20 años de prisión para el militar que vendió información secreta a Rusia
20 años de prisión para el militar que vendió información secreta a Rusia
HALIFAX.- El ex Subteniente Jeffrey Paul Delisle ha sido condenado a 20 años de prisión por vender secretos a Rusia.
El juez que preside el caso, Patrick Curran, dijo que el oficial de inteligencia naval de Halifax cumplirá en prisión 18 años y cinco meses, debido al tiempo que ya ha cumplido en libertad bajo fianza.
Curran dijo este viernes que Delisle actuó “fría y racionalmente” mientras ofrecía sus servicios a Rusia
El juez también ha explicado que a la hora de tomar la decisión se ha basado en el hecho de que es imposible calcular el daño que han provocado las filtraciones de Delisle.
El caso de un militar canadiense vendiendo una enorme horda de secretos a los rusos no tiene precedentes.
Delisle es el primer canadiense acusado en virtud de la Ley de Seguridad de la Información. Eso significa que el juez no tuvo casos anteriores que le ayudase a dictar sentencia.
La primer testigo en subir al estrado fue Michelle Tessier, directora general de seguridad interna del Servicio de Inteligencia Canadiense. Ella es responsable de la seguridad personal y la evaluación de daños después de un fallo de seguridad en el CSIS.
Tessier dijo a la corte que el daño causado por Delisle está en proceso de evaluación, y que de momento es incalculable. “Es muy preocupante para nosotros”.
El tribunal escuchó cómo la traición de Delisle involucra nombres reveladores y números de teléfono de los agentes del CSIS.
Delisle se ha mantenido en silencio desde que fue detenido en enero de 2012, cuando se declaró culpable de violación de la confianza y de espionaje.
Fue detenido en enero después de un viaje a Brasil el pasado otoño, donde conoció a su contacto de Rusia para discutir su futuro con la agencia.
La investigación también ha destapado que Delisle tuvo acceso a la Intranet de la Oficina del Consejo Privado, del Servicio de Inteligencia de Seguridad de Canadá y de la RCMP, así como a las
bases de datos de los aliados extranjeros.
Las revelaciones sobre el caso de espionaje que van saliendo a la luz demuestran la asombrosa facilidad con la que los miembros del ejército pueden acceder a los secretos de Estado, precisamente lo que el servicio de espionaje ruso GRU le solicitaba a Delisle. El ex Subteniente cedió o vendió información a Rusia durante más de 50 meses.
“Estamos espiándonos unos a otros constántemente, a todo el mundo. Todo el mundo espía”, reconoció el subteniente Delisle a la policía después de su detención. “Lo único que intenté fue darles información para decirles: ‘Eh, que estamos atentos'”.
La mayor parte del material que ex militar canadiense divulgó lo hizo sirviéndose de un soporte electrónico, y no a través de espías encubiertos. “No nos servimos de personas”, dijo el acusado.
“Lo hacemos todo con las señales de inteligencia SIGINT”, confesó.
“Delisle tenía acceso a información del CSIS, sobre bases que estaban en Oriente Medio”, explicó a la Policía el Jefe de Delisle en la base de inteligencia naval de Trinidad, en Halifax. El ex Subteniente Delisle fue arrestado en enero de 2012, después de ser sometido a una estrecha vigilancia, mientras copiaba dos informes del CSIS, además de material extraño no especificado.
Según Vladimir Putin, Rusia ha invertido una gran cantidad de fondos en espionaje. El GRU, el servicio de inteligencia de las fuerzas armadas rusas, contrató a Delisle después de que éste comenzase a trabajar para la embajada de Ottawa, en julio de 2007. Una vez interrogado, admitió algunas de las acusaciones.
Aún no está clara la cantidad de material que cedió, lo que sí se sabe es que no fue únicamente información de Canadá, también envió datos secretos sobre Australia, Estados Unidos y Gran Bretaña.
“No fue siempre información canadiense”, le dijo el acusado a la policía. Luego agregó: “Había información americana, británica, australiana y estadounidenses”.
Comments (0)