Justin Trudeau se disculpa por los errores de todos, menos los suyos
Justin Trudeau se disculpa por los errores de todos, menos los suyos
- Casi a diario, los canadienses reciben análisis sobre cómo el gobierno de Trudeau ha dañado a Canadá con su disparatado gasto inflacionario, con sus oportunidades perdidas de riqueza con las industrias del petróleo y el gas, con su vaciamiento de la Defensa, dejando a nuestros aliados de la OTAN abandonados a su suerte, sus tonterías de cero emisiones netas, sus estúpidas y degradantes giras mundiales de disfraces y sus numerosos escándalos de proporciones internacionales.
Por Stephen LeDrew
Pero, ¿qué pasa con el daño a los sentimientos de todos y cada uno de nosotros, los canadienses al ser etiquetados como culpables de genocidio, negligencia, trato cobarde y vergonzoso a otros seres humanos?
Si escuchamos a nuestro Primer Ministro decírselo al mundo, él piensa que somos una nación de asesinos insensibles.
Teniendo en cuenta eso, ¿por qué no permitir que millones de personas indocumentadas entren a Canadá para continuar sus guerras tribales de odio y maldad, aquí?
Simplemente se están uniendo a todos los canadienses que han sido declarados culpables por Justin.
No sólo la sociedad canadiense ha sido atacada por Justin, sino también la esperanza y paz que solíamos llevar en nuestros corazones.
El orgullo canadiense por nuestro hogar y nuestra tierra natal y en muchos, adoptiva, ha sido destrozado por las disculpas gráficas de Trudeau por nuestros llamados pecados capitales.
Donde antes había orgullo por crear un Canadá tolerante con buena atención médica, educación, empleos, tolerancia, respeto y una gloriosa historia de papeles decisivos en la Primera y Segunda Guerra Mundial, y en el mantenimiento de la paz en todo el mundo, ahora hay un Canadá que es, como lo reconoce su Primer Ministro, una nación culpable y fracasada.
Según nuestro Primer Ministro, agachamos la cabeza por nuestro trato a los canadienses nativos, por los ahorcamientos coloniales, por no permitir que los ciudadanos japoneses e italianos ingresasen a Canadá en tiempos de guerra, por nuestro trato histórico a las personas LGBTQ que han sido maltratadas durante generaciones, por el racismo negro como tropas en nuestras fuerzas armadas, y así sucesivamente.
Los actos de los canadienses han sido tan atroces que Justin voló a Kamloops, British Columbia, para abrazar a un oso de peluche mientras estaba de rodillas junto a un antiguo internado, donde sólo se ha desenterrado el hueso de algún animal después de años de esfuerzo y millones de dólares gastados.
Se ordenó que las banderas canadienses ondearan a media asta en todo el mundo durante más de seis meses para mostrar la vergüenza y la culpa de todos los canadienses.
Y cuando más de 100 iglesias católicas han sido quemadas intencionalmente hasta los cimientos, el Primer Ministro y su cada vez más rico compinche, Gerald Butts, lo califican de “comprensible”.
¿Acusaciones serias y plausibles de abuso sexual contra Justin? Alguien más podría haber “vivido eso de manera diferente”, fue la respuesta de Trudeau, refiriéndose a la acusación de manoseo.
Una explicación perfectamente aceptable para el Cuerpo de Prensa de Ottawa: caso cerrado.
Lo que nos lleva al presente: un país golpeado por Justin y sus muy ricos multimillonarios asesores cercanos entre ellos Carney, con el Parlamento cerrado, mediante sus maniobras políticas, para evitar una votación que llevaría a una elección que la gran mayoría de los canadienses desea desesperadamente librarse de esta banda de perdedores.
¿Creen por un momento que nuestro millonario playboy Primer Ministro emitirá una sincera disculpa a todos los canadienses por cerrar esa institución fundamental de nuestro país, la base misma de nuestro sistema de gobierno, el Parlamento, por el que innumerables canadienses dieron sus vidas para proteger, solo para reemplazarlo con actores de la CBC, escogidos personalmente por el Primer Ministro, dando conferencias a los periodistas sobre cuestiones de comercio nacional desde un retiro en un majestuoso hotel en Quebec?
Ustedes saben la respuesta…
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