La Agencia de espionaje canadiense suspende trabajadores
La Agencia de espionaje canadiense suspende trabajadores

Los informes que describen los incidentes de seguridad se encontraban entre 11 documentos de disciplina censurados y fechados entre 2010 y 2011.
OTTAWA.- Unos documentos publicados recientemente muestran que dos trabajadores de la agencia de espionaje de Canadá fueron suspendidos por fallos de seguridad en el sistema.
En el caso más grave, uno de los empleados de la agencia fue penalizado con 5 días de empleo y sueldo después de protagonizar un incidente relacionado con cierta información que “debía mantenerse en el más estricto secreto”.
El empleado del CSIS fue acusado por violación por varios aspectos relacionados con la política de conducta de la agencia, por otros casos en materia de seguridad, por el mal desempeño de tareas y por el incumplimiento de las órdenes de dirección.
El incumplimiento provocó una investigación por parte de la división de seguridad interna de la agencia, que fue la encargada de evaluar la gravedad y el alcance de los daños.
En la decisión final sobre el castigo del empleado, tomada por un alto funcionario del CSIS, influyó el hecho de que la persona no tenía ningún expediente disciplinario previo.
“A pesar de que sus acciones podrían haber dado lugar a una medida disciplinaria más grave, he decidido que una suspensión de cinco días sin goce de sueldo es lo más apropiado”, escribió el supervisor.
El empleado fue advertido también de que cualquier nueva infracción en la política de conducta podría justificar un castigo más severo, incluyendo el despido del CSIS.
En un segundo caso, un empleado fue suspendido con un día sin sueldo por violar una condición de seguridad que no ha sido especificada.
Una carta dirigida al empleado dice que antes de imponérsele el castigo, el supervisor de CSIS encargado de su evaluación, valoró las explicaciones que el empleado le hizo llegar por correo electrónico acerca de lo sucedido. “Estas aclaraciones han rebajado su condena”, se explica en el dossier.
Los informes que describen los incidentes de seguridad se encontraban entre 11 documentos de disciplina censurados y fechados entre 2010 y 2011, y que han sido publicados bajo la Ley de Acceso a la Información.
El portavoz del CSIS, Tahera Mufti, se negó a discutir qué tipo de información se vio comprometida, si la seguridad nacional pudo resultar dañada o si los empleados involucrados fueron obligados a tomar entrenamiento de recuperación.
Sin embargo, se desprende de los registros que ambos casos están relacionados con el acceso a las bases de datos de la agencia.
Un trabajador del CSIS, experto en este tipo de problemas dentro del servicio de espionaje, reconoce que si bien las filtraciones de información ocurren de vez en cuando, muchas filtraciones que contienen información política, simplemente se derivan de la inexperiencia de los trabajadores.
“Reclutan a los jóvenes y los jóvenes a veces hacen cosas que son estúpidas” dijo la fuente, que pidió no ser identificado debido a la sensibilidad de estos casos.
Otras cuestiones disciplinarias durante este período de dos años implicaron una serie de problemas, incluyendo sanciones por mal laboral, errores en el desempeño de funciones, y de actividades fuera del servicio de espionaje.
En general, el director del CSIS, Dick Fadden, identificó 19 casos de falta de cumplimiento de las políticas operacionales entre 2010 y 2011. La naturaleza de algunas de las filtraciones hizo que el director expresase a Eva Plunkett, entonces inspectora general de la agencia, su preocupación en su revisión anual.
El reciente gobierno conservador acabó con la oficina del inspector general, diciendo que sus derechos fueron entregados a otro organismo de control.
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