Muchos canadienses ignoran los primeros signos de demencia
Muchos canadienses ignoran los primeros signos de demencia

Los resultados de la encuesta mostraron que el motivo más citado para retrasar el diagnóstico de la enfermedad es la creencia de que los síntomas son parte de la vejez o temporales
El Popular. Redacción.- Muchos canadienses hacen caso omiso a los primeros signos de la demencia y lo atribuyen a un elemento normal del envejecimiento, por lo que esperan demasiado tiempo antes de acudir a un médico para que establezca un diagnóstico, según revela una encuesta realizada por la Sociedad de Alzheimer de Canadá.
En el estudio, que cuenta con la opinión de 958 cuidadores, la mitad de los encuestados dijo que sus seres queridos habían convivido durante un año o más con los síntomas de la enfermedad del alzheimer u otra forma de demencia antes de visitar a su médico de cabecera.
Asimismo, el 16% de los cuidadores afirmaron que el enfermo esperó más de dos años para tratar su dolencia y buscar un diagnóstico. Ante estos datos, la Sociedad de Alzheimer de Canadá afirmó que hay una enorme brecha en el tratamiento de la enfermedad debido a que los afectados tardan en informarse acerca de los medicamentos, servicios de apoyo y de las posibilidades para mejorar el manejo de la enfermedad.
“Podemos ofrecer un tratamiento que puede frenar la progresión de la enfermedad”, declaró este miércoles en un comunicado de prensa Naguib Gouda, director ejecutivo de Sociedad de Alzheimer de Canadá.
“Los síntomas de la demencia son diferentes del envejecimiento natural”, afirmó Gouda, quien añadió: “Tenemos que ayudar a los canadienses a reconocer los síntomas de lo que padecen, y en los próximos 25 años 1,1 millones de canadienses padecerán signos de un trastorno cerebral”.
“A pesar de que todavía no tiene una cura, podemos ofrecer un tratamiento que puede frenar la progresión de la enfermedad y una gran cantidad de información para ayudar a la gente a prepararse para sus necesidades futuras”, explicó Gouda.
Los resultados de la encuesta, que se realizó por internet, mostraron que el motivo más citado para retrasar el diagnóstico de la enfermedad es la creencia de que los síntomas son parte de la vejez o que eran eventuales y que, por lo tanto, desaparecerían.
Casi el 40% de los encuestados también señaló que los síntomas, sean episódicos o no, no se toman lo suficientemente en serio. Por otro lado, más de una cuarta parte de los cuidadores dijo que su ser querido diagnosticado con demencia se había negado a visitar a un médico o que había insistido en que no había la necesidad de acudir a no ser que los síntomas empeorasen.
Según los encuestados, los primeros síntomas más comunes de la demencia son pérdidas de memoria frecuentes que afectan a las funciones del día a día, desorientación de tiempo y lugar; y cambios en la personalidad o en la forma de actuar que pueden conllevar miedo o confusión.
Tres cuartas partes de los cuidadores que participaron en el estudio afirmaron que desearían haber buscado un diagnóstico de sus seres queridos antes y haber tenido acceso más temprano a los medicamentos para ayudar a controlar los síntomas.
La mayoría de los cuidadores también reconoció otros beneficios del diagnóstico precoz, como la capacidad de poner los asuntos legales y financieros en orden, permitir que la persona con demencia viva más tiempo en su casa y que participe en la toma de decisiones sobre su futuro, y ser más capaces de lidiar con la enfermedad.