Inmigrante se declara inocente del asesinato en una fiesta de Navidad

Inmigrante se declara inocente del asesinato en una fiesta de Navidad

Chad Robinson, Izq; Miguel Chacon-Perez a la derecha

• El inmigrante cubano Miguel Chacón-Pérez repitió la misma declaración que hizo hace seis años cuando fue juzgado nuevamente por asesinato en segundo grado.

“No culpable”, dijo cuando fue procesado este lunes por la mañana en el Tribunal Superior de Justicia por la muerte a puñaladas de Chad Robinson, de 26 años, en una fiesta de Navidad para todos los oficios el 18 de diciembre de 2016.

Eso es todo lo que siguió los protocolos y procedimientos habituales en los juicios por asesinato típicos. La forma en que se está llevando a cabo el nuevo juicio de Chacón-Pérez podría ser la primera a nivel local para un caso de asesinato en el Tribunal Superior.

La Corona no llamará a ningún nuevo testimonio o evidencia. Tampoco lo hará la defensa. A diferencia del primer juicio, no hay jurado. La sala del tribunal se usará con moderación. La mayor parte de los procedimientos se llevarán a cabo en la sala del juez sin la presencia de los abogados ni del acusado.

Lo que la Corona y la defensa acordaron hacer es que la jueza Kelly Tranquilli escuche el audio, revise las transcripciones y examine todas las pruebas del primer juicio en su despacho durante las próximas semanas.

Ambas partes presentarán argumentos escritos y harán presentaciones ante el tribunal una vez que la jueza complete su revisión de la evidencia.

Eso parece indicar, desde ambas partes, que no puede haber mejor evidencia disponible que la que escuchó el jurado durante el largo juicio celebrado en el otoño de 2018, que terminó con el inmigrante cubano condenado por el apuñalamiento fatal.

Chacon-Pérez ha mantenido su inocencia desde que fue acusado. La defensa señaló a un ex amigo suyo, Irvine Alex Aparacio-Chicas, como la persona que mató a Robinson, un aprendiz de plomería de Guelph.

El lunes, antes de que Chacon-Pérez, ahora de 35 años, presentara su declaración de inocencia, Tranquilli le preguntó si estaba de acuerdo con el procedimiento. “Sí, señoría, lo entiendo, estoy de acuerdo en proceder de esta manera”, dijo.

Enfatizó que al aceptar el procedimiento, Chacon-Pérez no estaría presente mientras revisaba la evidencia en el primer juicio.

“Sí, señoría, lo entiendo y estoy de acuerdo con eso también”, dijo.

Robinson murió durante una pelea en una fiesta navideña con barra libre para contratistas y subcontratistas organizada por Intact Renovations en el Imperio Banquet Hall en Falcon Street en London el 18 de diciembre de 2016.

El fiscal adjunto de la Corona, Adam Campbell, dio el lunes una breve sinopsis de la teoría de la Corona que coincidía con lo que argumentó hace seis años.

Le dijo a Tranquilli que Robinson era “un trabajador, un gran trabajador y amaba mucho a su familia”, y agregó que Robinson murió de una sola puñalada directa al corazón.

“Esa puñalada fue provocada por una discusión alimentada por el alcohol con  Chacon-Pérez. La Corona pedirá al tribunal que determine que  Chacon-Pérez apuñaló a Chad Robinson debido a esa discusión”, dijo Campbell.

Se trata en gran medida de un caso circunstancial con diferentes versiones de testigos oculares de lo que sucedió.

Poco antes de la medianoche, mientras estaba de pie cerca del bar, el amigo de Robinson, Nathan Smith, le preguntó a Robinson si Chacon-Pérez era “el hombre Kijiji”, un apodo que Robinson acuñó mientras contaba una historia sobre Chacon-Pérez vendiendo en línea una pecera que había quedado abandonada en una unidad de alquiler en renovación.

Chacon-Pérez, un subcontratista de pisos, fue supuestamente insultado por el nombre y discutió con Robinson y luego se fue enojado con sus amigos, incluido Aparacio-Chicas, que tenía varios antecedentes por violencia, y luego regresó.

Hubo diferentes versiones de lo que sucedió. Campbell dijo que Smith tuvo una discusión con Chacon-Pérez en el estacionamiento y luego hubo una pelea física que involucró a varios hombres. Robinson se unió a la pelea una vez que descubrió que Smith estaba en la trifulca.

La escena fue descrita como “caótica”. Hubo relatos de Aparacio-Chicas sin camisa y enfrentándose a Robinson. Un testigo dijo que vio algo oscuro en la cintura de Chacon-Pérez. Otro testigo no situó a Chacon-Pérez cerca de Robinson.

Pero hubo pruebas de testigos oculares de Chacon-Pérez con otras dos personas en la parte trasera del estacionamiento arrojando el cuchillo por encima de la valla. El ADN de Robinson se encontró en el arma y el ADN de Chacon-Pérez se encontró en el mango.

Cuando fue entrevistado por la policía, Chacon-Pérez dijo que la pelea fue por algo que Robinson dijo “sobre su esposa”, dijo Campbell, y que no sabía nada sobre el cuchillo.

Campbell dijo que la teoría de la Corona es que Chacon-Pérez apuñaló a Robinson, aunque ninguno de los testigos de la fiscalía testificó que lo vieron apuñalar a Robinson. Sin embargo, tenía un motivo debido al insulto, estaba enojado y su conducta posterior al hecho al descartar el cuchillo indicó su culpabilidad.

En su juicio, Chacon-Pérez admitió que estaba enojado y reaccionó exageradamente. Dijo que tiró el cuchillo porque Aparacio-Chicas había dejado caer el cuchillo que había sido tomado de sus herramientas y le pidió que se deshiciera de él.

El abogado defensor Gabriel Gross-Stein dijo que la cuestión principal para Tranquilli es la identificación. Dijo que no había evidencia de que Chacon-Pérez apuñalara al fallecido o que estuviera siquiera a una distancia de ataque.

La teoría de la Corona es que la única inferencia razonable es que Chacon-Pérez fue el asesino.

“La posición de la defensa es que no lo es”, dijo Gross-Stein, agregando que hay evidencia que “sugiere lo contrario”, incluido un testigo de la defensa que dijo que vio a Aparicio-Chicas apuñalar a Robinson.

También hubo varios relatos de que Aparicio-Chicas pateó y pisoteó a Robinson cuando estaba en el suelo y que cuando la policía llegó a la escena del crimen, “estaba sentado en los escalones del salón de banquetes llorando, abatido por algo que había ocurrido”.

Agregó que Aparicio-Chicas testificó que cuando está borracho, “se enoja mucho, ve rojo y se desmaya”.

A Tranquilli le dieron las transcripciones y el audio del juicio, pero le dijeron que tenía que esperar un día para las pruebas. El Tribunal de Apelaciones de Ontario los envió de vuelta a London para el nuevo juicio, pero Campbell dijo que los habían extraviado, a excepción del cuchillo.

Él y Gross-Stein dijeron que pueden recrear las otras pruebas, en su mayoría fotografías presentadas en el juicio.

Tranquilli dijo que se reunirá brevemente con los abogados este martes por teleconferencia y nuevamente el viernes para informarles sobre su progreso.