Ministra de empleo dice que millones de canadienses pasarán ‘sin problemas’ del CERB a EI a finales de mes

Ministra de empleo dice que millones de canadienses pasarán ‘sin problemas’ del CERB a EI a finales de mes

El programa CERB ha sido criticado por ser demasiado generoso a $ 2,000 por mes, creando un desincentivo para que miles beneficiarios regresen al trabajo.

OTTAWA .- La ministra de Empleo, Carla Qualtrough, aseguró que el gobierno federal canalizará sin problemas a millones de canadienses de su programa clave de ayuda financiera COVID-19 al seguro de empleo (EI), ya que se avecina una importante fecha límite de fin de mes.

Qualtrough dijo que las personas que actualmente aprovechan el Beneficio de Respuesta a Emergencias de Canadá (CERB) pasarán a EI “sin problemas y sin interrupción de los beneficios”. Reiteró las afirmaciones de que el programa EI está preparado para manejar una afluencia de beneficiarios, que deberán ser transferidos del CERB a fines de agosto.

“Es robusto, está listo para ingerir los millones de canadienses que necesita”, dijo durante el período de preguntas en el Parlamento.

El gobierno federal ha dicho que terminará el CERB, que se espera que cueste a los contribuyentes $ 82 mil millones, para fin de mes, mientras busca lidiar con una población que está regresando lentamente al trabajo. Qualtrough dijo que el gobierno estaba “a semanas de hacer esa transición” en la Cámara de los Comunes el miércoles.

La finalización del programa subraya el difícil acto de equilibrio que enfrenta el gobierno del primer ministro Justin Trudeau, ya que busca alejar a los canadienses de los apoyos de COVID-19, al tiempo que garantiza que los trabajadores desempleados o parcialmente empleados continúen recibiendo una cobertura adecuada.

El programa CERB ha sido criticado por ser demasiado generoso a $ 2,000 por mes, creando un desincentivo para que muchos beneficiarios regresen al trabajo.

Una encuesta realizada el mes pasado por la Federación Canadiense de Empresas Independientes, que representa a 110.000 pequeñas y medianas empresas, encontró que el 27 por ciento de los dueños de negocios se habían encontrado con trabajadores que “se negaron a regresar al trabajo cuando fueron retirados”. De los que se negaron a regresar, el 62 por ciento dijo que prefería permanecer en el programa CERB, según la encuesta del 16 de julio.

Un total de 8,5 millones de canadienses han sido aprobados para el beneficio del CERB al 2 de agosto, por un costo total de $ 64 mil millones, según datos del gobierno.

Qualtrough también habló con el Comité de Finanzas de la Cámara de los Comunes sobre la controversia WE Charity, en la que se distanció de la decisión inicial de buscar un tercero para administrar un programa de apoyo estudiantil.

La ministra dijo que no sabía por qué se retiró de la agenda una discusión programada sobre el programa de becas de servicio estudiantil de Canadá (CSSG) antes de una reunión de gabinete del 5 de mayo, que desde entonces se ha convertido en un foco central de la controversia.

“No participé en ninguna discusión sobre por qué se eliminó esto de la agenda, [ni] la solicitud del primer ministro de debida diligencia, ya que este no era mi expediente”, dijo.

agregó que estaba al tanto de que el primer ministro y su esposa, Sophie Grégoire Trudeau, habían asumido compromisos para hablar con la organización WE, pero no tenían más conocimiento sobre las conexiones entre los miembros liberales y la organización benéfica.

Qualtrough también repitió su defensa sobre por qué el gobierno liberal usó a un tercero para administrar el programa CSSG de $ 900 millones, diciendo que el servicio público en ese momento estaba demasiado preocupado por los principales programas COVID-19 como CERB.

“Hubo problemas masivos a lo ancho de la banda del servicio público, les pedíamos que hicieran mucho en ese momento”, dijo.