Belak, tercer jugador de hockey muerto desde mayo
Belak, tercer jugador de hockey muerto desde mayo
Wade Belak
El Popular. Toronto.- La Policía guardaba silencio este jueves sobre las circunstancias que rodearon la muerte de Wade Belak, el exjugador de la Liga Nacional de Hockey (NHL), cuyo cadáver fue encontrado el miércoles por la tarde en un hotel de Toronto. Diversas fuentes periodísticas apuntaban, no obstante, a la posibilidad de un suicidio.
Belak, que tenía solo 35 años de edad y había militado en las filas de los Maple Leafs de Toronto, se había retirado recientemente del hockey profesional, y se encontraba en Toronto para participar en un ‘reality show’ relacionado con el patinaje. Deja una esposa y dos hijas.
Este jueves, la Policía se limitó a decir que su muerte no era “sospechosa”.
Belak es el tercer jugador de hockey que fallece desde el pasado mes de mayo, tras las muertes de Derek Boogaard, de los Rangers de Nueva York (el 13 de mayo), y de Rick Rypien, de los Jets de Winnipeg (el 15 de agosto). Los tres ocupaban el puesto de ejecutor (o enforcer).
Un puesto duro y poco agradecido
Como publica el periodista Tom Cohen en la CNN, en un reportaje titulado “El hockey profesional está preocupado por la muerte de tres jugadores”, los ejecutores o enforcers en hockey “se ganan la eterna devoción de los aficionados -pero no mucho más- por su capacidad para golpear y ser golpeados en patines. Por lo general, saltan de equipo en equipo, y tienen dificultades para obtener un contrato por realizar una función que pocos pueden hacer bien y nadie más quiere”.
Cohen explica que “un ejecutor es un jugador de gran presencia física que destaca por pelear y hacer contactos fuertes contra los rivales para intimidarlos”, y cita las palabras de Georges Laraque, uno de los más exitosos pesos pesados del hockey, acerca de su carrera de dos años en la NHL: “Lo hice porque era mi trabajo, pero lo odiaba. No me gustaba pelear. Odiaba la presión. Odiaba a ser llamado un matón y un animal. Odiaba promover la violencia”.
Derek Boogaard fue encontrado muerto a los 28 años en su casa en Minneapolis, EE UU. El resultado de una combinación tóxica de alcohol y analgésicos fue determinado un accidente, según informa la CNN. Boogaard, uno de los combatientes más temidos en la NHL, con dos metros de altura y 120 kilogramos —quien era apodado Boogeyman— no había jugado desde hacía meses, mientras trataba de recuperarse de conmociones cerebrales sufridas en los combates sobre hielo.
En agosto, Rick Rypien, de 27 años, fue encontrado muerto en su casa en Crowsnest Pass, Alberta. No ha sido anunciada la causa oficial de la muerte, pero Rypien tenía un historial de depresión y registró varias ausencias por motivos personales con los Canucks de Vancouver durante gran parte de la temporada pasada, añade la cadena estadounidense. Había firmado un contrato con los Jets de Winnipeg para la próxima temporada.
La muerte de Belak esta semana sorprendió a sus ex compañeros, que lo describieron como un hombre feliz y despreocupado, siempre haciendo bromas, incluso a sus propias expensas. El jugador, de 1,98 metros de altura y más de 90 kilogramos, se había convertido en un temido peso pesado a través de su carrera de 14 años, con cinco equipos.
