron en sus páginas de Facebook que hay francotiradores apostados por toda la ciudad y que los habitantes de Hama temen que las fuerzas de seguridad irrumpan en la ciudad.
Además, la red Revolución Siria contra Bachar al Asad indicó que los ataques con armas pesadas afectaron a la mezquita de Al Sharía, coincidiendo con la llamada a la oración del mediodía, y que parte de su minarete quedó destrozado.
En 1982, Hama sufrió una masacre perpetrada por el régimen de Hafez al Asad, padre del actual presidente, para aplastar un levantamiento islamista que causó entre 10.000 y 40.000 muertos.
Desde hace tres días, coincidiendo con la víspera del inicio del ramadán, las autoridades sirias han aumentado sus operaciones represivas y causado un centenar de muertos.
Sólo ayer fallecieron unas 24 personas, diez de ellas tras el rezo nocturno de “Tarawih”, típico de ramadán, según dijo hoy a Efe el presidente del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abdul Rahman.
“Hubo manifestaciones en todas las zonas y disparos hasta dentro de las mezquitas, detenciones masivas y una campaña para aterrorizar a los ciudadanos”, denunció el activista.
Hoy se han celebrado los funerales de las últimas víctimas en Hama, Homs (centro) y Latakia, entre otras ciudades, y algunos de ellos han derivado en multitudinarias manifestaciones.
También localidades de la provincia de Rif Damasco como Arbeen fueron escenario de exequias, durante las cuales las fuerzas de seguridad dispararon contra los asistentes y efectuaron una amplia redada de detenciones.
Mientras, en Homs, los activistas denunciaron el fuerte despliegue militar y el brutal ataque de los policías contra los presos de la cárcel central de la ciudad que gritaron en el patio “Alá es el más grande”.
Sin embargo, la versión de las autoridades vuelve a insistir en la existencia de “grupos armados”, a los que acusan de estar detrás de las protestas y de los últimos incidentes.
Según el régimen, estos grupos lanzaron ayer un intenso ataque con munición y cócteles molotov contra edificios oficiales y comisarías en Hama.
Una fuente oficial anónima informó hoy a la agencia estatal SANA de que hombres con ametralladoras patrullaron la ciudad en motos, mientras la televisión siria recogió testimonios de soldados en hospitales supuestamente heridos por “grupos terroristas armados”.
Debido al estricto bloqueo informativo impuesto por las autoridades sirias, ni estas versiones ni las cifras de víctimas ofrecidas por los activistas opositores pudieron ser verificadas de forma independiente.
La represión de las protestas, que comenzaron a mediados de marzo pasado, se ha cobrado la vida de más de 1.618 civiles y de 374 efectivos de las fuerzas de seguridad, según el Observatorio.
Mientras la situación se agrava en Siria, el Consejo de Seguridad de la ONU sigue guardando silencio sobre la violencia en el país a la espera de alcanzar un acuerdo entre sus miembros y a pesar de la presión de los países europeos para que se condene al régimen de Damasco.