“Mi consejo sería no ir a EE.UU.”: Experto advierte sobre los riesgos de ser arrestado

“Mi consejo sería no ir a EE.UU.”: Experto advierte sobre los riesgos de ser arrestado

• Un número creciente de canadienses, incluidos niños pequeños, han sido arrestados o detenidos por las autoridades de inmigración de EE. UU. en los últimos dos años, según datos gubernamentales recientemente publicados, obtenidos a través de un caso judicial federal de EE. UU. Además se encuentran revisando las redes sociales de los viajeros.

Las cifras, analizadas por  la estación CTVNews.ca utilizando herramientas de datos desarrolladas por el Proyecto de Datos de Deportación, se publicaron como parte de una demanda que el proyecto presentó contra el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE).

Los datos muestran que más de 200 canadienses han estado bajo custodia del ICE en algún momento desde enero, en comparación con los 137 detenidos en 2024. Si bien el aumento se aceleró este año, los registros muestran que algunas detenciones se remontan a antes de que Trump, comenzara su segundo mandato.

Los registros de detención del ICE indican 434 estancias en centros de detención de canadienses entre septiembre de 2023 y mediados de octubre de 2025. Dos de esos casos involucraban a sujetos con condenas por delitos graves con agravantes, mientras que seis personas tenían otros antecedentes. La gran mayoría (366 personas) no tenía antecedentes penales por delitos graves o con agravantes.

Los delitos graves con agravantes abarcan una extensa lista de delitos bajo la Ley de Inmigración y Nacionalidad INA 101(a)(43), desde delitos violentos hasta ciertos delitos de fraude y contrabando, e incluso algunos delitos menores.

Sharry Aiken, profesora de la Facultad de Derecho de la Universidad de Queen’s, afirmó que el marcado aumento refleja un cambio fundamental en la aplicación de la ley, más que un aumento repentino de la delincuencia.

“No nos referimos a personas con antecedentes de agresiones violentas ni de ningún tipo de violencia”, declaró a CTVNews.ca. “Estamos analizando infracciones penales muy leves, pero suficientes para llamar la atención de las autoridades estadounidenses”.

Los datos muestran que 94 canadienses fueron detenidos por no tener visas válidas, mientras que 66 fueron retenidos por exceder la duración de sus visas de no inmigrante. Aiken afirmó que, históricamente, estos casos se gestionaban de forma muy diferente.

“En el pasado, si alguien era identificado en Estados Unidos sin la documentación adecuada, solía solicitarle que se marchara”, explicó. “No se detenía a personas de forma rutinaria como complemento a este proceso. Así que eso es lo que ha cambiado”.

“Es por culpa de Trump”
Trump ha impulsado una reforma radical del sistema migratorio durante su segundo mandato, que incluye planes para deportaciones masivas, una reducción en la admisión de refugiados y el fin de la ciudadanía automática por nacimiento para muchos niños nacidos en territorio estadounidense.

“Por supuesto, es por culpa de Trump. No hay duda al respecto”, afirmó Aiken. “Esto no sucedía con la misma intensidad bajo la administración Biden, y está directamente relacionado con las órdenes ejecutivas que Trump emitió cuando asumió el cargo a principios de este año”.

Los registros también muestran que al menos seis niños canadienses, nacidos entre 2009 y 2024, fueron detenidos durante ese período. Un niño canadiense permaneció detenido 51 días, más del doble del límite de 20 días establecido por un antiguo acuerdo judicial estadounidense que regula las protecciones para los niños migrantes bajo custodia estadounidense.

Cuatro de los niños fueron detenidos en el Centro Residencial Familiar del Sur de Texas, un centro que a principios de este año fue objeto de una demanda legal por falta de agua potable, atención médica y asistencia legal.

“Lo que estamos viendo es una situación en la que los niños son detenidos en condiciones a veces atroces”, declaró Aiken. “No tienen acceso adecuado a alimentos, atención médica ni tiempo al aire libre, y mucho menos a asistencia legal que les ayude a salir de allí. Por lo tanto, es realmente preocupante”.

El abogado de inmigración Warren Creates afirmó que los niños rara vez son el objetivo principal de las medidas de control.

“Probablemente estén sucediendo muchas cosas, menos relacionadas con los niños y más, quizás, con sus padres o tutores”, declaró a CTVNews.ca. “Si los padres o tutores no tienen el estatus migratorio adecuado, toda la familia podría ser objeto de lo que se conoce como deportación acelerada”.

“Cualquiera podría verse atrapado”
Varios canadienses también fueron detenidos en el Centro de Procesamiento de Servicios Krome North en Florida, un lugar criticado repetidamente por defensores de los derechos humanos por el hacinamiento, el acceso limitado a un abogado y el uso de confinamiento solitario prolongado.

Wayne Petrozzi, profesor emérito de política y administración pública de la Universidad Metropolitana de Toronto, afirmó que los canadienses a menudo subestiman la facilidad con la que pueden infringir las normas estadounidenses.

“Más vale que esté alerta si voy a cruzar esa peligrosa frontera, porque es como meter la mano en un ventilador: me voy a lastimar”, declaró en una entrevista con CTVNews.ca.

Las operaciones del ICE han estado bajo un creciente escrutinio público desde que Stephen Miller, subjefe de gabinete de la Casa Blanca, anunció que los agentes del ICE se centrarían en al menos 3.000 arrestos diarios, sin importar de dónde sean.

Petrozzi afirmó que la presión para aplicar la ley se debe a este ambicioso objetivo numérico, y que los funcionarios de inmigración intentan alcanzar la cuota a cualquier precio.

En un correo electrónico a CTVNews.ca, Asuntos Globales de Canadá afirmó tener conocimiento de múltiples casos de canadienses (incluidos menores) que se encuentran o han estado detenidos por motivos migratorios en Estados Unidos y que han recibido solicitudes de información y asistencia de personas y sus familiares.

Una vez que se reporta una detención, los funcionarios se esfuerzan por contactar a los detenidos y ofrecerles servicios consulares, lo que incluye ayudar a los detenidos a contactar con sus familiares, proporcionarles información sobre asistencia legal y abogar ante las autoridades locales cuando existen sospechas fundadas de maltrato, según el departamento.

Creates afirmó que la capacidad de intervención de Canadá es limitada.

“Ya han declarado públicamente que no intervendrán en ningún caso que involucre a ninguna persona que no tenga estatus migratorio en Estados Unidos o que haya violado sus términos y condiciones de entrada”, declaró. “No estoy seguro de que sea una política sensata, pero tampoco estoy seguro de qué pueden hacer”.

El aumento del número de detenciones se produce en medio de un mayor escrutinio del ICE tras la muerte de un canadiense bajo custodia a principios de este año. En junio, Johnny Noviello, de 49 años, falleció tras ser encontrado inconsciente en el Centro de Detención Federal de Miami.

Una revisión interna del ICE publicada en noviembre reveló que padecía afecciones médicas de larga duración, como hipertensión y un trastorno convulsivo, y signos documentados de deterioro de su salud física y mental en las semanas previas a su muerte.

Los datos del ICE revelaron que otras 15 personas fallecieron en 2025 bajo custodia.

Aiken afirmó que las consecuencias de la represión pueden extenderse a quienes creen estar cumpliendo las normas.

“Estaba hablando con una colega aquí en Toronto que me contó un caso terrible”, dijo. “Una persona protegida, a quien se le concedió estatus de protección en Canadá, pensó erróneamente que podía viajar a Estados Unidos para visitar a un familiar”.

Esa persona fue detenida por el ICE y deportada a un tercer país, a pesar de que Canadá estaba dispuesto a recibirla, dijo Aiken.

“Cualquiera podría verse atrapado”, añadió. “Y, sin duda, las personas que no son canadienses de nacimiento corren un mayor riesgo”. Para los canadienses que estén considerando viajar a Estados Unidos, Petrozzi ofreció un consejo contundente.

“En realidad, mi consejo sería que no vayan”, dijo. “Creo que los riesgos ahora superan cualquier beneficio”.