Un trágico error de una enfermera: el paciente murió después de recibir una dosis 10 veces mayor del medicamento

Un trágico error de una enfermera: el paciente murió después de recibir una dosis 10 veces mayor del medicamento

• Angela Salvatore relató cómo, plenamente consciente de las circunstancias, fue llamada por una enfermera mientras se encontraba fuera de la cama de su padre en el hospital. Sin esperarlo, al regresar, el personal del hospital le informó que su padre, Benito Salvatore, había recibido una dosis de antipsicóticos hasta diez veces mayor que la sugerida por error.

Angela y su madre, Barbara, recuerdan con desesperación cómo vieron a su padre y esposo respectivamente, pasar por etapas de delirio, ansiedad y desorientación. A pesar de los esfuerzos por revivirlo, Benito falleció 12 horas después. Angela, aún asombrada por la pérdida, habló del dolor inmenso y devastador de la muerte de su padre.

Angela ahora espera buscar justicia por lo ocurrido a su padre. Benito, un inmigrante italiano que se mudó a Canadá en la década de 1960, sufrió de un grave dolor y shock que su familia alega fueron la causa de su muerte prematura. La familia ha presentado una demanda, acusando a enfermeras del hospital de no comprobar la dosificación del medicamento y a los médicos de ignorar la gravedad de este error, sin tener en cuenta el riesgo para la vida de Benito.

La demanda fue interpuesta contra Niagara Health, empresa encargada del hospital St. Catharines donde Benito fue atendido, así como contra cuatro médicos y dos enfermeras responsables de su atención. Niagara Health ha optado por no hacer comentarios hasta que el caso sea resuelto.

Benito Salvatore fue llevado al hospital el 23 de julio con síntomas como dificultad para respirar. Tras ser ingresado, fue diagnosticado con insuficiencia cardíaca y apnea del sueño. El 30 de julio se le prescribió quetiapina, un medicamento antipsicótico, que debía ser administrado una vez al día por la noche a una dosis de 12,5 mg. Sin embargo, su familia alega que las enfermeras fallaron en entender y documentar correctamente la receta, resultando en que recibiera una dosis de 125 mg del medicamento.

La demanda también indica que pese a que la enfermera reconoció el error en la dosis, los médicos no tomaron las medidas necesarias. Poco después de administrarle el medicamento, Salvatore comenzó a experimentar ansiedad, confusión, hipoxia y quedó postrado en la cama. El siguiente día, fue encontrado inconsciente y no pudieron revivirlo.

Angela y su madre se encontraban fuera de la habitación cuando intentaban revivir a Benito. Angela recuerda con tristeza cómo no pudo despedirse de su padre y expresa su pérdida de fe en el sistema de atención médica tras este traumático suceso. “Fue una total decepción… para mi maravilloso padre”, lamenta.

(Crédito: Prensa Canadiense)