HABLEMOS DE CINE
HABLEMOS DE CINE
Por Jorge Gutman
DAMSELS IN DISTRESS. Estados Unidos, 2011. Un film escrito y dirigido por Whit Stillman. Elenco: Greta Gerwig, Analeigh Tipton, Megalyn Echikunwoke
Un refrescante y adulto entretenimiento ambientado en la universidad es lo que ofrece el director y guionista Whit Stillman en Damsels in Distress. Reafirmando lo que ya demostró en sus filmes anteriores (Metropolitan, Barcelona, The Last Days of Disco), Stillman apela al buen gusto y a un especial refinamiento para lograr que el film tenga distintiva particularidad al diferenciarse muy favorablemente de otras comedias de género similar.
El realizador ubica la acción en un ficticio colegio universitario de la costa este de Estados Unidos que recientemente ha comenzado a aceptar estudiantes femeninas. Allí Violet (Grega Gerwig) es la líder no oficial de un trío de alumnas integrado por Rose (Megalyn Echikunwoke) y Heather (Carrie MacLemore) que se propone contrarrestar el ambiente de prepotencia y arrogancia masculina que predomina en el lugar. Cuando Lily (Analeigh Tipton), una nueva matriculada estudiante, llega al colegio Violet la incorpora a su grupo e inmediatamente comienza a aleccionarla sobre cómo comportarse con los compañeros del sexo opuesto y con quien salir (generalmente con jóvenes menos inteligentes o avispados para mantener la superioridad femenina en la relación entablada). Entre otros aspectos que las chicas tratan de implementar bajo la influencia de su líder figuran las consideraciones higiénicas tratando de que los muchachos utilicen especiales antisudorales, así como actuar en la prevención de los suicidios en el campus universitario a través de un Centro de Prevención Suicida que se distingue por ofrecer pastelitos a los verdaderamente deprimidos que asisten al mismo.
Dentro del tono liviano pero agradable que anima al film no están ajenas las complicaciones románticas de las jóvenes pero nunca adquieren un clima dramático capaz de alterar el espíritu jovial que alienta al relato, en especial con el proyecto de Violet de introducir un estilo de danza internacional denominado “sambola”.
La interpretación es buena, sobresaliendo Gerwig en un personaje marcadamente feminista que es capaz de superar con determinación los escollos que se le presentan en el camino.
A pesar de algunas anécdotas menores e intrascendentes, el relato está mas que compensado por un guión atractivo que cuenta con diálogos muy ingeniosos y bien articulados que en varias ocasiones producen franca hilaridad; de este modo, el resultado es un placentero divertimento que culmina con un contagioso número musical bien coreografiado, acompasado por el ritmo de la “sambola” impuesto por Violet.
CONCLUSION: Una comedia dislocada, inteligente y anticonvencional, que permite sonreír persistentemente frente a situaciones graciosas que se desenvuelven dentro de un marco de delicadeza y finura.
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