Un adelanto de lo que la policía ve a diario en los débiles tribunales. Una y otra vez.

Un adelanto de lo que la policía ve a diario en los débiles tribunales. Una y otra vez.

 Este reincidente criminal es Cassim Cummings, de 33 años, está acusado por enésima vez de asalto y otros delitos. Foto/Policía de Toronto.

• Esta semana, los miembros de la fraternidad criminal de Toronto se quedaron con las de ganar.

Por Brad Hunter

¿Yo? No podría ni empezar a elegir al jugador de la semana, pero hubo dos figuras destacadas cuya dedicación al arte es notable. Pero… nos apresuramos a añadir que ninguno de los cargos se ha probado en los tribunales.

Así que, damas y caballeros, tras la puerta número uno, les presentamos al hampón Cassim Cummings, de 33 años y residente de Toronto. Fue arrestado por haber atacado a un desconocido en North York la semana pasada.

Ataque no provocado
Según la policía, la agresión ocurrió en la zona de Yonge St. y Empress Ave. el 26 de noviembre. La víctima caminaba tranquilamente por la zona cuando el desconocido se le acercó por detrás y lo agredió, dejándole heridas leves.

El motivo del ataque es una incógnita. Cummings está acusado de un cargo de agresión con lesiones corporales. ¿Entendido?

En 2013, este criminal, Cummings, apuñaló a un pasajero de la TTC en la estación de Davisville. La víctima tuvo la osadía de pedirle al atacante que dejara de molestar e intimidar a otros pasajeros y fue agredido por ello. Afortunadamente, la víctima se recuperó, mientras que Cummings fue acusado de intento de asesinato y agresión con agravantes.

Fue condenado a cuatro años de cárcel por el apuñalamiento. Ese mismo mes, fue acusado de dos cargos de agresión y un cargo de amenaza de lesiones corporales por incidentes en las estaciones del metro de Finch y North York Centre. Se estableció que estranguló y amenazó a un hombre golpeando repetidamente a un guardia de seguridad que trató de intervenir.

En 2016, Cassim Cummings volvió a ser el centro de atención por amenazar a pasajeros de la TTC (¿hay alguna conexión entre esto y la situación?). En ese momento, gracias al débil sistema judicial, estaba en libertad condicional por el apuñalamiento de 2013. Fue acusado nuevamente de dos cargos por daños a la propiedad, dos cargos de agresión a un agente del orden público e incumplimiento de una de varias órdenes de libertad condicional.

Para entonces, ya tenía a su haber docenas de condenas previas. Una leyenda total que vale la pena considerar.

Secuestro a punta de pistola

Esta otra escoria es Tajahan Kelly. Foto FACEBOOK

Pero no voten todavía… Otro delincuente, Tajahan Kelly, de 30 años y residente de Toronto, no se queda atrás. El martes por la noche en Rexdale, la policía afirma que un cuarteto de delincuentes, incluyendo a Kelly, intentó secuestrar a punta de pistola a una persona.

Según la policía, los matones se llevaron a la víctima por la zona durante aproximadamente una hora “haciéndole exigencias”. Después, la pandilla, que no podía disparar con precisión, enfrentó al dueño de la casa con una escopeta, se robaron dinero en efectivo, joyas, droga y la Ford F-150 del dueño, y luego huyeron.

En el último caso de Kelly, nuestro hombre enfrenta una serie de cargos por secuestro, robo y posesión de armas de fuego. También puede incluir el de desobediencia.

En 2014, Kelly fue arrestado y acusado por allanamiento de morada en Oakville. Los hampones entraron a la fuerza en un apartamento donde una mujer estaba sola. El equipo de bandidos estaba armado con cuchillos y buscaban dinero en efectivo y drogas.

Una huella dactilar condujo a los detectives a una casa en Mississauga, pero Kelly huyó, conduciendo un vehículo por la acera y chocando contra dos vehículos policiales sin distintivos. Dos semanas después, Kelly se entregó a la policía de Halton.

Fue acusado de robo, allanamiento de morada, conducción peligrosa de un vehículo, posesión de un arma peligrosa y uso intencional de un disfraz.

En 2018, Kelly tuvo que afrontar un grave problema durante una investigación multijurisdiccional sobre drogas y armas de fuego. La policía le incautó armas, grandes y pequeñas, una ametralladora, un rifle de asalto, silenciadores, granadas, chalecos antibalas, cocaína, metanfetamina, heroína, fentanilo y 85.000 dólares en efectivo. Fue a corte y de nuevo salió como Pedro por su casa.

Más recientemente, en noviembre de 2024, en Thunder Bay, una llamada por disturbios a primera hora de la mañana desató un nuevo lío para Kelly. Había un arma apuntando a la policía, un vehículo en fuga que por poco rozó a un agente. Un asunto de por demás turbio.

A Kelly se le imputaron cargos por drogas, obstrucción a un agente del orden público, posesión de armas, conducción peligrosa de un vehículo, y además, se le puede añadir esta marca de grandeza: incumplimiento de las múltiples condiciones impuestas por una orden judicial.

¿Son Cassim Cummings y Tajahan Kelly casos aislados? ¿Anormalidades en nuestras junglas urbanas?

No. Tipos como ellos son tan comunes como la tierra.