Empresa de Toronto le permite encontrarse cara a cara con un modelo 3D en miniatura de sí mismo

Empresa de Toronto le permite encontrarse cara a cara con un modelo 3D en miniatura de sí mismo

Un hombre trajo a su perro en una sesión y luego tenía el personal intercambiar digitalmente sus cabezas entre sí.

TORONTO. – La celebración de una versión en miniatura realista de sí mismo en la palma de tu mano es un poco inquietante al principio – pero una vez que el shock inicial, una extraña fascinación comienza a poner en ello.

Esa es la experiencia Selftraits, un negocio de impresión 3D de Canadá, las apuestas se desencadenar un torbellino de entusiasmo en torno a sus “selfies 3D” en los próximos meses.

Después de años de dar un retrato de familia de la abuela para la Navidad, la empresa con sede en Toronto espera que más gente va a sustituir sus viejas tradiciones con una estatuilla de tamaño de bolsillo que se ajusta tan bien en una capa de la chimenea como lo hace encima de un pastel de bodas.

“La clave aquí es la captura de un momento en el tiempo y un recuerdo”, dijo Steve Cory, el fundador de Selftraits.

“Estas pequeñas figuritas van a capturar exactamente lo que eres.”
Él admite fácilmente la idea apela directamente a las personas que están dispuestos a entretener a su lado narcisista. Pero también atrae a los curiosos que han paseó en escaparate de la empresa en el centro de Toronto.

Si son lo suficientemente valientes, los espectadores pueden entrar dentro de la cabina de fotos Selftraits en la parte trasera de la tienda de sí mismos, lograr unos poses y poner su propio modelo 3D en producción.

El proceso comienza con el stand de tienda de campaña, donde 135 sincronizados cámaras Canon Rebel T3i captan el tema desde todos los ángulos. Personal Selftraits ‘alientan tomas de acción, como una patada o un salto, que traer a otro nivel de espectacularidad a la imagen 3D.

“Mucha gente trae accesorios y disfraces y tratar de hacer algo realmente interesante”, dijo Cory.

Muchos clientes han ido más lejos con su imaginación.

Un hombre trajo a su perro en una sesión y luego tenía el personal intercambiar digitalmente sus cabezas entre sí.

Otra sorprendió a su novia por hacer estallar su pregunta, mientras que las cámaras rompieron imágenes de su propuesta. Una estatuilla de varias etapas de ese momento se encuentra ahora en exhibición en la sede de la compañía.

Las figuritas se ensamblan en una impresora 3D, la construcción de capas y capas de la imagen, ya que desliza hacia atrás y adelante a través de un lecho de polvo de yeso.

Los precios comienzan en $ 120 para un modelo a todo color de cinco pulgadas y pueden subir muy por encima de mil dólares, dependiendo del tamaño y complejidad.

Selftraits es sólo una de varias empresas que han hecho una incursión en el negocio “selfie 3D” en Canadá.