Alerta porque potente analgésico está matando personas por sobredosis
Alerta porque potente analgésico está matando personas por sobredosis

Los médicos recetan los parches de Fentanyl para fuertes dolores, pero la droga es tan potente que en pocos días el enfermo ya es un adicto.
TORONTO.- Tres personas han muerto en Sarnia, una pequeña población al sur Ontario luego de consumir Fentanyl, un potente analgésico, muy adictivo, que es formulado por los médicos para fuertes dolores y que salió en remplazo del OxyContin, otra droga que fue retirada por su fatales efectos.
El medicamento es un analgésico 100 veces más fuerte que la morfina y 750 veces más potente que la codeína, de acuerdo con la Dra. Michelle Arnot, una profesora de farmacología en la Universidad de Toronto, por lo que puede causar la muerte a una persona en pocos minutos si consume más de lo indicado.
El uso del medicamento ya lanzó una alerta luego que otra persona murió en la misma población por la misma causa, una sobredosis del potente analgésico. Según la policía la droga se esta convirtiendo en una causa de muerte en Sarnia, un municipio con tan sólo 72.000 habitantes pero en donde ya hay tres victimas fatales por el mismo medicamento, por lo que se pide a los organismo de control hacer una revisión del mismo para establecer si se debe retirar también del mercado, porque a parte de ello se ha generado un negocio ilegal en su entorno.
El año pasado el Fentanyl cobró la vida de dos persona y en lo que va corrido del año otra más, una mujer que se colocaba parches del medicamento contra el dolor, pero que fue encontrada muerta por una sobredosis.
Según el agente que esta al frente de la investigación por estas muertes, las pastillas de Fentanyl se han convertido en un peligro mayor al OxyContin que se utilizaba para el tratamiento contra el dolor, pero que fue retirado del mercado por la misma causa en el 2011, mataba a las personas.
Mark Simpson, quien pidió que su nombre real no fuera utilizado para proteger la identidad de sus dos hijos, encontró a su esposa muerta de una sobredosis. Según contó a las autoridades su esposa era una mujer normal hasta que le recetaron la medicina luego de resbalar en su bañera, donde se causo una grave lesión de espalda por lo que tuvo que ser operada.
Según el afectado el dolor que sufría su esposa era tan fuerte que los doctores le recetaron que se colocará parches de Fentanyl, pero en pocos días ella se volvió una completa adicta ala medicamento.
Narró que era tal el desespero que al momento de la muerte de su esposa ya recibía suministros de 15, 100 miligramos de parches de la potente droga al mes.
La situación fue tan caótica y peligrosa que el médico no le quiso aumentar más la dosis, pero ella falsificó el documento para lograrlo. Según Simpson después de la muerte de su esposa él se enteró que ya había cargos en su contra por este fraude.
Contó además que ante el impedimento de adquirir la droga legalmente, su compañera se dirigió a las calles para comprarla y descubrió que hasta se podía fumar, lo que la llevó a la muerte.
“Una vez que ella descubrió cómo se fumaba, todo desapareció. He perdido miles de dólares de cosas “, dijo Simpson quien agregó que su esposa habría hecho cualquier cosa por obtener el medicamento. “Ya no era mi esposa”.
Los parches de Fentanyl ayudan a los pacientes con fuertes dolores para que la droga se distribuya por todo el cuerpo, sin embargo los drogadictos raspan el parche y se lo fuman.
Según la policía algunos pacientes están vendiendo los parches a los adictos, quienes pagan entre $ 150 y $ 400 dólares por cada uno.
Según la Policía ellos ya habían advertido que el medicamento se estaba convirtiendo en un problema social y que estaba pasando lo mismo que con el OxyContin, por el que murieron otras personas en el país.
El agente que esta al frente de la investigación dijo que era más que predecible que esto tendría que pasar, porque ante la eliminación del OxyContin los enfermos querían otra droga más fuerte.
Según la Policía es muy difícil controlar la venta ilegal de este producto en las calles, porque muchas personas llevan formulas médicas validas y negocian con ella.
Para el esposo de la última víctima de la droga esto no tendría que pasar si realmente se verificará las consecuencias de un producto como estos en el mercado.
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