Policías de Durham interrogaron a ex pareja suicida de una agente en lugar de llevarlo al hospital

Policías de Durham interrogaron a ex pareja suicida de una agente en lugar de llevarlo al hospital

Los altos oficiales de policía de Durham, Nick Lisi, izquierda y Rob Wallington han sido acusados de acoso y burlarse de los agentes, vidas personales y hacer comentarios vulgares.

Los agentes de policía de Durham dijeron que llevarían al hombre mentalmente inestable al hospital, quin tenía tendencias suicidas y necesitaba ver a un médico.

En cambio, los oficiales lo interrogaron en un intento por encontrar algo sucio sobre una sargento que había presentado quejas sobre el comportamiento abusivo y misógino de un oficial superior, de acuerdo con las denuncias presentadas en una denuncia interna de la policía.

Luego, el grupo de oficiales le dijo al hombre, ex marido de la agente, que “mejor fuera ‘sólido’ y no le contaría a nadie lo que había sucedido”, alega la demanda.

El “conjunto de circunstancias horribles y corruptas”, como la sargento Nicole Whiteway describe el incidente en su demanda de julio de 2017, son parte de lo que ella llama una campaña de hostigamiento en su contra por un inspector de policía de Durham y otros oficiales.

Whiteway, una veterana oficial de 22 años con 16 años de servicio en la fuerza de Durham, primero se quejó a la policía de Durham sobre el Inspector Nick Lisi en 2016, alegando que el oficial de alto rango la había acosado y a sus colegas, ridiculizando públicamente su vida personal y sus atributos físicos.

La oficial alega que Lisi hizo comentarios despectivos sobre la salud mental de su ex marido y se burló de ella por buscar un horario acomodado para cuidar a su hijo pequeño, que tiene una condición de salud que pone en peligro su vida.

Lisi le dijo al Toronto Star que las acusaciones en su contra no son ciertas. “La información que tiene es errónea e incorrecta”, dijo.

Según un memorando firmado por un subjefe de Durham, un investigador externo había corroborado algunas de las denuncias contenidas en la primera denuncia de la oficial Whiteway, mientras que desestimaba a otras como embellecidas, falsas o maliciosas. La nota decía que los hallazgos específicos del investigador son confidenciales y que no han sido divulgados públicamente.

La policía de Durham dijo que le deducirán a Lisi 160 horas de pago, según el memo. Fuentes de la policía de Durham dicen que Lisi se ha negado a aceptar la pena y se espera que el asunto vaya a una audiencia disciplinaria pública.

El supuesto incidente con el hombre suicida ocurrió la primavera pasada, mientras que la queja original de hostigamiento de Whiteway aún estaba siendo revisada.

Su demanda de julio a la policía de Durham ahora está siendo investigada por la unidad de estándares profesionales de la fuerza. Las acusaciones no han sido probadas.

El 21 de abril de 2017, Whiteway llamó a la policía de Durham. Su ex marido estaba cuidando a su hija durante el fin de semana y amenazaba con suicidarse, según su denuncia. (El Toronto Star no ha nombrando al ex marido debido a su salud mental y su abogado no respondió a las solicitudes de comentarios).

Los oficiales finalmente encontraron al hombre y su hija en su camioneta en una carretera rural y la hija regresó a casa con Whiteway. Mientras tanto, los agentes le dijeron a Whiteway que habían arrestado a su ex marido en virtud de la Ley de Salud Mental y que lo llevarían a un hospital en Oshawa para ser evaluado, según su denuncia.

Meas tarde, cuando habló con los oficiales, dice su reclamo, le dijeron que no podía hablar con su ex porque estaba viendo a un médico. Pero los agentes solo llevaron al hombre al estacionamiento del hospital.

“Le explicaron que esto se estaba haciendo porque los patrulleros tienen GPS y los agentes de policía que lo trafican necesitan un registro que demuestre que estaban en el hospital si alguna vez fuesen interrogados sobre el incidente”, dice su denuncia.

El hombre fue interrogado acerca de la vida personal de su ex esposa, alega Whiteway.

“(Él) fue maltratado y amenazado con el fin de fabricar pruebas para desacreditarme como un oficial que creo que todo eso está relacionado con mi queja contra el inspector Nick Lisi”, dice su denuncia.

La denuncia no indica que Lisi estaba entre los oficiales que supuestamente interrogaron a su ex marido.

Ella alega que después de dos horas y media, los oficiales llevaron al hombre de vuelta a su camioneta y le dijeron “será mejor que sea ‘sólido’ y no le cuente a nadie lo que pasó”.

La queja de Whiteway dice que el hospital no tiene ningún registro de admisión de su ex desde la noche del incidente.

Whiteway ahora está en licencia por estrés. Ella desistió de hablar con los medios de prensa por miedo a que la policía la disciplinara, dijo su abogado, Peter Brauti.

“Queremos ver responsabilidades de las personas que no estaban haciendo su trabajo. Queremos ver responsabilidades de las personas que se han comportado de manera corrupta “, dijo Brauti.

“Queremos ver transparencia. Queremos que nos digan qué está haciendo la policía de Durham al respecto “.

El ex marido de Whiteway también presentó una denuncia por el incidente ante la Oficina del Director de Revisión Independiente de la Policía, una agencia de supervisión de la policía civil, dijo Brauti; agregando que le pidió a la policía de Durham que permita que la agencia investigue la denuncia de Whiteway.

“La completa falta de confianza exige que una agencia externa mire esto”, dijo. “Tenemos un problema con la policía misma”.

Una investigación en curso del Toronto Star descubrió que Lisi es uno de los dos altos oficiales de la policía de Durham que han sido acusados ​​de acoso, incluido de burlarse de la vida personal de los agentes y hacer comentarios vulgares en público. El otro es Rob Wallington, un civil a cargo de la unidad de planificación estratégica de la fuerza policial.

Un vocero de la policía de Durham dijo que la fuerza no respondería preguntas específicas sobre “asuntos internos de personal”.

“No se tolerará el comportamiento inapropiado de ningún empleado y estamos comprometidos con un lugar de trabajo abierto, profesional y equitativo”, dijo el portavoz Dave Selby en un comunicado.

El sindicato policial de Durham dijo que la fuerza tiene un serio “problema cultural” y acusa a la gerencia de no hacer lo suficiente para investigar las quejas de los agentes de base o proteger a los empleados del hostigamiento.

En octubre, el jefe de la policía de Durham, Paul Martin, envió un correo electrónico a toda la fuerza después de que una investigación “identificara claramente una mala conducta” por parte de un oficial superior. El correo electrónico de Martin no nombra al oficial, aunque varias fuentes policiales de Durham dicen que es en referencia a Wallington.

El jefe contrató a un subjefe retirado para investigar el asunto, que se espera que finalice más adelante este mes.

El Jefe Martin dijo a los oficiales de Durham en el correo electrónico que les dará “una cuenta completa” de sus hallazgos “respetando los límites impuestos por el respeto a la privacidad y la ley”.

“Al ser abiertos y seguros de nuestros valores y nuestra conducta, mantenemos la confianza de nuestra comunidad, especialmente en los momentos en que se plantean preguntas”, dijo el correo de Martin.

El abogado Peter Brauti representa a una sargento de policía de Durham que alega que los oficiales interrogaron a su ex marido en lugar de llevarlo al hospital.