HABLEMOS DE CINE
HABLEMOS DE CINE
Por Jorge Gutman
PARA EL TIFF EL CIELO ES EL LIMITE
La trigésimo séptima edición del Festival de Toronto concluyó el domingo pasado donde la producción americana Silver Linings Playbook del director David O. Russell con Bradley Cooper y Jennifer Lawrence obtuvo el Premio del Público que es la distinción de mayor prestigio de esta muestra dado que son los espectadores quienes participaron en la elección de este film; según la experiencia de años pasados, todo hace suponer que debido a esa distinción la película se convierte en una serie candidata para ser nominada en las más importantes categorías de los Oscar. Por su parte el TIFF premió a Laurence Anyways de Xavier Dolan como el mejor film canadiense, en tanto que el jurado de la FIPRESCI distinguió a dos filmes: In the House (Dans la maison, Francia) de François Ozon como el mejor de la sección Special Presentation y Call Girl (Suecia-Irlanda-Noruega-Finlandia), primer trabajo del realizador Mikael Marcimain que formó parte de la sección Discovery.
Al margen de los premios, lo cierto es que el TIFF se supera año a año y bien se podría acuñar la frase de que para este evento “el cielo es el límite”; en efecto, cada vez más deslumbra a sus visitantes con la vidriera que expone sobre el estado actual de la cinematografía y los cinéfilos están de parabienes con esta fiesta del séptimo arte. Finalmente cabe destacar que debido a la presencia de distribuidores y agentes de venta de diferentes lugares del mundo, muchos filmes pequeños aquí presentados salen del anonimato al tener la oportunidad de ser adquiridos para su exhibición internacional.
La oferta de este año ha sido extraordinaria y si bien es imposible ver todo lo que uno desearía, al menos se tiene la posibilidad de elegir; en tal sentido, he tenido oportunidad de juzgar filmes donde un buen número de ellos –aquí destacados- reúne un nivel de calidad apreciable.
A continuación, una breve reseña de 10 filmes que suscitaron mi entusiasmo.
The Master es el nuevo trabajo de Paul Thomas Anderson que haciendo juego con el título del film se podría afirmar que este realizador es un verdadero maestro ofreciendo una lección de cine a través de un provocativo tema. Además es necesario destacar que Joaquin Phoenix y Philip Seymour Hoffman ofrecen dos actuaciones antológicas capaces de movilizar al espectador. Sin duda este film ha sido uno de los mejores presentados en el TIFF y dado su inminente estreno en Canadá, la semana que viene me referiré al mismo con más amplitud.
7 Cajases una película paraguaya dirigida por Juan Carlos Maneglia y Tana Schémbori que merece un gran respeto. A pesar de que la cinematografía de Paraguay es incipiente comparada con otras de América Latina, este film demuestra que cuando hay imaginación y talento es posible lograr un relato de entretenimiento superior. Todo transcurre en un gran y caótico mercado municipal de Asunción donde un adolescente (Celso Franco), deseoso de tener el dinero para comprar un teléfono celular con cámara blue que lo ayudaría a lanzar su carrera de actor, decide aceptar el transporte de 7 cajas, cuyo contenido desconoce, a un lugar ubicado a 8 cuadras del mercado. Tanto la narración vital y entusiasta, la extraordinaria ambientación y el constante suspenso y tensión hasta llegar a un sorprendente desenlace, permiten destacar la madurez de sus realizadores quienes con mínimos recursos lograron un film original e inteligente capaz de satisfacer al espectador selectivo como al gran público.
Otro film que me impresionó gratamente fue el último trabajo de Carlos Sorín Días de Pesca. A través de un personaje atrayente y cálido, el veterano realizador argentino presenta una historia sencilla pero eficaz. En una magnífica caracterización, Alejandro Awada personifica a Marco, un alcohólico recuperado de mediana edad que viaja a una zona costera de la Patagonia argentina con la intención de pescar un tiburón. Tanto a través del camino como en su llegada a destino se topa con agradables personajes como es el caso del gerente del hotel en que se aloja y de un pescador local. Sin embargo, la pesca es una excusa para que Marco pueda restablecer el contacto con su hija Ana (Victoria Almeida) a quien hace años que no ha visto y conocer a su yerno y al pequeño nieto que habitan a cierta distancia de su hotel. Los resentimientos ocultos de la hija hacia su padre saldrán a relucir y aunque el guión escrito por Sorín no explicite la causa del rencor que experimenta Ana, el resultado es un film afectivo y convincente acerca de un hombre que trata de redimirse buscando una segunda oportunidad en la vida a través del núcleo familiar.
Las consecuencias del implacable tsunami que hacia fines de diciembre de 2004 arrasó a varias regiones costeras de Asia es lo que considera el director catalán Juan Antonio Bayona en The Impossible, una coproducción de España con Estados Unidos. Con un realismo sorprendente, el realizador aborda la catástrofe del terrible maremoto centrando su atención en una familia que llega dos días antes de la tragedia al paradisíaco balneario de Phuket en Tailandia para pasar sus vacaciones navideñas. Playas deslumbrantes con aguas transparentes y un cielo radiante ofrecido por la naturaleza constituyen una excelente bienvenida para Henry Belón (Ewan McGregor), su esposa María (Naomi Watts) y los tres hijos del matrimonio de 5, 8 y 10 años; no obstante, la dicha será de corto alcance cuando al poco tiempo las fuerzas del tsunami producen el caos causando graves inundaciones, con bosques arrasados, derrumbe de edificios y un sinnúmero de calamidades que ocasionaron gran cantidad de víctimas. En esencia, el guión de Sergio Sánchez en base a la historia real suministrada por María Belón, se refiere al drama de sobrevivencia de su propia familia. Nadie podrá permanecer indiferente al modo en que Bayona logró reproducir esa tragedia con espeluznantes imágenes que ofrecen una sensación de verosimilitud admirable, logrando extraordinarios efectos visuales. Tanto Watts como McGregor despliegan una enorme fuerza física y emocional en sus personajes así como la interpretación lograda por los menores, sobre todo Tom Holland quien como el hijo mayor de la familia ofrece una determinación y tenacidad admirable tratando de localizar a su padre. Un film de visceral intensidad que no tiene desperdicio alguno.
Basado en la obra El Chico de la Última Fila del dramaturgo español Juan Mayorga, el director François Ozon ofrece con In the House (Dans la maison) un film altamente original. Concebido como un thriller psicológico e ingeniosamente estructurado, el guión de Ozon se refiere a la relación que se establece entre un profesor con uno de sus alumnos. Fabrice Luchini es Germain, un docente de literatura de enseñanza media que se encuentra desilusionado por el escaso interés demostrado por sus alumnos en el pobre contenido de los trabajos asignados. Sin embargo, llega a sorprenderse gratamente cuando descubre que el tímido estudiante Claude (Ernst Umhauer) ha sido capaz de elaborar una composición de gran interés basada en la experiencia personal obtenida al visitar el hogar de Rapha (Bastien Ughetto), uno de sus compañeros de estudio a quien ayuda en sus tareas de matemáticas. El relato cautiva porque por un lado, a medida que las clases se van sucediendo, Germain va incentivando las dotes de escritor de Claude; por otra parte éste invade la intimidad de una familia para nutrir el contenido de sus escritos, conquistando sutilmente a sus miembros integrantes. La actividad voyeurística de Claude –recordando al Hitchcock de Rear Window (1954)- y la seducción que va logrando en el grupo familiar de Rapha –con reminiscencias de Teorema (1968) de Pasolini- van configurando una atmósfera intrigante muy bien construida que cautiva rápidamente al espectador. Sin duda, Ozon ha logrado un film cautivante y muy bien realizado que ofrece ciertas reflexiones sobre el arte y poder de la manipulación. Bien merecido el premio otorgado por la FIPRESCI.
El difícil tema de la convivencia entre palestinos e israelíes queda evidenciado en dos buenos filmes. Uno de ellos es el drama psicológico The Attack, coproducción entre Líbano y Francia, donde el director libanés Ziad Doueiri narra el caso de un prestigioso cirujano palestino ciudadano de Israel (Ali Suliman) que al comenzar el relato está tratando a las víctimas heridas de un bombardero suicida que provocó la muerte de 17 personas. El conflicto moral de este abnegado profesional se produce cuando se llega a descubrir que el terrorista que acabó con su propia vida ha sido su propia esposa de quien él jamás sospechó que estuviese involucrada en actividades subversivas. A partir de allí comienza todo un proceso de sentimiento de culpa al tener que confrontar la situación en la que se encuentra; por un lado no puede ignorar los sentimientos que guarda a su familia que vive en los territorios ocupados y por otra parte tampoco puede olvidar que dado su prestigio, su condición de médico y como persona humanamente íntegra moralmente está obligado a denunciar los atroces actos de barbarie cometidos al país que le dio prestigio, respeto y honorabilidad. También de gran impacto emocional es el film israelí Out in the Dark, ópera prima de Michael Mayer. La historia gira en torno de Roy (Michael Aloni), un abogado israelí que se enamora de Nimr (Nicholas Jacob), un palestino que efectúa sus estudios universitarios en Tel Aviv; el factor que genera el nudo dramático surge a partir del momento en que se descubre que el hermano de Nimr está comprometido como activista político con propósitos terroristas lo que motiva que las autoridades israelíes le cancelen la visa, obstaculizando de este modo su relación con Roy. El guión del realizador escrito con Yael Shafrir expone cómo la vida íntima de una persona no puede sustraerse del contexto político árabe-israelí, dando como resultado un film sensible, humano y conmovedor.
Igualmente cautivante es el film danés A Hijacking(Un secuestro), un drama de alta tensión donde un barco carguero de una importante compañía de Dinamarca es secuestrado en alta mar en el Océano Índico junto con su tripulación. Las negociaciones entre los piratas de Somalia y los ejecutivos de la compañía encabezados por el presidente de la misma (Soren Malling) para llegar a un acuerdo acerca de la millonaria suma exigida por los captores van originando escenas bien equilibradas entre las que se suceden a bordo y las que tienen lugar en las oficinas de la empresa. Para mantener un relato de casi dos horas de duración se necesitan acontecimientos que dramaticen constantemente el clima vivido y en tal sentido el director Tobías Lindholm lo ha logrado plenamente en un realista y psicológico juego de bien elaborada tensión donde la muerte está pisando los talones de los indefensos rehenes.
Otro título atractivo es What Richard Did, producción irlandesa del director Lenny Abrahamson. El relato que transcurre en un tranquilo verano de Irlanda presenta un grupo de muchachos adolescentes que viven el impacto de las consecuencias producidas por Richard, uno de sus miembros quien es un joven de 18 años bien intencionado y líder de la banda; después de una fiesta y con algunas copas de más, Richard participa en una refriega que conduce a un trágico accidente al causar la muerte de uno de sus compañeros. Cómo se puede vivir con el complejo de culpa y las consecuencias morales de un involuntario crimen es el tema central del film muy bien tratado que cuenta con muy buenas interpretaciones sobresaliendo Jack Reynor en el rol protagónico.
El film Turco Rhino Season del director iraní Bahman Ghobadi, narra una desgarrante historia de amor dentro del contexto de la represión del régimen islámico de Irán. Inspirado por la suerte corrida por el poeta kurdo Sadegh Karmangar, amigo del realizador, la trama se refiere a un poeta que después de haber sido falsamente acusado de escribir poesías antimusulmanas es condenado a prisión por 30 años; después de su liberación, parte para Estanbul en busca de su mujer que lo creía muerto. Tanto la actuación de Behrouz Vossoughi, insuflando a su rol el inmenso dolor de un hombre privado de su libertad por tan largo tiempo además de haber sido separado de su esposa, así como el meritorio trabajo de Monica Bellucci contribuyen a aumentar el interés de este lírico y artístico film.
Comments (0)