CRÓNICAS: Al Rihla reina en Qatar

CRÓNICAS: Al Rihla reina en Qatar

Por: Lucía P. de García

Toronto.- El balón oficial del Mundial de Fútbol Qatar 2022 reina en los ocho estadios del pequeño y acaudalado emirato catarí con el nombre de Al Rihla, que significa El Viaje, sueño anhelado por  los aficionados que desde los lejanos confines del planeta se trasladaron a la sede del máximo evento deportivo mundialista. Al Rihla lo fabrica la marca alemana Adidas, con cuero de poliuretano y tecnología CRT-Core, lo que le faculta mantener la velocidad en el aire, le otorga buen rebote y gran resistencia en temperaturas ambientales que localmente oscilan entre 40 y 50 grados centígrados, situándose en noviembre y diciembre entre 12 y 30 grados centígrados.

Todos los estadios resaltan la magnífica cultura catarí y están rodeados de preciosos jardines. Su  arquitectura moderna es amigable con la Naturaleza: paneles solares climatizan el aire a 22 grados centígrados, permiten la apertura y el cierre de techos retráctiles, facilitan servicios. Además de cumplir con la condición mundialista de un aforo mínimo para 40.000 personas, los estadios están unidos por un sistema de Metro automatizado, sin conductor.

La ceremonia de inauguración del Mundial Qatar 2022 y el primer juego entre países, Qatar y Ecuador, se dio en el Estadio Al Bayt, ante 60.000 aficionados presentes y millones de televidentes que en el mundo disfrutaron de la transmisión en directo. Diseñado como una tienda beduina con toldos gigantescos, Al Bayt está en la ciudad Al Kohr, 35 km. al norte de la hermosa capital Doha.

En la misma urbe está el Estadio Al Thumama, su diseño en mosaicos exalta el Taqiyah, pequeña gorra redonda que usan los hombres musulmanes durante las cinco oraciones diarias. Luego del Mundial, el tamaño del estadio será reducido, 20.000 de sus asientos se donarán a otros países.

Inspirado en las velas de los barcos dhow que surcan el Golfo Pérsico, el Estadio Al Janoub, en la ciudad Al Wakrah, fue inaugurado en la final de la Copa del Emir de Qatar 2019. Cuenta con un salón de usos múltiples, piscinas y un centro comercial. Tras el Mundial, la mitad de sus asientos pasarán a entidades deportivas y educativas que se edificarán en sus alrededores. Al Janoub está a cinco minutos del Aeropuerto Internacional de Doha, el más eficiente y bello del mundo.

El Estadio Ahmad Bin Ali, en la ciudad Al Rayyan, fue inaugurado en 2020. Su estructura y fachada reflejan la vida misma de Qatar. En su cancha juega de local el Al Rayyan Sports Club. Terminado el presente evento mundialista será adecuado para centro comercial. 

En la misma urbe está el Estadio Ciudad Educación, “diamante del desierto” por su forma y estructura que cambia de color según la luz solar. Su centro universitario e investigativo corona el sistema educativo de Qatar, con una excelencia que equipara a cualquier universidad del mundo.

Construido en 1976, el Estadio Internacional Khalifa ha sido el escenario de varios eventos internacionales, además cuenta con un Museo Deportivo y Olímpico. Remodelado para el Mundial, su techo separado en el centro simboliza al mismo tiempo la unión armónica. 

En el más grande de los estadios, el Lusail, con 80.000 asientos, se jugará la final del Mundial. Su diseño y ornamentos semejan un farol que recuerda el surgimiento del islamismo y de lo árabe. Lusail se llamará la ciudad que se edificará a su alrededor, con la finalidad de hacerla el centro más importante del deporte y de las diferentes ramas de la ciencia y del estudio.  

La arquitectura del Estadio 974, en Doha, nació del ensamble de legos. Su nombre se dio por  casualidad, el número corresponde al código telefónico internacional de Qatar y está construido con 974 contenedores, lo que ahorró material, tiempo y personal. Los colores de los contenedores identifican su uso: verde para las áreas de seguridad y atención médica, plateado para la oración de los hombres, negro para la oración de las mujeres, azul para los almacenes, amarillo para los baños. El engranaje de las piezas deja aberturas por las cuales llega el viento desde el mar, permitiendo una refrigeración natural. Por ser desarmable, el estadio puede ser llevado a otro sitio. Se dice que ya tiene comprometido su destino para otro evento deportivo en un determinado lugar de la Tierra.

Hasta conocer más detalles sobre el particular, Al Rihla seguirá imponiendo su reinando alegre y festivo sobre el césped que empezó a crecer desde hace una década, cuando se eligió la sede del Mundial de Fútbol Qatar 2022. La inversión de estos años supera los US $200.000 millones. Entidades Defensoras de Derechos Humanos señalan que durante el mismo tiempo se han producido abusos laborales y pérdidas de vida de más de 6.500 trabajadores migrantes de India, Bangladesh, Kenia, Nepal, Sri Lanka, Pakistán.