Tsunami blaugrana

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El BarcaGate comienza a pasar factura

Comienzan a rodar las primeras cabezas por el escándalo que sacudió al Barcelona tras la contratación de una empresa que debía velar por la imagen del club catalán y terminó ensuciando a sus máximos referentes.

 MADRID, 10 ABR –   El denominado “BarcaGate” derivió hoy en la renuncia del vicepresidente Emili Rousaud y de otros cinco dirigentes “blaugranas”, una noticia que cambió el foco de la información vinculada por estos días con la rebaja salarial en Barcelona.
Un recorte sustentado en la crisis derivada de la pandemia de Covid-19 que se acordó con el plantel encabezado por el astro argentino Lionel Messi, uno de los que habían sido atacados en los mensajes publicados por la empresa “I3 ventures”.
Empresa que había contratado el propio Barcelona para velar por la imagen del club y que quedó en el ojo del huracán cuando estalló el escándalo que derivó hoy en las renuncias masivas presentadas por varios integrantes de la cúpula “culé”.
Una de ellas fue la de Rousaud, a quien el presidente Josep María Bartomeu le había retirado su confianza en las últimas horas, mientras que las cinco restantes corresponden a miembros del Consejo de Administración.
Se trata de Enrique Tombas, Silvio Elías, Josep Pont, María Teixidor y Jordi Calsamiglia, quienes se despidieron mediante una carta elevada a los socios del Barcelona frente a la situación que se generó.
La primera “víctima” del “BarcaGate” había sido la propia “I3Ventures”, cuyo contrato fue rescindido poco después de saberse que apelando a cuentas ficticias en las redes sociales desacreditaba a opositores e incluso a referentes del plantel.
“Me parece claro que alguno metió las manos en las arcas del club”, decía el hoy vicepresidente Rousaud al afirmar también: “No se si el presidente lo sabía, pero no podemos mirar para otro lado”.
“La clave está en la fragmentación de las facturas y en las auditorías. Si pagas un millón de euros por algo que vale 100.000, algo está mal”, explicó al apuntar a las cinco facturas por 200.000 euros, separadas para eludir los controles. Rousaud recordó “hay una investigación en curso” y aseguró que “lo que pasó con el tema de las redes sociales es algo sucio”.
Denuncia a la que Barcelona respondió con un comunicado en el que precisa: “Negamos las graves e infundadas acusaciones presentadas por el señor Emili Rousaud, ex vicepresidente del club, en distintos medios”.
“FC Barcelona desmiente categóricamente cualquier acción que pueda ser catalogada como un acto de corrupción y por lo tanto se reserva el derecho de iniciar las acciones legales que correspondan”, completa la nota.
“La renuncia de los miembros del Consejo anunciada en las últimas horas es resultado de una reestructuración de dicho Consejo promovida por el presidente Josep María Bartomeu esta semana y que se completará en los próximos días”, aclara.
“La reestructuración del Consejo de Administración tiene como objetivo afrontar el último mandato con las mayores garantías a fin de adoptar las medidas necesarias para preparar el futuro del club y superar la crisis que estamos viviendo”, finaliza.