Finalmente se va. Se le terminó el reinado a Trudeau, permanecerá en el cargo hasta elegir reemplazo

Finalmente se va. Se le terminó el reinado a Trudeau, permanecerá en el cargo hasta elegir reemplazo

Trudeau finalmente hizo el tan esperado anuncio este lunes, diciendo que permanecerá en el cargo hasta que se elija un reemplazo, al tiempo que pidió al gobernador general que prorrogue el Parlamento hasta el 24 de marzo.

OTTAWA.- “A pesar de los mejores esfuerzos para resolverlo, el Parlamento ha estado paralizado durante meses después de lo que ha sido la sesión más larga de un parlamento minoritario en la historia canadiense”, dijo Trudeau, hablando frente a su residencia en Ottawa.

“Es por eso que esta mañana le dije a la gobernadora general que necesitamos una nueva sesión del Parlamento. Ella ha aceptado esta solicitud y la Cámara ahora se prorrogará hasta el 24 de marzo”.

Trudeau también agregó que durante las vacaciones, tuvo la oportunidad de reflexionar sobre su propio futuro político y decidió hacerse a un lado para dejar paso a un nuevo líder.

“Tengo la intención de renunciar como líder del partido, como primer ministro, después de que el partido elija a su próximo líder a través de un sólido proceso competitivo a nivel nacional”, dijo Trudeau.

“Anoche, le pedí al presidente del Partido Liberal que comenzara ese proceso. Este país merece una verdadera opción en las próximas elecciones, y me ha quedado claro que si tengo que librar batallas internas, no puedo ser la mejor opción en esas elecciones”.

El anuncio de Trudeau se produjo en medio de crecientes llamados desde dentro del bloque liberal para que Trudeau renuncie, ya que la popularidad del partido en las encuestas de opinión pública sigue cayendo.

Durante las vacaciones de invierno, los grupos parlamentarios de Ontario, Atlántico y Quebec concluyeron que Trudeau necesitaba hacerse a un lado, diciendo que era hora de que un nuevo líder condujera a los liberales a las próximas elecciones federales.

Múltiples ministros de gabinete de alto perfil han renunciado en las últimas semanas, incluida la sorprendente salida el mes pasado de Chrystia Freeland como viceprimera ministra y ministra de finanzas.

Freeland, que hasta hace poco era una fiel aliada de Trudeau, culpó públicamente al primer ministro por su decisión de dimitir, que anunció horas antes de que anunciara la actualización económica del gobierno para el otoño. Su carta de dimisión afirmaba que estaba “en desacuerdo” con Trudeau sobre las recientes decisiones de política económica.

Esto marca un sorprendente cambio de rumbo para Trudeau después de meses de desafío ante la creciente oposición de los parlamentarios dentro y fuera de su partido y entre los votantes debido a su mala gestión.

Trudeau dijo que su anuncio tiene como objetivo dar un “nuevo comienzo” al Parlamento con la prórroga y que sin él en la ecuación como líder liberal, “también debería disminuir el nivel de polarización que estamos viendo ahora mismo en la Cámara y en la política canadiense”.

En los últimos meses, los liberales vieron el final de su acuerdo de suministro y confianza con el NDP y perdieron el respaldo del Bloc Quebecois, que había ayudado al gobierno a sobrevivir a múltiples mociones de censura, pero no logró avanzar en sus propias prioridades políticas.

El líder del NDP, Jagmeet Singh, dijo después de la renuncia de Freeland que su partido ya no mantendría a flote al gobierno, y prometió su propia moción de censura después de que la Cámara de los Comunes regresara a sesión el 27 de enero.

Los conservadores, que actualmente disfrutan del apoyo de casi la mitad de los votantes canadienses en las encuestas, también han prometido derrocar al gobierno lo antes posible después de fracasar en varios intentos el año pasado.

Trudeau fue visto alguna vez como el salvador del Partido Liberal, que se unió a él para ganar un gobierno mayoritario en las elecciones de 2015 después de su aplastante derrota y caída al tercer lugar detrás del NDP cuatro años antes.

Pero una encuesta de Ipsos para Global News publicada el 20 de diciembre indica que la popularidad de Trudeau ha caído desde entonces al 23 por ciento, solo un punto por delante del apoyo récord al ex líder liberal Michael Ignatieff durante las elecciones de 2011.

La encuesta también encontró que una mayoría de canadienses, el 53 por ciento, ahora quiere ver elecciones anticipadas este año.

Las elecciones federales deben celebrarse a más tardar en octubre de 2025 según la ley canadiense.

Trudeau dijo que su “único arrepentimiento” como líder fue no haber podido introducir una reforma electoral, para que los canadienses pudieran elegir una segunda o tercera opción en la misma papeleta.

“No podría cambiar unilateralmente sin el apoyo de otros partidos nuestro sistema electoral; eso no habría sido responsable”, dijo.

Trudeau se presentó en 2015 con la promesa de que serían las últimas elecciones celebradas bajo el sistema de votación mayoritaria de Canadá. Anunció la decisión de no buscar cambios electorales en 2017, mientras su partido todavía tenía un gobierno mayoritario y no necesitaba el apoyo de otros partidos para aprobar leyes.

Reacción a la renuncia de Trudeau
El líder conservador Pierre Poilievre dijo que la renuncia de Trudeau es para “engañar a los votantes” meses antes de las próximas elecciones.

“Los canadienses desesperados por pasar página en este capítulo oscuro de nuestra historia pueden sentirse aliviados hoy de que Justin Trudeau finalmente se vaya, pero ¿qué ha cambiado realmente?”, dijo Poilievre en un video publicado en su cuenta oficial de X este lunes.

Cuestionó el momento del anuncio, diciendo que la única objeción de los parlamentarios liberales parece ser que Trudeau ya no es lo suficientemente popular como para ganar una elección y mantener al partido en el poder.

“Quieren proteger sus pensiones y su salario barriendo a su odiado líder bajo la alfombra meses antes de una elección para engañarlos y luego hacerlo todo de nuevo”.

El líder del NDP, Jagmeet Singh, emitió un comunicado, diciendo que los liberales de Trudeau han defraudado a los canadienses y que no merecen otra oportunidad, independientemente de quién sea el líder.

“El problema no es solo Justin Trudeau. Es cada ministro que ha estado tomando las decisiones. Es cada parlamentario liberal que miró por encima del hombro a los canadienses que están preocupados por los altos costos o el desmoronamiento de la atención médica”.

El premier de Ontario, Doug Ford, dijo que, ante la llegada de aranceles estadounidenses, Canadá debe demostrar “estabilidad y fortaleza en este momento crítico”, sin mencionar la renuncia de Trudeau.

“Ahora más que nunca, los intereses de los trabajadores y las familias canadienses deben anteponerse a las ambiciones políticas o partidarias”, dijo en X.

En una publicación en X, Freeland agradeció a Trudeau por sus años de servicio a Canadá y a los canadienses y le deseó a él y a su familia “lo mejor”.