El homicida del boxeador Eddie Melo se queda en la cana

El homicida del boxeador Eddie Melo se queda en la cana

Eddie Melo entrenando para un combate en 1982. Foto Postmedia files

• Negaron libertad condicional al sicario que mató al conocido boxeador. Un veterano delincuente se encontraba en libertad condicional al momento del doble tiroteo.

A pesar de su recién descubierta ascendencia indígena, al sicario que mató al exboxeador profesional Eddie Melo y a su amigo se les revocó la libertad condicional, una vez más. El corpulento Charles Gagne, de 52 años, tomó la decisión sin miramientos.

“Solo quiero que sepan que respeto la decisión que están tomando”, dijo a la junta de libertad condicional antes de enterarse de que no los había convencido de darle otra oportunidad. “Si quieren que me quede aquí, me quedaré”. Bueno, el sicario no tiene muchas opciones.

Gagne cumple cadena perpetua en la Penitenciaría de Joyceville sin derecho a libertad condicional durante 12 años por el asesinato, perpetrado el 6 de abril de 2001, del excampeón canadiense de peso mediano, convertido en sicario para la familia mafiosa Cotroni, y de su amigo de la infancia, Joao “Johnny” Pavao, de 42 años, mientras charlaban frente al Amici Sport Cafe, en la concurrida Cliffway Plaza de Mississauga.

El veterano delincuente, que en ese momento se encontraba en libertad condicional por un robo a mano armada, aceptó el contrato de 75.000 dólares para asesinar a Melo con la esperanza de ascender en el hampa. Pavao simplemente estorbaba.

Gagne disparó a ambos hombres a quemarropa: tres balazos en la cabeza de Pavao y mientras Melo estaba sentado en su Jeep Cherokee, uno en el ojo izquierdo y el segundo en la sien.

“Melo intentó pisar el acelerador. Le disparé dos veces en la cabeza”, declaró posteriormente el sicario al juez.

Gagne regresó a su centro de reinserción social en Ottawa justo a tiempo para el toque de queda.

Mientras aún estaba en libertad condicional, y antes de ser arrestado después de que otro recluso lo delatara, Gagne disparó a otro hombre en el estómago mientras intentaba cobrar una deuda por drogas.

Originalmente acusado de dos cargos de asesinato en primer grado, la Fiscalía le ofreció un trato ventajoso en 2003 y se declaró culpable de asesinato en segundo grado a cambio de declarar contra su coacusado, quien finalmente fue absuelto.

A pesar de los incansables esfuerzos de Jessica, la hija de Melo, Gagne obtuvo la libertad condicional en Ottawa en 2023.

Esta libertad fue suspendida tan solo un año después debido a la preocupación de que estuviera violando numerosas condiciones, como salir de sus límites geográficos, borrar mensajes de texto, relacionarse con trabajadoras sexuales y no revelar los miles de dólares prestados que gastaría en inversiones en criptomonedas.

Tras una audiencia formal en enero, su libertad condicional fue revocada oficialmente.

“Ha demostrado ser un manipulador eficaz y astuto del sistema”, concluyó el panel. “Usted mismo admitió en audiencias anteriores haberle seguido el juego y haber repetido como un loro el lenguaje del programa”.

En marzo, a Gagne se le concedió una apelación, en parte porque había descubierto sus raíces indígenas.

En su audiencia, su oficial de libertad condicional sostuvo que su riesgo es “inmanejable” en la comunidad y que, en aras de la seguridad pública, la junta de libertad condicional debería confirmar la decisión de revocación.

GAGNE DICE QUE HA APRENDIDO LA LECCIÓN
Gagne admitió haber mentido y quebrantado las reglas, pero insistió en que había aprendido la lección.

“Soy un idiota; no pensé”, dijo.

“Me caí del caballo; tomé malas decisiones, ¿verdad?”, continuó Gagne. “Estaba emocionalmente abrumado. Ahora estoy bien. He vuelto a la normalidad. Estoy decidido a no volver aquí. Como dije, ya no pertenezco aquí”. Le dijo a la junta que estaba visitando a su madre enferma cuando encontró su tarjeta de estatus y se enteró de su ascendencia por primera vez. Pero admitió que no había buscado ningún servicio indígena ni la ayuda de un anciano desde su regreso a prisión.

“Su supuesta conexión solo apareció cuando le convenía”, argumentó la hija de Melo en su elocuente declaración de impacto de la víctima. “Es otra estratagema, una tarjeta para ‘Salir de la cárcel gratis’, por así decirlo”.

Esta madre de tres hijos que vive en Columbia se sintió aliviada de que la junta de libertad condicional descubriera sus engaños, pero sabe que es un indulto temporal y que pronto tendrá que cruzar el país de nuevo para comparecer en otra audiencia.

“Estoy segura de que es solo cuestión de tiempo hasta que presente otra apelación o intente buscar otra perspectiva”, suspiró, “porque está decidido a que lo liberen”.