INMIGRANDO A CANADA
INMIGRANDO A CANADA
Por Vilma Filici
filici@filici.com
TORONTO. Esta semana, el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, planteó la necesidad de pedir disculpas a la comunidad Sikh de Canadá por el maltrato recibido por ellos a principios de los años 1900. Específicamente habló sobre el incidente del Komagata Maru, que fue un barco que llegó a Vancouver cargando 376 pasajeros provenientes de la Región del Punjab en India. De esos inmigrantes únicamente a 24 se les dio permiso para desembarcar en suelo canadiense y a los otros 352 no se les permitió descender y fueron regresados a India.
La razón por la cual no se les permitió desembarcar fue porque en ese momento en Canadá había una ley que establecía que sólo las personas que vinieran en un viaje directo del país de origen a Canadá podían obtener la residencia. Estas, como muchas otras en el pasado, eran leyes creadas para excluir a personas que no fueran blancos anglófonos o francófonos. Par los asiáticos no había ningún viaje directo, debían hacer escala en Hawaii.
La historia de la inmigración canadiense está repleta de este tipo de leyes que excluyen a los inmigrantes según el color de su piel. En este contexto, es importante recordar que los indios, los chinos y los europeos del sur no eran bienvenidos a Canadá.
De hecho, durante toda la historia de Canadá, diversos grupos de inmigrante han sufrido discriminación y racismo, lo cual en general ha disminuido hasta que la población finalmente se familiariza con sus costumbres y tradiciones, y los comienza a tolerar.
Pero en los tiempos en que vivimos actualmente es muy preocupante saber que están comenzando a surgir en Canadá células de grupos con raíces europeas que son notorios por ser anti inmigrantes.
Recientemente, dos reporteros lograron infiltrarse en una de estas células en Edmonton, Alberta, y han escrito varios artículos dando a conocer las actividades de estos grupos racistas que tienen sedes a través de todo Canadá. La razón de ser de estas células es la necesidad de expresar y actuar ante sus sentimientos anti-inmigrante.
El grupo tiene su origen en Finlandia y se ha esparcido por toda Europa, y ahora está llegando a Norte América y específicamente a Canadá. Se llaman Soldados de Odín, con sus siglas S.O.O., y la organización fue fundada en Finlandia por Mika Ranta, quien se describe a sí mismo como un Neo Nazi. Él ha cometido actos de violencia en contra de inmigrantes y de hecho ha sido encontrado culpable de crímenes contra los inmigrantes.
Estos grupos racistas claman existir para controlar las calles y brindar ayuda a las personas que lo necesiten, pero la misma policía explica que en realidad ellos no ayudan a la seguridad, sino que por el contrario son una amenaza y que el estado gasta muchos recursos para poder monitorear sus movimientos.
En Canadá, aparentemente la razón por la cual se creó este grupo es por el arribo de los refugiados sirios al país. De hecho, este grupo dice que Canadá todavía no tiene todos los problemas que aseguran que tienen los países de Europa, los cuales insisten que son causados por los inmigrantes y por los refugiados. Pero, aseguran, su grupo quiere estar preparado para cuando empiecen los problemas, los cuales estiman que van a comenzar dentro de unos 10 años como consecuencia de la llegada de todos los refugiados e inmigrantes.
Los líderes de este grupo aquí en Canadá han hecho declaraciones públicas en las que dicen que los diferentes gobiernos canadienses han estado permitiendo que enemigos de Canadá estén estableciéndose aquí en el país, y que ellos necesitan asegurarse de poder ejercer algún tipo de control para la seguridad del país.
Definitivamente estas personas deben tener sentimientos antinmigrantes muy fuertes para poder predicar todos estos planteamientos racistas, mismos que han sido alimentados en los últimos años por las políticas y las declaraciones públicas anti-refugiados y anti-inmigrantes que han dictado.
Porque fue el mismo gobierno conservador el que en los últimos diez años usó a las distintas comunidades étnicas para su propio beneficio durante las elecciones, y con todas sus leyes y declaraciones obviamente les ha dado más fuerza, poder y autoridad como para que puedan formar este tipo de grupos y para actuar en contra de las comunidades inmigrantes.
Por suerte desde que se dio el cambio de gobierno el año pasado hemos estado viendo que ha habido una mayor apertura para los refugiados, y que ha habido cambios radicales que se han presentado ante el parlamento para borrar las leyes anti inmigrantes que fueron creadas por el gobierno anterior.
En ese sentido, se puede decir que los primeros pasos para tratar de corregir ese ambiente hostil para la inmigración en Canadá ya fueron tomados, pero obviamente aún falta mucho por hacer para que desaparezcan por completo. Y lamentablemente con este tipo de organizaciones, mientras no cometan acciones delictivas, ni el gobierno ni las autoridades pueden actuar contra ellos. Tampoco pueden obviamente limitarles formarse y operar dentro de la sociedad, siempre y cuando lo hagan dentro de la ley, a pesar de predicar postulados racistas.
Pero definitivamente es muy preocupante el nacimiento de estos grupos en Canadá, primero porque generan zozobra en las comunidades inmigrantes, y segundo porque según las primeras informaciones que se tienen al respecto, estos grupos, llamados Soldados de Odín, funcionan como las pandillas de motociclista. Tienen la misma estructura jerárquica y también el mismo tipo de actitud en el sentido de cumplir las leyes hasta cierto punto, pero cuando ellos creen que tienen que defender la patria en este caso, pueden actuar en contra de quien sea tal y como lo han estado haciendo en Europa.
Ante esta situación, es importante que las comunidades inmigrantes estemos alerta ante el surgimiento de este tipo de agrupaciones, y es vital que nos mantengamos también en contacto con nuestras autoridades en los diferentes niveles de gobierno a fin de que en el momento que sea necesario podamos presionar para que se haga una aplicación fuerte de la ley en contra del racismo y la discriminación en Canadá.
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