Ante la inseguridad: ¿Irse de Canadá o demandar? Víctimas de robo de automóviles consideran sus opciones a medida que aumentan los casos

Ante la inseguridad: ¿Irse de Canadá o demandar? Víctimas de robo de automóviles consideran sus opciones a medida que aumentan los casos

• Mientras el área metropolitana de Toronto enfrenta una crisis de robo de automóviles, algunos residentes están considerando tomar medidas audaces, o posiblemente radicales.

Kamran Hussain, quien se mudó a Canadá desde la India con una visa de estudiante internacional en 2017 y completó el arduo proceso para convertirse en residente permanente, dijo que pensó en abandonar el país después de que se despertó la mañana del 11 de enero y encontró los cristales rotos de su vehículo en la entrada de su casa.

“Salí y el auto ya no estaba”, dijo Hussain, refiriéndose a su Toyota Highlander 2022.

Para este trabajador de telecomunicaciones de 30 años, la ya complicada tarea de convertirse en residente permanente canadiense se había vuelto más difícil debido a la pandemia, cuando se retrasaron varios trámites burocráticos. Pero dijo que había elegido establecerse en Canadá porque lo consideraba seguro.

Esa es una reputación que ahora considera puesta en duda por la epidemia de robo de automóviles y la agresividad de los delincuentes.

“Estoy buscando opciones”, dijo cuando se le preguntó si estaba considerando seriamente abandonar Canadá.

“Dejé mi país debido a la inestabilidad que había allí”, dijo. “Pero ahora, con los crecientes problemas que están sucediendo aquí en términos de seguridad, los robos, los allanamientos y el aumento de la delincuencia, es una gran preocupación para mí”.

La experiencia de Hussain con el robo de vehículos no supuso ningún riesgo para su seguridad personal. Los ladrones nunca entraron a su casa.

Pero dijo que lo han sacudido los muchos  informes a diario de delincuentes que irrumpieron en casas con armas y exigieron las llaves de los vehículos.

Según la policía de Toronto, el aumento de los robos de automóviles ha provocado un aumento de los allanamientos de viviendas, los robos violentos y la violencia armada en todo el GTA.

La Policía Provincial de Ontario (OPP) ha descrito la tasa actual de robos de automóviles en la provincia como “sin precedentes”, impulsada en parte por la demanda de vehículos de lujo en los mercados extranjeros.

La Asociación Équité, una organización contra el crimen financiada por compañías de seguros, ha dicho que por primera vez Ontario superó los mil millones de dólares en reclamaciones por robo de automóviles el año pasado.

En medio de una creciente frustración pública, el Primer Ministro Justin Trudeau convocó una cumbre nacional sobre robo de automóviles en febrero, instando a una colaboración más estrecha entre las fuerzas del orden, los servicios fronterizos, la industria de seguros y los fabricantes de automóviles. Pero hasta el momento no se han visto acciones ni resultados efectivos.

Laura Paquette, otra víctima de robo de automóviles, está tratando de centrar más la atención en el papel de las empresas automotrices: específicamente, se ha estado preguntando si los fabricantes de automóviles pueden ser demandados por fabricar automóviles que, según ella, son demasiado fáciles de robar.

A las 4 a.m. del 10 de enero, dijo que escuchó el pitido de su SUV Toyota, el sonido familiar del desbloqueo.

“Me quedé en shock total”, dijo en una entrevista reciente. “Desperté a mi compañero y le dije: ‘Alguien está robando mi camioneta’. Corrimos escaleras abajo y en cuestion de segundos ya no estaba”.

La trabajadora social de 52 años describió la terrible experiencia que siguió como una “pesadilla”.

La policía encontró su SUV, pero requirió varias reparaciones importantes.

Mientras tanto, perdió $2,000 en costos mensuales de alquiler de un vehículo de reemplazo porque su seguro solo cubría $1,000. Dijo que también estaba pagando cuotas de $700 mensuales por el auto robado, además de $230 mensuales por el seguro.

Al reflexionar sobre lo que tuvo que soportar y lo aparentemente sencillo que fue para los ladrones apoderarse de su vehículo, pidió, como miles lo han hecho sin tener respuesta, a los fabricantes de automóviles que afronten la “responsabilidad”.

“Si invirtiera dinero en una puerta de seguridad para mi casa y si cualquiera con un llavero en blanco pudiera entrar a mi casa, me sentiría un poco defraudado, ¿verdad?” ella dijo. “Así es como me siento con respecto a mi vehículo”.

Paquette dijo que está viendo sus opciones legales.

“¿Por qué corresponde al consumidor protegernos?” dijo. “Los vehículos son grandes inversiones, entonces ¿por qué son tan fáciles de robar? ¿Por qué tengo que llegar a los extremos para evitarlo?

En las semanas posteriores a la cumbre nacional sobre robo de automóviles, las agencias encargadas de hacer cumplir la ley han tratado de resaltar una serie de éxitos.

Entre ellas se incluye una operación conjunta de la OPP y la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá que recuperó 598 vehículos robados destinados a la exportación en el Puerto de Montreal, la puerta de entrada de Canadá al mercado extranjero de vehículos robados. Los vehículos tenían un valor estimado de 35,5 millones de dólares.

La OPP dijo que el 75 por ciento de los vehículos recuperados fueron robados en Ontario, donde el gobierno provincial anunció el mes pasado que planeaba comprar cuatro nuevos helicópteros policiales, a un costo de alrededor de 36 millones de dólares, en parte para combatir la crisis del robo de automóviles.

La policía de Toronto y Bryan Gast, vicepresidente de servicios de investigación de la Asociación Équité, han vinculado el creciente problema con el crimen organizado, algo que no es nada nuevo para las autoridades.

Gast señaló que las tasas de robo de automóviles habían aumentado anualmente antes de la pandemia de COVID-19, pero dijo que los problemas en la cadena de suministro provocados por el cierre global asociado hicieron que fuera más difícil encontrar vehículos nuevos y usados.

“El crimen organizado aprovecha ese problema y se está beneficiando de él”, afirmó. “Fue entonces cuando las cifras aumentaron”, añadió, señalando que los costos de reclamaciones de seguros relacionados con el robo de automóviles en Ontario han aumentado un 319 por ciento desde 2020.

La Superintendente de personal de la policía de Toronto Pauline Gray ha dicho que el robo de automóviles es ahora uno de los tres principales generadores de ingresos para los grupos del crimen organizado.

Gast elogió los nuevos niveles de coordinación lanzados en respuesta a la crisis, pero dijo que, en última instancia, sólo una métrica importará para evaluar su éxito.

“El objetivo será detener esa tendencia ascendente hasta al menos una línea plana y luego una caída”, dijo.

“El éxito se muestra en los resultados: la cantidad de vehículos que están siendo robados en Canadá nos dará una indicación de qué tan bien está funcionando el plan de colaboración”.